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A partir del encuentro de Sasuke con Amaterasu y Tsukuyomi, el pelinegro permaneció 4 años a su lado aprendiendo distintos conocimientos del mundo sobrenatural. Aprendió cosas como usar magia, distinta información acerca de los líderes de varias mitologías, así como de diferentes criaturas y personalidades importantes. Actualmente era temprano por la mañana, y podía verse a un joven caminando por las calles de la ciudad Kuoh, el chico iba vestido con una camiseta negra de manga larga, acompañada de unos jeans del mismo color. Se trataba de Sasuke, quien en ese momento llevaba una maleta en su mano derecha mientras en la otra tenía un papel que estaba leyendo, aunque su cara confusa daba a entender que no estaba entendiendo del todo lo que venía escrito en la hoja.
No me agrada la idea, pero lo ideal sería preguntarle a alguien si conoce el lugar – pensaba Sasuke observando a las personas que iban caminando cerca de él.
El pelinegro sin mucha emoción fue caminando lentamente hasta encontrarse con alguien que iba pasando por ahí. Se trataba de una chica que llevaba puesto un uniforme estudiantil, además la chica contaba con un cabello negro considerablemente largo que le llegaba hasta las rodillas. Siendo que los ojos de la joven destacaban demasiado al poseer ojos de diferente color, siendo un ojo de color azul y otro marrón.
La mirada de la chica se enfocó en Sasuke, quien venía acercándose a ella a paso lento, y su mirada se notaba algo fría sin mucha emoción, aunque lo mismo podía verse del lado del Uchiha.
Disculpa, ¿Sabes dónde queda esta dirección? – preguntó Sasuke mientras le mostraba a la chica el papel en su mano izquierda mientras esta comenzaba a leer la hoja.
Después de unos segundos la chica levantó la vista del papel para observar a Sasuke – por supuesto, solo tienes que caminar 4 cuadras en aquella dirección – le indicó la chica girando mientras apuntaba con su dedo a la dirección a la que tenía que ir el pelinegro – después solo debes dar vuelta a la derecha y caminar 2 cuadras más – terminó de hablar la chica regresando su vista a enfrente.
Gracias, por la información – fueron las palabras de Sasuke mientras la chica solo le respondía con una pequeña reverencia antes de seguir con su camino dejando al pelinegro solo.
Con la nueva información el Uchiha comenzó a seguir las indicaciones de la chica y caminó las primeras 4 cuadras en línea recta, para después girar a la derecha y caminar las 2 cuadras restantes. Una vez hecho eso, el pelinegro observó que frente a él se encontraba un pequeño complejo de apartamentos de 3 pisos de altura. La fachada del lugar era algo lujosa pese a ser un sitio reducido en espacio, el lugar contaba con un pequeño jardín en la entrada.
Antes de entrar el Uchiha observó la dirección y la comparó con la del papel observando que eran las mismas, así que Sasuke decidió no perder más el tiempo, y se adentró al interior del complejo. Al entrar a la recepción lo primero que pudo notar era que esta contaba con un pequeño mostrador de madera de alrededor 4 metros de longitud, y ahí podía verse un pequeño letrero que decía "Recepción". Y parado detrás del mostrador se hallaba un hombre arreglando algunos buzones que estaban en la parte posterior del mostrador. El pelinegro se acercó llamando la atención del hombre que inmediatamente se puso de pie para recibir al recién llegado.
