La boda de Maléfica. [Terminada]

Busca por dentro.

Miraba justo enfrente. Sin dejar de contemplar a la mujer que pronto sería su esposa.

―Entonces...¿estás feliz?-
Dijo Maléfica caminando descalza por la playa. Sintiendo la calidez de la arena en sus pies descalzos. Sonríe, la brisa le da en la cara alborotando su cabello.

Lleva un vestido de tirantes blanco con un escote V en el pecho. Su vestido es holgado y cae unos cuantos dedos debajo de la rodilla. Sus ojos azules se ocultan tras unos extravagantes lentes de sol

Regina sonríe grabando la imagen de ella en su mente mientras una dulce piña colada recorre sus labios.

―Eso es demasiado azúcar;  ¿no crees?. Está vez Mal está cerca. Le ha quitado la copa de las manos y da un sorbo con el popote.

―Me pregunto;  ¿cuándo dejaré de sentirse así por ti?. - Dice Regina comtemplandola.
Sus manos se rozan. Y un pequeño rubor se pone en sus mejillas.

―Espero que nunca.- Le responde con una gran sonrisa. Regina sonríe y niega a la vez. ―Dime la verdad; ¿me hechizaste?

Los ojos chocolates se posan en los celestes. ―Yo no uso esos trucos. Es mi encanto natural, amor. - Dice dulcemente. Antes de darle un beso en los labios. Uno inocente y rápido.

―Vuelve a decirlo.  Pide feliz

―Amor...Amor, amor.- dice juguetona
Regina la jala. Le da un beso en la mejilla y después en la boca. Un pequeño gemido sale de sus labios al despegarse de ella y un poco de baba se queda colgando. 

―El amor no se puede forzar. Sólo sentir. -Concluye Regina sola,  contestando así su pregunta.

―Ajá. - Dice simplemente Mal,
Después se adentra a la playa y Regina se queda observandola desde la arena.

Mi safre. ❤No es música moderna, pero es tu canción. 
Te extraño muchísimo.