☾︎𝑨𝒍𝒚𝒂 𝑩𝒍𝒂𝒄𝒌☽︎ -𝑹𝒆𝒎𝒖𝒔 𝑳𝒖𝒑𝒊𝒏 [COMPLETA] ✓

𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 1*

~Agosto, 1969~

Alya de 9 años estaba vistiéndose con un horrible vestido que su madre había elegido para ella, era la boda de su hermana mayor Bellatrix, Alya acomodaba su cabello en una pequeña trenza en forma de diadema.

Hasta que alguien tocó la puerta

—¿Puedo pasar? — preguntaron casi en un susurro

—Adelante Andy —Su hermana Andrómeda entró rápidamente a la habitación

—¿Pasó algo?

—No quería molestar, nuestra madre piensa que estoy conversando con un chico sangre pura

—Oh, ¿Bella ya esta lista?

—Ya

—¿Cómo esta?

—Creo que bien, dice que no puede esperar más para casarse y traer honor a la familia —comentó con amargura —¿Estás lista?

—Si, ¿Ya es hora de bajar?

Justo en el momento en el que Andromeda iba a responder alguien mas entro a la habitación, era Narcissa, entró apresuradamente con las mejillas color rojas

—Lo siento, creí que la habitación estaba desocupada

—Es mi habitación Cissy —recordó la menor —¿Qué te pasa?

—Lucius Malfoy esta abajo hablando con nuestro padre, ¿Creen que sea algo relacionado a mi?

—Tal vez —dijo Andromeda

—¿Me veo bien? —preguntó la rubia, las hermanas sabian el loco enamoramiento de Narcissa hacia Lucius Malfoy y que muy probablemente en el futuro tendrían un compromiso.

—Si — respondieron ambas

Alya llevaba una relación diferente con cada una de sus hermanas, Andromeda era su amiga y confidente, alguien con quien podría contar siempre, por otro lado Narcissa era la más reservada, cuando estaban en casa hablaban solo lo necesario y Bellatrix era todo lo contrario a Andromeda, Bella le recordaba cada día cómo era que tenía que comportarse frente a cualquier situación

Alguien más entró a la habitación, —¿Nadie respeta la privacidad en esta casa? —Pensó, pero esos pensamientos se fueron cuando vio entrar a su madre, Druella

—Aquí están, ¿Qué esperan para bajar?, la ceremonia esta por iniciar —reprochó con su horrible tono de voz

—Estábamos por salir, madre —contestó Andrómeda

— Quiero que se comporten, especialmente tu Alya — advirtió mientras la señalaba con un dedo

Alya estaba luchando internamente con ella para no quedarse dormida, la ceremonia de la boda era más que aburrida, Andy le daba codazos cada vez que veía a su hermana tambaleando la cabeza de sueño.

Cuando la ceremonia terminó era hora de la fiesta, Alya lo único que quería era tomar toda la comida que fuera posible para llevársela a su habitación antes de que su madre la arrastrara a entablar conversación con alguien, pero no fue rápida de un momento a otro su madre ya la tenía sostenida del brazo para llevarla a conversar con un chico un poco más grande que ella

Mientras la persona frente a ella hablaba sin parar vió a alguien llegar

—¡Sirius! — gritó emocionada

—¡Alya! — respondió su primo corriendo hacia ella

Ambos niños se envolvieron en un abrazo sin importar las miradas de la gente a su alrededor, rapidamente Sirius tomó una bandeja de aperitivos y subieron a la habitación de Alya

—¿Cómo estás?

—Pues creo que bien, lo único bueno de este horrible compromiso es que Bellatrix se vaya de la casa —dijo con diversión — ¿tú?

—Mal

—¿Por qué?

—Aún faltan algunos años para que mi carta de Hogwarts llegue y ya no aguanto estar más en casa

—Oh, lo sé, lo único bueno es que estaremos en el mismo curso

—Si... Tengo algo importante que decirte Alya

—¿Qué es?, ¿No me digas te enviaran a Drumstrang?

—No yo no quiero ser un Slytherin, quiero estar en Gryffindor

Ella casi muere ahí mismo ante tal confesión, nunca se planteo la idea de pertenecer a otra casa, toda la familia pertenecia a Slytherin, era completamente normal que ella también perteneciera ahí

— ¿Estás loco a caso?

—No quiero ser igual a mis padres o a los tuyos, Alya

—Pero es una tradición, todos los Blacks...

—Si, si ya lo sé, todos los Black pertenecen a Slytherin, supongo que cambiare eso

Después de un largo silencio por parte de ambos Alya habló

—Promete que no vas a dejarme aquí sola Sirius — sabía lo que implicaba ser un Black, la importancia del linaje y el legado familiar pero tambien sabia el peligro que habia en la familia y no quería estar ahí sola

—No lo haré, te lo prometo — Juró mientras le daba una pequeña sonrisa

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