What is love?

Making today a perfect day

Narración normal

Arendelle

Esa misma noche, mientras Elsa y Jack habían caído rendidos ante el sueño, Pitch Black se escabullía por la ventana de la habitación donde dormían ambos espíritus.

El hombre rio con malicia –Pero miren que hermosa pareja de tortolos- pasó su mano por la mejilla de Elsa haciendo que esta se estremeciera ante el toque y buscara acurrucarse más contra el cuello de Jack –Me conmueven tanto que los dejaré disfrutar un poco más de su compañía- juntó sus manos y puso una mueca de tristeza.

Caminó nuevamente al balcón y apreció la luna que comenzaba a nublarse tenuemente con las nubes –Fue una grandiosa jugada de tu parte juntarlos, estando unidos realmente podrían vencerme, así que felicidades ellos son tu mayor fortaleza...- hizo una pausa para reírse –aunque, creo que dejaste pasar por alto un pequeño minúsculo gran error. ¿Tú qué crees que resultara de juntar a un chico tan problemático como Jack con una chica tan problemática como Elsa?- dibujó una figura de arena de Jack y otra de Elsa –Tarde o temprano alguno de los dos sucumbirá a sus miedos- la figura de Elsa se vio rodeada de arena negra haciéndola desaparecer no sin antes poner una expresión de terror en su rostro –Y con un poco de suerte... tal vez los dos lo hagan- lo mismo le sucedió a la figura de Jack.

-Tienes una daga de doble filo entre tus manos, si yo fuera tu tendría cuidado con no terminar lastimándome a mí mismo-

.

.

.

Arendelle

PDV de Jack

Me escabullí con cuidado de no hacer ruido dentro de la habitación de Elsa, ella estaba dormida en su cama así que asomé mi cabeza con malicia por arriba de su hombro.

Yo había acabado de regresar de mi mundo, fue un mes lleno de trabajo, así que ella se había tenido que esforzar el doble, era natural que estuviera cansada... pero hoy sería un día solo para ella.

-Feliz cumpleaños a tiiii- susurré cantando.

Abrió los ojos con una gran sonrisa en el rostro -Feliz cumpleaños a miii- ella cantó tratando de aguantar la risa, ella estaba despierta desde hace rato, lo sabía.

-Vamos, es tu cumpleaños- la sacudí levemente para que se levantara.

Ella se giró dándome la espalda –Es solo un cumpleaños, no es la gran cosa-

-¿No es la gran cosa?- respondí indignado –Oh, no, no lo es, solo es el cumpleaños de mi mejor amiga en todo el mundo-

Ella se rio –Que dulce- volvió a cerrar los ojos.

-Tengo muchos planes para el día de hoy- le dije –Y uno de ellos involucra chocolate en el desayuno- acerqué mi rostro a su oído para susurrarle.

Al escuchar esto ella abrió un ojo con curiosidad -¿Acabas de decir chocolate en el desayuno?-

-Aja- asentí.

-¡Genial!- con mucho mas animo se sentó en la cama, la tomé de las manos para ayudarla a ponerse de pie.

.

.

.

Feliz cumpleaños a ti,

feliz cumpleaños a ti.

Feliz cumpleaños querida Elsa,

Feliz cumpleaños a ti

Anna, Kristoff, Einar, Sven, Olaf y yo cantábamos al unísono mientras ella soplaba las velitas de cumpleaños que se encontraban arriba de sus panqueques de chocolate bañados en jarabe de chocolate.

Todos aplaudimos emocionados.

-¡Pide un deseo!- gritó Olaf emocionado.

Ella tomo aire y cerró los ojos para después soplar las velitas.

-¿Qué fue lo que pediste tía Elsa?- Einar se sentó en su regazo.

-¿Sabes?, si ella lo cuenta entonces no se hará realidad- le expliqué al niño.

Elsa asintió estando de acuerdo conmigo.

-Hoy será un día grandioso- Anna se veía emocionada mientras comía sus panqueques regulares.

-Aunque, creo que habrá que festejar aquí adentro- Kristoff señaló desilusionado la ventana.

Todos nos acercamos a ver la torrencial lluvia decembrina.

-Bueno, no me sorprende, casi siempre hace mal clima en mi cumpleaños- Elsa se encogió de hombros.

Mi rostro se encendió de inmediato, yo podía arreglar esto, solo tenía que usar mis poderes... normalmente suelo respetar mi trabajo y llevar el invierno solo a donde deba de ser llevado, pero esta podría ser una excepción.

Por Elsa.

-En realidad...- abrí la puerta del balcón del comedor –Si yo fuera ustedes buscaría ropa más abrigadora- con esto salí en medio de la lluvia y comencé a volar hasta estar por arriba de las nubes.

Extendí mi cayado tocándolas haciendo que la lluvia se convirtiera en nieve, recorrí todo Arendelle y después terminado mi trabajo volví a la explanada principal del palacio.

Las puertas del palacio se abrieron estridentemente y todos salieron listos para tener un día de diversión en la nieve.

-¡Día nevado!- grité abriendo los brazos.

-¡Esto es increíble!- Einar se dejó caer en la nieve haciendo un ángel de nieve.

-¿Esta bien esto?- Elsa me preguntó.

-Sí, descuida- la tranquilice –Además en un par de días será navidad, ¿Qué clase de navidad seria sin algo de nieve?-

-Gracias Jack- me abrazó y yo le devolví el abrazo.

-Feliz cumpleaños, Elsa- susurré.

Nos separamos instantáneamente al sentir como algo nos acribillaba –Hey, ¿van a seguir hablando o van a empezar a divertirse?- Kristoff nos gritó mientras él y los demás nos arrojaban bolas de nieve.

-Ohh, esto lo van a pagar muy caro, ¿Qué acaso no saben con quien se están metiendo?- le hice una seña a Elsa.

Ella giro rápidamente sus manos creando una enorme bola de nieve sobre su cabeza, primero apunto en dirección a ellos, pero después de pensarlo mejo se giró hacia mí con una sonrisa maliciosa y dejó caer los kilos de nieve sobre mí ocasionando que todos se rieran.

-Pagaras esta traición- le grité mientras me quitaba la nieve del rostro y cabello para luego girarme en posición de ataque –será mejor que corras-

Ella grito y comenzó a correr mientras yo la atrapaba por la cintura haciéndola dar vueltas -¡No Jack!- finalmente la solté y cuando ella trato de caminarse se tambaleo un poco al sentirse mareada por las vueltas.

Fue un excelente día.

Esa noche Elsa y yo miramos la nieve caer desde el tejado del palacio.

-Elsa, voy a tener que volver a irme- suspiré con fastidio.

-¿Tan rápido?, acabas de llegar- dijo con decepción –pero lo comprendo, tienes mucho trabajo-

-Sí, es una época complicada-

-¿Eso significa que no podrás venir a ver la campana o a la fiesta en el palacio?- me miró con ojos tristes.

-Vendré- le sonreí –lo prometo-