CAPÍTULO 19

84 14 1
                                    

DIANA

Levanta su brazo para pegarme , pero yo la detengo. Y le tiró del brazo para que lo baje.

¿Oye que te pasa?- le preguntó enfadada. ¿Porque mierda me iba a pegar una bofetada?

-Te odio- dice la chica.

-¿Perdona nos conocemos?- preguntó confusa. Dylan la mira serio y Teo y Austin aguanta la risa.

-¿No me conoces?- pregunta la chica indignada- Por tu culpa, el y yo ya no estamos juntos- dice la chica señalando a Dylan.

-Tu y yo nunca estuvimos juntos- dice Dylan mirándola seria. 

Ya se de que me suena, es la chica de la foto, la loca.

-Ahh, tu eres la loca- digo con una sonrisa hipócrita.

-¿La loca?- pregunta ella indignada y enfadada.

-Si, la que beso a mi novio a la fuerza, se arrastra ante alguien que no la quiere, que me mando la foto para que termináramos...- digo- Creo que te perdiste- concluyó. 

-¿Que me perdí?- dice confusa.

-Si- digo- el circo de payasas está por la otra dirección- digo señalando hacia el otro lado. Escucho como Teo, Austin y Dylan rie.

-¿Pero qué te crees mocosa?- dice la estupida.

-¿Habló la doctora?, Hija si vas a insultar al menos hazlo bien, que si yo soy mocosa, tú también, porque tenemos la misma edad- Le digo burlona.

-Enserio me cambiaste por ella, amo...- dice y la cortó antes de que termina.

-¿Cambiar?, para cambiar algo, hace falta dos cosas que valga aunque sea un céntimo, y cariño tu no llegas ni a eso, y vuelve a llamarlo amor y te estampo contra el suelo, ¿Entendiste?- le digo seria.

-Hablaste tú, que eres fea, te crees mucho y el está contigo por pena...- dice. y yo me rio.

-¿Fea?, haber, uno, si intentas quitarme la autoestima pierdes tu tiempo, no puedes quitarme algo a lo que no llegas. Dos, me dices que me creo mucho cuando eres tu la que vienes como si pudieras tener a cualquiera cuando le vas rogando a alguien que te dice que no te quiere y que le dejes en paz. Y tres, ¿está conmigo por pena?, haber- le digo- ¿Estas conmigo por pena?- le pregunto a Dylan que esta aun lado sonriéndome.

-No, estoy contigo porque te amo y me encantas- dice Dylan como si nada y yo sonrío.

-¿Que como te se queda la cara?. Aqui la unica que das pena eres tu.- le digo y ella me mira con puro odio, mientras yo sonrío. Teo y Austin siguen riendo libremente.

-Te vas a enterar perra- me dice y vuelve a levantarme la mano para pegarme, pero se la vuelvo a parar.

Llasta acabo con mi paciencia 

Demuestrale quien manda y quien es la dueña de ese bombón, y de camino dale con una silla en la cabeza.

SACA TU PARTE HIJA DE PUTA.

Le aparto la mano que tenía sujeta y la empujo, cae al suelo, y me acerco a ella pegándole una fuerte bofetada. Le cogo el pelo y le also la cabeza para que me vea.

-Haber escúchame bien zarrapastrosa, no vuelvas a levantarme jamás la mano, no vuelvas a tener ningún contacto con mi novio y mucho menos vuelvas a insultarme. No intentes ponerte en mi lugar, porque no puedes llegar a algo que no eres capaz. ¿Me escuchaste estupida?- le digo cabreada y ella asiente con miedo. 

Me aparto de ella y Dylan me coge la mano para seguir caminando. Vamos caminando y estamos en silencio hasta que escucho a Teo, Austin y Dylan reír a la vez.

-Sabes Diana retiro lo que dije en la pizzeria- dice Austin.- No me caes bien, me caes muy bien- dice y ríe.

-Concuerdo con Austin- dice Teo.

-Yo no soy violenta, pero es que ella me sacó de mis casillas- digo

-Me encanta tu lado posesivo- dice mi querido novio, pasando un brazo por mis hombros y dándome un beso en la cabeza. Yo empiezo a reírme. 

Llegamos a casa y nos despedimos de Austin y Dylan. En la casa no hay nadie estamos solos.

Dylan me coge y me estampa contra la puerta y me besa.

-Me estado aguantando todo el dia y verte en modo posesiva me puso mas cachondo- dice Dylan volviéndome a besar.

Me coge del culo y me alsa, yo enredo mis piernas en su cintura. Sube la escaleras mientras nos besamos. Llegamos a su habitación y cierra la puerta.

En menos de dos minutos estamos desnudos.

-Dylan- jadee.

-Te amo- dice antes de penetrarme fuertemente, yo suelto un gemido. 

Dylan me da embestidas rápidas y fuertes, mientras yo muevo mis caderas. Dylan tiene sus manos en mi culo y mis manos tiran de su pelo, mientras nos besamos. Dylan nos estampa contra la pared, mientras a masa mis pecho. Dylan gruñe y yo suelto gemidos.

-Mira te gusta que te de fuerte, que te llene, y que te haga gemir ¿Cierto?- dice Dylan y a mi sus palabras me hacen estar más cerca del orgamos.

-Si- digo en un gemido. Dylan aumenta el ritmo y yo no aguanto mas.- Dylan...- gimo. 

-Vente para mi, preciosa- dice y yo me corro mientras él se vacía dentro de mi. Me llena con su eyaculacion. Estamos pegados el uno al otro, Dylan tiene su frente en mi hombro, mientras yo lo sigo abrazando con piernas y brazos.

-Yo tambien te amo- digo en un susurro y siento a Dylan sonreir en mi hombro.

Me baja y me deja en el suelo, yo tiro de su brazo hacia la cama. Y lo dejó sentado. Me subo a su regazo besándolo, lo echó hacia atrás y lo dejo tumbado. Le beso el cuello y voy bajando repartiendo besos humedos.

Llegó a su polla y lo empiezo a masturbar suavemente.

-Diana...-jadea.

Yo introduzco poco a poco la punta de su falo en mi boca, remolino la lengua en su punta y lamo. Lo oigo jadear y agarrar mi pelo. Introduzco la mitad de su falo, sin que se lo espere, y chupo y lamo como si fuera, una niña pequeña con su piruleta. Lo que no me cabe en la boca, le pasó la mano y empiezo a subir y bajar mi mano al ritmo de mi boca. Tensa la mandíbula y me agarra del pelo para que valla mas rapido. Me folla la boca mientras le doy atencion a sus testículos.

-Diana...- dice en un jadeo, se que esta apunto de venirse y que me lo dice para que me aparte pero no lo hago, quiero que se venga en mi boca. Aumentó el ritmo y el sigue follandome la boca. Lo oigo jadear una vez más y se corre en mi boca. Me trago toda su derrame y me tumbo al lado suya.

-Te amo- dice intentando recuperar el aire con una sonrisa en la cara.

-Te amo- le digo sonriendo. 

Me coge de la cintura pegandome a el y esconde su cara en mi cuello, yo recuesto mi cabeza en su pecho. Y no me doy cuenta, pero antes de poder hacer nada más ya estoy en los brazos de Morfeo.


Hasta que llegaste túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora