~Amor para un Omega~ (GoYuu)

Capítulo 11.

Cinco años después.

Itadori.

Al despertarme me di cuenta que despertador no había sonado como acostumbraba y eso significaba solo una cosa y era llegar tarde a la escuela.

Los profesores ya protestaron hace una semana por el echo de haber llegado tarde y eso fue cuando....decidí ir a ver primero al abuelo al hospital. Obviamente no me castigaron ni nada, solo me dieron la tipoca charla que nadie quiere escuchar pero te la tienes que tratar por que no puedes salir huyendo.

–¡Dios mio! ¡Me van a castigar! –Grite mientras me vestía  toda prisa y después salía corriendo.

La escuela no me quedaba demasiado lejos o al menos no tanto...si vas a un ritmo aceptable. Llegue justo a tiempo las puertas estaban apunto de cerrarse y el profesor que se encargaba de hacerlo simplemente se burlo un poco de mi.

–Un poco más y no llegas derrapando. –Dijo algo burlo aunque no parecía estar diciéndolo de manera ofensiva, el tampoco se estaba riendo de mi y eso lo agradecía enormemente.

Me rasque algo nervioso la nuca en cierto punto que me hizo estremecer un poco pero después simplemente negue con la cabeza.

–Me quede dormido...ayer estuve hasta tarde con mi abuelo. –Comente algo apenado.

Su mirada se lleno de compresión y me dio un ligero empujón cariñoso para giarme a la sala del club.

–Los del club te estuvieron buscando, al parecer a noche te esperaron para que le dieras cierto objeto que encontrastes. –Hablo con seriedad por mi parte me quede quieto antes de asentir con la cabeza.

Hacía unas horas estuve en busca de un objeto "maldito" el cual había quedado en dárselo a los chicos exactamente ese mismo día, pero las dificultades y por qué quiera quedarme con mi abuelo decidí dárselo el día de hoy.

Me despedí del profesor con la mano para entrar de manera alegre, ellos dos parecia en un estado de ánimo bastante malo y era para estar triste al saber la noticia.

–¡Quieren cerrar nuestro club! –Grito el chico que se sentaba a la izquierda de la presidente. –Dice que nuestro trabajo no es tan importante como los deportes....¿te puedes creer?

–No quiero que cierren nuestro quedirisimo club, con lo mucho que nos hemos esforzado. –Comento la chica algo cabizbajo.

–Bueno el entrenador sigue queriendo que estés en si equipo, Yuuji. –Dijo mi amigo de manera suave. –La verdad es que eres sorprendente...para ser un omega, eres hábil, listo, fuerte y resistente al igual que un alfa.

Mi rostro enrojecio ante tantas alabanzas y comence a reír de manera nerviosa, no era la primera vez que lo oía pero...aun seguía sin acostumbrarme. Les entregue el objeto maldito, parecia bien envuelto y parecía ser un ¿dedo?

No entendía bien que tiene de maldito un dedo pero si las leyendas decían que si...sería por algo. Además había algo en el...que me olía bien, era un olor a un alfa, pero eso era imposible, ¿verdad?

–Esto es lo que encontré anoche, fue algo aterrado por que estaba muy oscuro, por otro lado, no veo lo interesante en ese dedo. –Comente.

Ellos parecían apunto de decir algo encontra de mis palabras pero fueron interrumpidos por la voz del entrenador. Aquel hombre quería cerrar este lugar para poner algo de su club deportivo, un obstante lo siguiente que paso me lo esperaba.

Uff...una apuesta...en deportes.

–A ganar se a dicho. –Susurre suavemente para mi mismo, aunque el hombre me escucho a la perfección.

–Te ves muy seguro de ti mismo. –Hablo de manera egocéntrica.

El me guió hacia la zona donde se llevaría acabo y no mucho después se lucio lanzando la bola bastante lejos a decir verdad pero no era algo que yo no pudiera superar.

–Es por que estoy seguro de que voy a ganar. –Comente con una sonrisa antes de tomar mi puesto.

Calenté un poco antes de lanzar la pelota lo más lejos posible y dejar atrás el récord de mi quedirisimo maestro. El silencio se hizo presente y con eso comence a caminar lentamente hacia el otro lado.

–Eres un animal Itadori. –Hablo una voz realmente conocida para mí. – Dejastes la masculinidad de ese alfa por los suelos.

–¡Fushiguro! ¡Te he extrañado! –Grite contento y comence a acercarme a el para abrazarlo.

El parecia estar apunto de abrazarme cuando se tenso y se separo de mí.

–¿Porqué tienes esa energía maldita? –Pregunto rápidamente.

Como un cachorro que no entendía muy bien de qué estaba hablando, deje caer mi cabeza hacia un lado algo confundido.

–¿Energía maldita? –Pregunte.

Cuando Fushiguro estaba apunto de hablar me larghe corriendo al ver la hora que era, mi abuelo estaría esperando, desde la distancia me despedí del pelinegro y huir de allí lo antes posible.

¿Continuará?

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¡Hola a todos! Y esta listo el capítulo 11, espero que os guste y lo disfruteis mucho, y sobre todo lamento las faltas de ortografía. OwO

¡Que tengáis una buena tarde y noche!

¡Gracias por vuestro apoyo! 🦊