Demonios... ¿Ahora qué? - |Lemon| [Obey Me! - Shall we date?]

|🌱| - Satan | Derogatory

Satan al igual que Mammon practicamente tampoco había salido de su habitación, pero a diferencia de Mammon que no había salido por miedo a lastimar a T/N, Satan no había salido porque llevaba todo ese tiempo masturbandose hasta no poder más.

Satan no era conocido por tener mucha paciencia y mucho menos ganas de controlar su ira, un día simplemente decidió no aguantar más, su miembro endurecido y la voz de la chica cada que pasaba frente a la habitación o hablaba con alguno de sus hermanos cerca de esta le volvía loco.

Solo hizo falta una pequeña casualidad, que T/N pasara enfrente de su habitación justamente el día que Satan ya no aguantaba más, sentado contra la puerta de la habitación tras masturbarse y venirse no por primera vez en el día. Escuchó los pasos de la chica frente a su habitación y no tardó en abrir la puerta y jalarla dentro a la vez que se ponía de pie.

T/N se asustó unos segundos hasta notar de quien se trataba. Satan la había puesto contra la puerta de espaldas a el, sujetando sus caderas mientras empezaba a besar su cuello.

—S-Satan?...— Tartamudeó, sintiendo el endurecido y húmedo miembro de Satan pegarse de su trasero.

—Y si me ayudas aqui? Hm?... Será rápido, lo juro...

Susurró en su oido, deslizando sus manos desde las caderas de T/N hasta los botones de su pantalón desabotonandolos y bajandolos lento, completamente embobado por el olor de la chica.

—Anda, separa las piernas para mí...

T/N obedeció estremeciendose al sentir a Satan besar y morder su cuello algo desesperado dejando pequeñas marcas en este. Bajó los pantalones de la chica junto con su ropa interior, colocando una pierna entre las de ella para mantenerlas separadas.

La chica se estremeció al sentir un dedo de Satan deslizarse entre sus labios inferiores, rozando su clítoris haciendola temblar lento, aferrandose de la puerta que evitaba que cayera.

—Vaya... Ya estas tan húmeda aquí abajo y solo con esto? Eres tan sucia, T/N... Y yo que estaba tan preocupado de herirte...

Susurró con una sonrisita maliciosa, provocando un sonrojo apenado en el rostro de la chica.

—N-No soy sucia...—Balbuceó como pudo, sintiendo esta vez dos dedos de Satan masagear su clitorís con lentitud, uno a cada lado de este, provocando suaves jadeos y suspiros en ella.

—Ah, no?... Y por que no me apartas?... Yo digo que te esta gustando... Quizás tu también te masturbabas pensando en esto...— Apartó su mano viendo los liquidos de la chica deslizarse en estos —Que tal si me muestras como lo hacias ¿Hm?...— Tomó la mano de la chica acercandola a sus partes.

—Satan, por favor...— Murmuró la chica avergonzada, mirandolo de reojo.

—Por favor que?.. Acaso quieres que lo haga yo? No puedo creer que seas tan pervertida...— Dijo entre risitas, cargandola para llevarla a aquel mueble donde el solía sentarse a leer. —Abre las piernas para mí ¿Si? Sé buena, no quieres hacerme enojar ¿O si?— Dijo con una leve sonrisa, que por unos segundos dió algo de mala espina.

La chica con curiosidad de saber a que se referia con "Hacerlo enojar" incluso junto las piernas aún más, haciendo que Satan frunciera el ceño levemente.

—En serio vas a esforzarte en hacerme enojar?— Dijo acercandose y separando las piernas de T/N con cierta rudeza. —Esa no es una muy buena idea ¿Lo sabes, no?— Susurró mirandola como si le estuviera dando otra oportunidad. La chica aún con intenciones de hacerlo enojar aunque sea un poco volvió a cerrar las piernas sin siquiera decir algo, tan solo mirando al rubio fijamente a los ojos.