Consejo de Amor- Juan Pablo Villamil

28- Locos

-¿Esto es un sueño?- preguntó y reí negando con mi cabeza

Estábamos en el auto, justo en frente a la casa de Soledad. Habiamos llegado hace unos diez minutos pero no nos queríamos despedir, no quería soltarla del abrazo que nos estábamos dando

-¿Mañana vuelven a Madrid, verdad?- preguntó con un tono triste

-Si, pero en una semana volvemos. Vamos a grabar y tenemos vacaciones- respondi y una pequeña sonrisa se asomó en su cara- Y pensar que tuve que insistirle para que nos veamos

-Esto era una de las cosas que me daban miedo- comento y la mire para prestarle atención- Tener la necesidad de verlo todos los días

-Yo la tenía antes de conocerla en persona, imagínese

-Estamos locos- dijo y reimos

-Yo le pondría otro nombre, pero bueno- me miro divertida y sonreí

-¿Cual?

-¿Me va a hacer decirlo?- evite su mirada y carcajeo

-Usted abrio la boca, ahora dígalo

La mire y suspire

-Estoy tan enamorado de usted- dije remarcando el "tan"- que vendría de Madrid a Bogotá, nadando, solo para verla

-Eso no es estar enamorado, eso es estar demasiado loco- respondió risueña y me dio un abrazo- Tengo que irme

-¡No!- exclamé y la abrace más fuerte, haciéndola reir- No se vaya

-Si no me voy ahora llegará tarde a su casa, y no me gusta- se separó y me dio la mano- Gracias por hoy

-Cuando quiera- respondí y me dio un beso en la mejilla, para luego salir del auto

-Adios- se despidió con una sonrisa y se fue

Estoy frustrado ¿Esa era su manera de despedirse?

La puerta del auto se abre nuevamente y siento su risa cerca de mi. Agarró mi cara con sus dos manos y me dio otro beso, el cual acepte claramente gustoso, con ganas de nunca olvidarlo

Gracias Dios

Me regala otra sonrisa y vuelve hacia su casa

Me suena el teléfono antes de empezar a conducir y sonrió extrañado al ver su nombre en la pantalla

-¿Que pasa?

-Yo también estoy enamorada de usted

Llamada Finalizada