Salón Hange: 01.(+18) ✎ . . . ❝ [Amor Húmedo]❞ .ೃ࿐

532 21 5
                                    

ADVERTENCIA: SMUT (CONT. 18+)

Miré la ventana. Estaba lloviendo un poco, y la temperatura había bajado notablemente. El entrenamiento se canceló por miedo a posibles rayos que puedan caer sobre nosotros. Nos dejaron el resto de la tarde libre y dieron permiso a que cada uno vuelva a las habitaciones si así lo deseaban.

Me acababa de cambiar el uniforme de la Legión luego de una buena ducha y me encontraba observando la lluvia sin nada interesante planeado para hacer durante lo que restaba del día. Apenas eran tres de la tarde y mis amigos tuvieron la grandiosa idea de juntarse a charlar y comer algunos bocados. Yo no tenía ánimos por lo que me negué pero les deseé diversión con la esperanza de que, al menos por un rato, olvidaran la porquería en la que vivíamos.

Pasé un poco más la toalla sobre mi cabello intentando que se seque un poco más y suspiré. Caminé hasta la cama cucheta que compartía con Ymir (y Christa al mismo tiempo) y alguien tocó la puerta.

—Pase—dije. Era Moblit—. Oh, hola Moblit. ¿Qué necesitas?

—Buenas tardes, _____—saludó el alto—. Vengo a avisarte que Hange te llama desde su oficina-dijo desde la puerta con una sonrisa amable—. ¿Quieres que te acompañe?

—Oh, no. Está bien Moblit. Disfruta del día libre—contesté. Él solo asintió y se fue de la habitación cerrando la puerta detrás suyo.

Me paré y salí de allí de camino adonde me esperaba la mujer de lentes. No pude evitar ponerme nerviosa al pensar en ella. Seguí caminando hasta llegar a la puerta y toqué esperando una respuesta.

—Adelante-dijeron desde dentro. Pasé y saludé, pero no me miró.

Hange estaba hundida en una lectura de unos papeles apoyados sobre el escritorio de madera. Estaba parada, apoyada sobre sus brazos que se posaban de cada lado de la mesada. Se había remangado la camisa por lo que sus antebrazos estaba al descubierto, cosa que era extrañamente atractivo. No alcanzaba a ver qué era lo que leía, ni tampoco tenía intensiones de moverme hasta que ella me lo permitiera.

Carraspeé para que se diera cuenta de mi presencia, lo que milagrosamente funcionó. Al verme, Hange sonrió, a lo que yo respondí con una sonrisa igual.

—Eras tú, lo siento. Pasa—no respondí y sólo cerré la puerta y pasé hacia dentro—. Toma asiento.

Me senté dejando la mesa entre nosotras.

—Me buscó Moblit, me ha dicho que me llamabas. ¿Qué sucede, Capitana?—intenté sonar lo más cordial que pude, con cierto temor de que alguien nos estuviera escuchando cerca. Dentro mío algo se retorcía al ser consciente de la privacidad que nos envolvía. Hange me miró con diversión.

—Cariño, estamos a solas. Nadie nos ve—dijo entre risas—. No necesitas hablar con formalidades aquí. Ahora mismo sólo soy tu novia.

Me sonrojé fuertemente al escucharla decir lo último. Aún no me acostumbraba al concepto de ambas siendo pareja. Hacía seis meses estábamos juntas y no lograba asimilarlo del todo. La mujer que me había llamado la atención y que, poco a poco me enamoró, me correspondió los sentimientos y fue quien tuvo la iniciativa de comenzar una relación amorosa.

Miré mis manos sobre mis muslos que apretaban la tela de mi falda con fuerza como si de una niña pequeña siendo regañada se tratara. Escuché una risa nuevamente.

—No me digas que te pongo nerviosa —dijo. Levanté la vista y casi me desmayo en ese mismo instante al verla morderse el labio inferior. Sus ojos se dirigían hacia mí con lujuria y podía notarlo a kilómetros—. Qué linda te ves así mismo. Tan preciosa que quiero que vuelvas a ser mía, aquí, ahora. 

𝐨𝐧𝐥𝐲 𝐠𝐢𝐫𝐥𝐬 [𝘀𝗻𝗸/𝗮𝗼𝘁] - 𝐨𝐧𝐞 𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora