THE CROWN 成 kth&knj ¡!。

Parte I; Capítulo IV: Decisión Meditada.

TaeHyung no sabía que decir. Su hermano lo miraba expectante, casi suplicando con la mirada que aceptará el trono en cuanto antes. Medito sus opciones una vez más, asegurándose de cada acción fuera meticulosamente revisada.

── Acepto tomar el trono.

Su hermano sonrió en respuesta, articulando un quedito "gracias". Él solo asintió en silencio, asimismo tomaba la mano huesuda y moribunda de su hermano. Estaba aceptando tomar el cargo que alguna vez el detesto con todas sus fuerzas, pero con ese odio, no podía dejar que el ambos reinos sufrieran de igual manera.

Se acostaron acurrucados, tomando el calor que emanaba del otro. TaeHyung apenas sentía el sueño en su anatomía. Solo miraba con nostalgia a su hermano dormitando en un sueño libre. Las ganas de llorar lo azotaron, pero esa simple acción no se ejecutaba por el pensamiento constante de su deber. Era hora de madurar.

⊹ ࣪── ✶ ── ⊹ ࣪

La mañana en el palacio parecía una cosa de cuentos. Los rayos de sol que atravesaban las cortinas azules de los pasillos, hacían el pequeño castillo una edificación de puro cristal. Estaba sorprendido por la beldad de la estructura. Se paró en el balcón que daba al jardín, viendo a la princesa Bella junto a NamJoon platicar animadamente, con una confianza inquebrantable.

Su hermano aún dormitaba. Dió un beso en su frente, y cogió un pequeño conjunto casero pero modesto de su armario. La camisa blanca inmaculada, con una chaqueta de cuero por el frío que se percibía, el pantalón negro y toques dorados con dibujos de finas manos, y zapatos relucientes del mismo color que el pantalón, uno cálido y original del Norte. Se vió una última vez en el espejo, modelando simpático.

Al llegar al patio verdoso con toques blancos de la nieve, la princesa lo saludó cortés, invitándolo a tener el picnic a su lado. El aceptó la propuesta también con una sonrisa, yendo hacia donde los dos restantes se encontraban.

── Buenos días su majestad. ── saludó NamJoon.

── ¡Buenos días Príncipe TaeHyung! ── esta vez fue la entusiasta Bella, que revoloteaba como mariposa entre el pasto abundante.

── Buenos días Princesa Bella, Lord Kim.

── ¿Cómo estuvo su primera noche en el palacio, su majestad? ── preguntó NamJoon.

── Estuvo bien. Tuve que hacer un gran esfuerzo por la frialdad de la noche, las cuales no se comparan a las cálidas y llenas de luz del Norte, pero aparte de ese inconveniente, todo estuvo maravilloso.

Los dos asintieron con una sonrisa en su rostro. NamJoon desvío la mirada con cierta timidez, pero no paso desapercibido por la vista de águila de TaeHyung.

── ¿Qué tal si exploramos un poco el invernadero? He oído por los sirvientes de bocas caminantes que las flores de fuego abren sus pétalos al igual que las rosas ámbar. ── propuso Bella discreta.

── Estoy de acuerdo, vamos querida.

── Tiene mi afirmación Princesa Bella.

Bella sonrió en grande, llevándolos de las manos como si las flores en cualquier momento desaparecerían para siempre. Al llegar al invernadero, TaeHyung quedó fascinando con la gama de flores y plantas medicinales que se encontraba allí. Por lo que vio fue margaritas del lago Sunio, una flor rarísima capaz de curar la ceguera, también vio narcisos de Sol y camelias del Oeste o la flor del hielo. Parecía un pequeño mundo floral dentro de un invernadero.