5.

1.5K 203 146
                                    

—Kacchan... —Deku interrumpió el silencio mientras caminaban a la mañana siguiente—. ¿Crees que planeen cómo confrontarnos?

—¿Qué más te da? —Bakugou espetó, con la mirada al frente—. Lo importante es que ya lo saben.

Al final, haber dejado ir al imbécil terminó por dar frutos. Desde que puso un pie en el área común más temprano esa mañana, Bakugou notó el cambio con que sus compañeros los observaban. Incluso ahora, podía notar cómo seguían mirándolos a través de los ventanales, examinando tanto a Deku como a él, mientras se alejaban de los dormitorios para ir a clase.

«Malditos chismosos», pensó, «si tan solo no necesitaramos que lo sean en este momento...»

—¿Seguirán haciendo eso todo el día? —Deku insistió después de un rato y la incomodidad era palpable por su tono de voz.

—Olvídalos y sigue caminando, Deku, sabíamos que esto iba a pasar —Bakugou siguió su propio consejo y avanzó, ignorando lo mejor que pudo la irritación que comenzaba a tensar su cuerpo—. Y allá ellos si son incapaces de venir y pedir una maldita confirmación de mierda.

Procuró respirar profundo para evitar seguir increpado al nerd. Eso no serviría de nada para el propósito de aquella farsa. Una discusión visible no apoyaría sus estúpidos esfuerzos de la noche anterior, ¿verdad?, por lo que solo entrecerró los ojos y resopló. No es que quisiera recordar lo cerca que estuvieron el uno del otro anoche, o con cuánto detalle logró ver las pestañas rizadas de Deku, o como se oía la voz del nerd cuando su tono era casi un susurro atrapante, mientras su aliento alcanzaba sus propios labios sensibles... 

Apretó la mandíbula con fuerza en un intento burdo de detener su memoria traicionera y aceleró un poco. No se permitía recordar todo lo sucedido, ni lo que su boca quiso hacer en consecuencia, punto. Así que agradeció que Deku se hubiera mantenido en silencio por tanto tiempo, no sabía cómo reaccionaría si este quisiera murmurar algo ahora. Sin embargo, debió saber que eso no evitaría que el nerd hiciera algo en vez de hablar. 

Bakugou escuchó los pasos decididos acelerando todavía más detrás de él, justo antes de que una mano cálida cuyas cicatrices empezaba a reconocer con facilidad, tomara la suya en un apretón fijo para llamar su atención. 

Su propio andar titubeó ante el contacto inesperado y por un instante, sus viejos instintos gritaron para soltarse y alejarlo de un golpe después de todo en lo que había estado pensando. Pero al final no cedió ante ellos. En su lugar, se encontró aferrado a este agarre cálido sin poder evitarlo, como si todo este tiempo acercándose a Deku en los últimos días, le hubiera enseñado a su cerebro a mantener al otro cerca por lo correcto que se sentía hacerlo. 

Todavía mirando al frente, tragó saliva mientras esa certeza se instalaba en su estómago. Eso estaba bien, si. Tomarse de las manos no era nada fuera de lo común. Este tipo de contacto era parte del acuerdo, después de todo. Así que respiró profundo, relajó su expresión lo mejor que pudo para quien pudiese estarlos viendo y se giró un poco, dedicándole a Deku una mirada que esperaba, fuera mucho más controlada que las avergonzadas del día anterior tras su casi beso.

—¿Qué? —gruñó por lo bajo y Deku le asintió con una determinación que iluminó de rosa el contorno de sus malditas pecas. 

El suspiro que le arrancó la vista de este sonrojándose, sirvió para diluir un poco la tensión previa acumulada en sus hombros. El nerd también estaba un poco afectado, Bakugou notó apenas se permitió examinar su rostro. Aunque la sonrisa que curvaba los labios llenos de Deku se tambaleó de forma casi imperceptible en cuanto él los miró… y brillaban también. ¿Por qué brillaban?, eso solo hacía que se vieran más suaves y carnosos y Bakugou frunció el ceño cuando su hilo de pensamiento llegó a una conclusión no requerida.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 19, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

No por amor [Bakudeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora