Prólogo

5K 341 122
                                    

┏─━─━─━∞◆∞━─━─━─┓

El Gato De La Guardiana

Prólogo

┗─━─━─━∞◆∞━─━─━─┛

La oscuridad de la noche facilitaba su libre movimiento sobre los techos de París.

Había recibido un mensaje que le había generado demasiado confusión, pero, aun así, había acudido al llamado. Ladybug, su compañera, le había pedido que saliera a patrullar en las cercanías al Colegio Françoise Dupont porque, quizás, encontraría algo interesante de ver. En otros tiempos, quizás hubiera tratado de indagar más ante aquella frase, pero conociéndola en su formación de guardiana que portaba ahora, quizás debía dejarlo pasar por esta vez y salir a investigar por su cuenta.

Aunque, siendo sincero, no tenía ni idea de que podría ser aquello ni siquiera cuando que se detuvo en el techo del recinto educativo y miró hacía el horizonte, rotando sobre sus pies. ¿Qué había ahí que pudiera encontrar interesante? El Sena estaba calmado, la plaza totalmente deshabilitada y su compañera Marinette apoyada en su balcón...

—Oh... —exclamó, mirando con algo de confusión su bastón. ¿Ladybug quería que él se encontrara con Marinette? ¿Por qué? ¿Pasaría algo con la joven? Frunció el ceño realmente intrigado por lo que estaba sucediendo. Iba a impulsarse para saltar hacia el balcón, pero se detuvo —No—se dijo negando con la cabeza. ¿Qué tendría que ver Ladybug con Marinette? Seguramente, debería ser otra cosa. Siguió revisando los alrededores, pero no podía evitar que su mirada se desviara a su amiga.

Lucía desanimada. Y por alguna extraña razón, que llevara puesta una capa lo intrigaba completamente.

—¡Como sea! —exclamó finalmente, afirmando su bastón para llegar a la pared contraria al balcón, se sentía mal por estar espiándola, pero no sabía si debía hacer o no, su aparición.

—Buenas noches, Chat Noir.

—Buenas noches —respondió e inmediatamente se quedó tieso en su lugar, llevando su mano a la boca, ocultándose completamente contra la pared que lo separaba del balcón de la chica de coletas. ¡Qué lo partiera un rayo! ¿Cómo se le ocurrió responder? ¡Era un idiota!

—Te esperaba —la voz de Marinette, hizo que el chico quitara la mano de su boca y tragara con dificultad antes de asomarse levemente por el desnivel de la pared que actuaba como cortafuegos—. Te invito a mi balcón, anda, ven. —insistió, mirándolo con un gesto de su mano.

No sabía porque razón se sentía tan desconfiado, la miró de reojo, sin quitar la vara de su pecho, como si quisiera defenderse con ella. Pero, ¿de qué?

Conocía a Marinette, sabía que ella era incapaz de hacerle daño, entonces... ¿por qué se sentía tan inseguro? Con suma prudencia, casi como si fuera un gato de verdad, fue acercándose lentamente, moviéndose por la barandilla metálica del balcón, hasta que quedó frente a ella, fue ahí que notó que su amiga no solo llevaba el cabello suelto, sino que, debajo de esa capa, vestía de una forma completamente distinta a la habitual, muy parecida al estilo de su madre. Una blusa con cuello Mao roja de botones de hilos dorados, con detalles de flores fina y delicadamente bordados en el mismo tono color oro y un pantalón bombacho negro, ajustado, unos cinco centímetros sobre el tobillo.

—¿Y ese cambio de look? —preguntó, intentando romper el ambiente tenso que había entre ambos, al ingresar a balcón.

—Es que —se miró las ropas y elevó los brazos para mover la capa como si fuera un acto de magia— un suceso nuevo y mágico está a punto de suceder. Y siendo sincera, estoy muy nerviosa.

—¿Nerviosa? —consultó el superhéroe, apoyándose contra la protección del balcón cruzando sus brazos—. ¿Pasa algo? ¿Puedo ayudarte en algo?

—De hecho, sí —afirmó, y se puso a su lado, aunque a diferencia de él, ella miró hacia lo que había fuera de balcón, Notre Dame, el río Sena... el nocturno París. Chat Noir a su lado, movió la cabeza de un lado hacia el otro, confundido y sorprendido. ¿Por qué necesitaría Marinette a Chat Noir? ¿Estaría en peligro nuevamente? ¿Será por eso, que Ladybug lo mandó sin decirle?

—Dime —le pidió, aunque Marinette no pudo evitar ladear un poco su sonrisa, ante el tono que utilizó, más que un pedido sonaba a suplica. Ella cerró los ojos y tras suspirar, apretó ambas manos en puños.

—El acto mágico que voy a efectuar, requiere de un asistente, así que pensaba en ti, para ese papel.

—¿En mí? —llevó la mano derecha a su cuello, aun más desconcertado que antes— ¿Por qué en mí?

—Porque necesito que seas "El gato de la guardiana" —dijo, soltando y apretando los puños, sin saber como soltarlo en realidad lo que debía hacer. Estaba acobardándose, perdiendo toda la fortaleza que reunió antes de mandarle el mensaje de voz, cuando escuchó la risa de su compañero que la terminó por desestabilizar— ¿Por qué te ríes?

—¡Ya entendí! —dijo chasqueando los dedos frente a él—. Es una obra, por eso la ropa, la capa y este pedido raro de ahora, ¿no es así? —preguntó, antes de empezar a reírse, cruzándose, nuevamente, de brazos. ¡Se había preocupado por nada! —. Vaya Marinette, estoy sorprendido de esto. Pero, si quieres que actué contigo, no hay problema —respondió, aun con tanta jocosidad en sus palabras, que la chica de ojos celestes terminó por molestarse. ¿Por qué no la tomaba en serio?

—¡No es eso! —protestó, apretando los puños, mirándolo irritada—. ¡No lo es!

—¿Entonces? —le preguntó con una sonrisa ladeada— ¿Por qué quieres que sea el gato de la guardiana?

—Porque soy Ladybug —respondió con seriedad, causando en Chat Noir tal sorpresa que el joven dejó caer sus hombros, producto del shock.

—¿Qué... cosa? —preguntó, con un leve tic en la mandíbula por aquellas palabras pronunciadas por Marinette.

—Eso, que soy Ladybug —volvió a susurrar en voz baja, para que solo él lo escuchara. Chat Noir parpadeó un par de segundos, tratando de procesar la información. Marinette... su amiga Marinette... y Ladybug, su amada Ladybug eran las... y en cuanto elevó la mano para señalarla, cayó al suelo como si estuviera petrificado.

Marinette puso los ojos en blanco por la reacción, en cuanto Tikki se puso a su lado.

—¿Se desmayó? —consultó, mirándolo preocupada.

—Eso parece —Marinette, llevó la palma de su mano a su frente antes de soltar el aire por la boca de forma brusca—. ¡Por todos los Miraculous! ¡Esto será más complicado de lo que pensé!

—No lo será —confió la Kwami de la creación pegándose contra su mejilla en señal de animo y aprecio—. El guardián Su-han, estará en lo correcto, ya lo verás.

—Eso espero, Tikki —respondió, elevando su mano izquierda, para acunar a la pequeña contra su mejilla—. Eso espero.

.

.

.

.

.

Y aquí estamos con una nueva historia...

Y con muchas sin completar xD

Espero tener tiempo para todo, mientras tanto dejaré está idea que vino a mi cabeza estos días y quería sacarla.

Como y cuando actualizaré... no tengo ni idea. Espero que sea un fic de periodo corto, porque tengo la idea más o menos planeada. No será largo. Sigue la tendencia de "Ayudando a Adrien" "La Misión de Chat Noir" así que serán como seis/siete capítulos.

Espero que me acompañen en él 😉

.

Saludos~

.

Aquatic~

.

8 de Abril 2021

El Gato de la GuardianaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora