Dragon Ball x Elfen Lied. Un amor entre una diclonius y un saiyajin.

Capítulo 35. Perfección contra Unidad, la pelea llega a su fin.

En el campo de batalla.

La tensión y el suspenso se sentía en todo el lugar. La pelea que decidiría el destino de la Tierra y de todo el universo estaba por dar inicio. Por un lado, Cell, el bio-androide creado a partir de las células de los guerreros más poderosos, y quien se denominaba así mismo como el ser más poderoso y perfecto del universo. Y por el otro, Gojan, hijo del guerrero saiyayin Gokú y la reina diclonius Kaede, poseedor de un poder latente mucho más grande que el de sus padres y que de cualquier otro guerrero conocido, y quien hace poco había superado el límite de sus poderes con una nueva transformación que lo hacia parecer invencible. Pero el precio para obtener ese poder, fue dejarse dominar por su lado oscuro, el cual solo deseaba saciar sus ansias sanguinarias de combate, y ahora que tenía el control, así pretendía quedarse, sin importar que su contraparte tratara de luchar por tener el dominio de nuevo.

Por otro lado, gracias a las semillas del ermitaño que los pequeños Jack y Niu les llevaron a sus familias y amigos, todos recuperaron por completo sus fuerzas. Posteriormente, Gokú y Kaede explicaron a que se debía el abrupto cambio que había sufrido su hijo.

— Entonces... ¿quieren decir que ese no es Gojan en realidad? — Exclamó Neo algo dudoso.

— No. Se trata de otra entidad que Gojan desarrolló en respuesta de una necesidad desesperada por volverse mas fuerte. Esa entidad posee todos los recuerdos y experiencias de Gojan, la diferencia es que él solo vive para luchar y nada mas. Bueno, al menos eso fue lo que me quedó claro en todas las veces que se manifestó durante nuestro entrenamiento. — Explicó Gokú con mucha seriedad, mientras todos a su alrededor no dejaban de mostrarse sorprendidos.

— Así que era por eso que no querían que Gojan luchara. Porque entre más grande fuese su desesperación al pelear, la influencia de ese ente se hace mayor. — Dijo Pikoro.

— Si. Hace mucho tiempo yo tuve un problema parecido con un ente que influenciaba en mis decisiones. Hizo mi vida mas complicada hasta que con ayuda de Gokú me deshice de él. Pero jamás esperé, que Gojan también experimentaría algo parecido. — Habló Kaede.

— Vaya. Eso es fascinante en cierta medida. Aunque nuestro hermano y nosotras nunca hemos experimentado un fenómeno como ese. Cuando supimos que Kaede había desarrollado otras almas, creímos que nosotros también podíamos, pero nunca se dió el caso. — mencionó Diana.

— Quizás nosotros no tengamos esa habilidad. Quiero decir, somos seres creados artificialmente. Nuestras almas en cierta forma también son sintéticas. Puede que ese detalle nos incapacite de poder crear otra alma. — Conjetó Bárbara.

— Si, puede ser. Pero eso no importa, aún sin esa habilidad nosotros podemos hacernos fuertes por nuestra cuenta. Lo que importa ahora es ver como se desarrollará esta pelea. Y más importante aún. ... ¿qué pasará con Gojan una vez que esto termine? — Cuestionó Neo, a lo que los demás también se mostraron intrigados por eso, en especial la diclonius rubia.

— ¡Es verdad!, ¿Qué pasará con Gojan?, ¿acaso nunca recuperará el control de su cuerpo? — Cuestionó Mariko con angustia.

— No lo sabemos. Y ese era el riesgo por el cual quería acabar esta pelea de la forma más rápida. Esa entidad busca quedarse con el control del cuerpo de Gojan. Incluso si con su ayuda pudiéramos eliminar a Cell, lo mas seguro es que ahora tengamos a un enemigo peor entre manos. — Amonestó Gokú seriamente.

Esa ultima declaración provocó una gran incertidumbre en el resto de los guerreros. De ser las cosas como decían, Cell no sería el único problema del que debían preocuparse, y todo indicaba que esta posible nueva amenaza era todavía peor. Sin embargo, había una personita que no estaba muy convencida de esa posibilidad.