Hasta que llegaste tú

CAPÍTULO 10

DIANA

Nos separamos, por falta de oxígeno. Seguimos bajo el árbol y sigue lloviendo.

-Oye nos deberíamos ir a casa, antes de que empiece a llover más fuerte- le digo a Dylan y el asiente. Nos ponemos en pie y el me recorre con la mirada.

-¿Tienes frio?- dice, la verdad esque ahora que nos hemos separados si.

-Sep- digo

-Toma- me dice y me da su chaqueta el tiene puesto una sudadera blanca y unos vaqueros negros y unos tenis blancos y bueno ahora ya no tiene la chaqueta que tenia puesta por que me la ha dado.

-Gracias- le digo y me la pongo, me queda grande pero me da igual.

-Vamos- dice cogiéndome de la mano y empezando a correr. Por mucho que corramos nos mojamos y empezamos a reír. Llegamos a casa riendo, todavia me tiene cogida de la mano y eso me gusta.

-Voy a ducharme, cuando termine subo al desván- le digo y el asiente. Voy a subir las escaleras, pero me coje de la mano y me planta un beso en la boca. Lo separó de un empujón, riendo y subo las escaleras.

Llego a mi habitación y cierro la puerta. Voy directa al baño y me miro en el espejo. Tengo el pelo y el cuerpo entero mojado. Veo que tengo la chaqueta de Dylan puesta y se me escapa una sonrisita tonta. Ahora no se lo que somos pero espero que lo aclaremos.

Me quito la ropa y me meto a la ducha. Me ducho y salgo. Me pongo ropa interior y ropa para dormir y me dejo el pelo suelto. Mi pijama consiste en un pantalón corto negro y una sudadera gris un poco grande y mis calcetines tobilleros blancos.

Salgo de mi cuarto y subo al desván. Cuando subo veo a Dylan allí tumbado, viendo el móvil. Voy caminando hacia el y me tumbo a su lado.

-¿Que ves?- le preguntó.

-Nada interesante, ¿Vemos lucifer?- me pregunta y yo asiento.

Busca el ordenador y lo pone, el se tumba y yo me pongo a su lado. Nos quedamos dormidos viendo lucifer.

Cuando me despierto noto que tengo la cabezada apoyado a algo y alguien me esta sujetando. Abro los ojos poco a poco, y veo a Dylan, está dormido. Estamos tumbado el me sujeta de la cintura y yo tengo mi cabeza y mis brazos abrazándolo. Lo veo dormir y se me forma una sonrisa inconscientemente. Escucho ruido a bajo. Mierda mi madre. Me despego de Dylan y abajo.

-Hola mama- le digo, se esta preparando para irse a trabajar.

-Hola hija- me dice- me tengo que ir. pero a la hora de comer vengo tengo que hablar contigo- me dice y yo asiento confusa, ¿Que quería hablar?- Ahora me voy, Adios. Te quiero- me dice

-Y yo a ti, Adiós.- digo. Voy a la cocina a por un vaso de zumo. Estoy guardando el zumo en la nevera, cuando alguien me coge de la cintura, me da la vuelta pegandome a la nevera. Dylan me está mirando con una sonrisa. Voy a decir algo pero no me da tiempo, porque estrella su boca con la mía. Nos besamos uniendo nuestros labios, él abre su boca y yo la mía, él mete su lengua en mi boca y empezamos una guerra de lengua. Nos separamos por falta de aire. Yo tengo una sonrisita de estúpida y Dylan también. Seguimos pegados, yo con mis manos al rededor de su cuello y el abrazandome por la cintura.

-Buenos días- digo riendo, separandome un poco de el.

-Buenos días- me dice sonriendo.

-¿Has dormido bien?- preguntó

-No se, ¿Tú has dormido bien?- pregunta y yo rio. La verdad es que si he dormido bien, bastante bien.

-Yo, sep- digo y el rie.

Después de un rato mas de tonterías, nos vamos al salon. Ahora estamos sentado en el sofá, yo estoy sentada en forma de indio y con mi cabeza en su hombro y él está de la misma postura pero con su cabeza en mi cabeza. Yo estoy viendo la tele y el está con el móvil.

-Sabes ya voy entendiendo tu caos- dice Dylan de repente y yo por un momento no se de que habla, pero me se me viene a la mente la conversación que tuvimos.

-¿Si?- digo sorprendida.

-Si y sabes ¿Yo podría ser tu paz entre tanto caos?- Dice Dylan sonriéndome y yo me pierdo por un momento.

Espera...

Esperaaa...

ESPERA.

ESPERAAAA...

¿Acaba...?

¿Acaba de pedirme que sea su novia...?

No, no acabas de hacer eso... ¿O si?

-¿Acabas de decirme que sea tu novia con una frase bastante ingeniosa?- Pregunto divertida. De repente tengo una alegría enorme.

-Si- dice Dylan ocultando una risa- ¿Entonces qué me dices, boba?- dice.

-SI, claro que si bobo- digo y me tiró encima de él. Estrelló su boca con la mía en un beso desenfrenado. Sus labios se mueven al ritmo que los míos, mientras nuestras lenguas se unen.- Ahora eso si que sepas que soy celosa y posesiva. - le digo, cuando separamos, el se ríe y me vuelve a besar.

-Perfecto- dice- porque yo tambien lo soy, eres mia dori- dice y yo me muerdo el labio inferior, para contener la sonrisa.

Me encanta, este imbecil.

Hemos decidido no contarle a mi madre por motivos obvios. Ahora es la hora de comer y estoy esperando a mi madre ya que quería decirme algo. Mi madre entra a casa y yo la saludo. Me dice que ponga la mesa mientras, ella hace de comer y yo asiento.

-Y dile a Dylan que te ayude- dice y yo oculto una sonrisa.

-Vale- le digo y subo al cuarto de Dylan.

Toco la puerta y escucho un adelante.

-Entro y veo a Dylan con el pelo mojado y poniéndose una camiseta.

Madre mia como esta

Hombre manoli, se te echaba de menos

-Mi madre que bajes a ayudarme a poner la mesa para comer- le digo y asiente.

A bajamos y ponemos la mesa, Dylan tambien me roba algunos besos sin que mi madre se de cuenta. La mesa ya está puesta y la comida servida y nos sentamos a comer.

-Bueno hija que bueno que este aqui y tu tambien Dylan haci hablo con los dos- dice y yo me tenso. ¿Y si nos vio esta mañana?

-¿Qué querías hablar mamá?- digo lo más tranquila posible.

-Veras me voy a tener que ir durante un tiempo por ahora será un mes, pero no se si se puede alargar- dice y yo me relajo. Osea no quiero estar un mes sin ella, pero estaría sola con Dylan y al menos se que ella no sabe nada.

-Oh y ¿cuando te vas?- digo.

-Ahora voy a hacer la maleta y me voy- dice y yo asiento.

Al rato terminamos de comer y mi madre se va ha hacer la maleta. Mi madre abaja y se despide de nosotros.