Jimin lo observo, había escuchado bien, su esposo acababa de gemir el nombre de alguien más, su corazón se rompió, se sintió estúpido pero no quiso apartarlo de encima suyo, dejo que se liberara en su interior y cayera rendido a su lado...
Un jaguar negro se estaciono afuera de la funeraria en donde Jungkook preparaba todo para Jimin, una mujer elegante bajo de una limosina negra, el sonido de sus zapatillas resonó en el lúgubre lugar, Jungkook giro para ver de quien se trataba, era su madre
-¿¡Que haces aquí!- Vocifero la mujer
-Me encargo de los gastos
-Usas el dinero de la empresa para ese maldito- escupió- el karma siempre nos alcanza- añadió satisfecha- bueno a Jimin lo arrollo- dijo riendo por su mal chiste
-¡Basta mamá!, él está muerto-refuto Jungkook iba a seguir hablando pero tenía un nudo en su garganta
-Los medios dirán que eres un tonto, encargándote de los gastos funerarios de tu ex esposo infiel- señalo la mujer sin una pizca de empatía
-¡Basta madre!, que no tienes consciencia- defendió Jungkook tomando asiento y llevando sus manos a su cabeza llorando
-¡Mírate! Llorando como un bebe por un tipo que claramente no lo merece- escupió con rencor mientras miraba sus perfectas uñas
-¡largo!- grito Jungkook temblando por la ira contenida
Su madre solo bufó molesta y se marchó de ahí.
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Un techo blanco, y el aroma a desinfectante, fue lo primero que percibió al abrir sus ojos pesadamente, trato de llevar una mano a su rostro para bloquear la luz, pero no pudo, la movió de nuevo, alzo la cabeza y vio que estaba atada a la camilla, al igual que su otra mano y sus dos piernas, se removió molesto, asustado.
-Tranquilízate por favor o volverán a sedarte- exclamo una voz nada familiar
Y lo vio, sentado con un traje negro, estaba Jeon Jungkook, la realidad lo golpeo, Jimin, el accidente, cirugía...muerte y sus ojos se llenaron de lágrimas de nuevo, comenzó a gritar, no podía con ese dolor que rasgaba su pecho y oprimía sus pulmones, sentía escocer sus muñecas y tobillos por la fricción que generaban sus intentos por moverse, pero no le importaba, no quería, que alguien detuviera todo, que alguien parara el dolor.
-¡Tranquilízate! ¡Yoongi!..te han sedado cinco veces ¡por favor!-pidió Jungkook
-¡¿Tu que mierda haces aquí!?- escupió con rencor- Tu hiciste sufrir a Jimin ¡lárgate!
-Hoy es el funeral, necesitas estar ahí, necesitas cerrar ese círculo
Yoongi dejo de forcejear-¿Cuánto tiempo paso?
-24 horas, cada vez que despertabas atacabas a alguien, tienes que calmarte para que te den el alta
El pelimenta no recordaba nada de eso
-Jimin te amaba, hasta el último momento te amó, eres un idiota, no lo mereces- exclamo Yoongi molesto
-Yo también lo amé, siempre será alguien importante para mí
