Capitulo 2

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Al ver todos como Yuuji lloraba desconsoladamente las tres personas presentes entran en pánico y se voltean a ver entre sí, tanto Maki como Nobara miran seriamente a Megumi y luego voltean a ver a Yuuji dándole una indirecta al pelinegro para que actué.

-Bien...- Murmura al entender la indirecta de las chicas

Inmediatamente el lobo se arrodilla junto al pelirrosa y sin saber que más hacer lo abraza. Al sentir como unos brazos lo envuelven el conejo se tensa, pero al instante corresponde al abrazo en busca de consuelo.

-Tranquilo- Susurra mientras acaricia la cabeza del chico

Después de un rato y de tanto llorar, Yuuji termino dormido en los brazos de Fushiguro. Al notarlo, el pelinegro se separa con mucho cuidado y carga al joven hasta el sofá por indicaciones de Kugisaki. Viéndolo de cerca, el cuerpo de Itadori parecía bastante mal de salud lo cual era preocupante.

Tenía bolsas bajo sus ojos como si no hubiera dormido en días, gran parte de su piel llena de moretes y contusiones que se extendían por debajo de su camisa, el pelaje de sus orejas de conejo era bastante opaco y lo que más llamaba la atención era que estaba bastante delgado. A esas alturas parecía casi natural que el pequeño se hubiera dormido después de llorar tanto, debía estar tan cansado que no le quedaban energías para seguir de pie.

-Maki que haremos con él?- Pregunta muy preocupada la mapache -Deberíamos avisar a la policía?-

-No, tengo un mal presentimiento- Musita la peliverde mientras repasa todas sus posibles opciones

- Creo que deberíamos llevarlo con Gojo, él lo tratara y sabrá qué hacer- Sugiere esta vez el chico

-Oh buena idea-

Ante esa sugerencia que parecía ser la más viable, la peliverde saca su teléfono y llama a su vecino Sukuna para contarle lo sucedido y de paso encargarle que lleve al híbrido conejo con Gojo. Con solo mencionar la palabra "Megumi" y "Herido" fue suficiente para tener a Sukuna en un instante fuera de la casa de Maki casi derribando la puerta.

Ryomen Sukuna era el dueño de Fushiguro Megumi, un hombre pelirrosa que tenía una inquietante mirada rojo sangre y gran parte de su cuerpo tatuado haciéndolo parecer un criminal a sueltas.

-Como que te hirieron idiota!?!?- Reclama jalando las orejas de su lobo

-Eso duele imbécil- Da un manotazo a su dueño para apartarlo pero es inútil

-Tipos como esos deberían ser asesinados, Maki eres tan inútil que ni siquiera puedes rematar a un delincuente- Apunta acusatoriamente a la chica de lentes

-A diferencia de ti, yo soy una persona civilizada que no resuelve sus problemas matando a quien se interponga en su camino- Intenta justificarse

-Y es por eso que nadie te teme- Recrimina cruzándose de brazos e ignorando totalmente a la mujer

Si bien, Sukuna era conocido y temido en la ciudad porque anteriormente trabajaba como guardaespaldas de uno de los jefes de la Yakuza, no dudaba en matar a quien se le cruzara enfrente y era uno de los hombres más violentos y crueles. Pero insatisfecho con su trabajo y su vida de criminal, se retiró para llevar una vida más pacífica, abrió una florería (un gran cambio) y poco después "adopto" a Megumi.

-Cómo pudo ese bastardo herir a mi tierno lobito? Me dan ganas de ejercer violencia física- Declara mientras abraza al híbrido y comienza manosearle el trasero

-Déjame estúpido pervertido!!!-

-No quiero, Vas a morderme por eso? Porque me encantaría- Acto seguido pasa su lengua por el cuello del chico y jala su cola

Amor InterespecialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora