-Estoy harto de ti, todos los días tengo que verte toda desarreglada, ojerosa, y miles de cosas más! es el colmo, eres poca cosa habiendo tantas mujeres estoy contigo!!- gritaba Alejandro a Eurídice mientras ella le preparaba la comida.
-Mira Alejandro, tal vez no sea la mujer modelo "perfecta" para ti, pero al menos tienes una mujer que te lava, te plancha, te hace de comer, veo por la niña, y muchas cosas más que tu no vez, cuando te vas a emborracharte y buscar mujeres!- le grito Eurídice
- Mejor cállate la boca, a ti no te incumbe eso es mi problema! Entiendes! Así me vaya con quien me vaya, no es tu problema! - le levanto la voz Alejandro, empujándola hacia atrás.
- Mira voy hablar a Emma para que venga a comer si? Por favor no hagas esos numeritos delante de la niña, bastante ya tiene, que en ocasiones nos escucha discutiendo, es una niña, hagámoslo por ella. - Le dijo Eurídice al mismo tiempo que suspiraba y su mirada soltaba un aire de melancolía profunda, en los ojos se podía mirar un océano de tristeza y su rostro pedir a gritos una salida.
Comieron los tres juntos, sin mencionar palabra, Emma simplemente observaba a sus padres, y agachaba la cabeza sin decir nada.
- Mi hija Emmita no merece esta vida, pero no se que le podría ocasionar si me separo de su padre- dijo entre sus propios pensamientos Eurídice.
-Lo amo, se decía a si misma-su cabeza le daba mile de vueltas, enredada en sus emociones, no sabía cómo liberarse de este amor, que la estaba destruyendo pedazo a pedazo.
- Ya me tengo que ir- espetó firmemente Alejandro.
- Pero no has acabado con tu plato de comida- le contesto Eurídice
- Ya se me quito el apetito de seguirte viendo la cara- reviró los ojos en forma de fastidio.
- De acuerdo anda ve, a donde te plazca.
- Mami, papi, ustedes me quieren? - Cuestiono Emma
- Claro mi amor, soy tu madre, no sabes cuánto lo eres todo para mi princesa, no digas eso.
- Saben mejor me largo, prefiero eso- Menciono cortante Alejandro
-Mami, porque papá, es así contigo, ya no nos quiere?
-No, mira mi amor, no es eso, sabes aveces las familias tienen problemas, que con el tiempo se resuelven si? Ya no pienses en eso, vale, ve a hacer la tarea, recogeré los platos y los lavare.
-Si mamá, esta bien.
ESTÁS LEYENDO
LA AGONÍA DE EURÍDICE
Non-Fiction¿Era todo mi culpa? Quizá sí, por dejarme vencer, por no cuidar, ni querer a mi alma, esta cada vez en agonía, vagando buscando un refugio para mí destrozado corazón.. cada día moría un poco más...
