———☆———
Tercera señal
— ¿Me vas a decir lo que te sucede, o vas a permanecer callado todo el día? Pareces niño pequeño.
Silencio. De nuevo.
Lleva así desde que llegó a mi casa, hace dos horas. Tenia los ojos colorados, seguramente había llorado, por tal razón estaba muy preocupada. Es muy raro que Yuta llore.
— Me voy. —dijo tan solo esas dos palabras, y se levantó del suelo.
— No, no vas a ningún lado señorito. Al menos hasta que me digas que te sucede. —agarré su muñeca.
— ¿Señorito? —sonrío, aún con la nariz congestionada. Se notaba.
Se dejó llevar hasta el sofá, que ultimamente estaba pasando por muchas cosas; crisis existenciales, lagrimas y estrés por los trabajos universitarios, y pijamadas. Porque si, hacíamos pijamadas muy seguido.
— Sabes que puedes decirme lo que sea, pero no me dejes con tu silencio. Me preocupas.
— Yo... demonios. —susurró— Fui a revisar unos papeles de la universidad, y vi a Momo con... Doyoung.
— ¡¿Qué?! —grité.
— ¡No grites! —se tapó las orejas con sus manos.
Eso era imposible, sobre todo por el simple hecho de que el mencionado prácticamente detestaba a la pareja de Yuta. Pero evito decírselo.
Le envié un mensaje sin que el chico deprimido frente a mi lo notara. A los pocos segundos una vibración en el teléfono me hizo entrar nuevamente al chat.
Doyoung♡
> ¿Cómo te enteraste?
> Como sea, ni me lo recuerdes.
Esa chica prácticamente se me
arrimó, definitivamente ahora me
cae peor que antes.> Recuérdame nunca más salir
con ella presente, te veo mañana.— ¿Que haces? —demonios, se dio cuenta.
— ¿Y-yo? Nada. —coloqué el objeto tecnológico en mi espalda. Pero eso no impidió que Yuta me lo arrebatara de las manos.— ¡Oye! Esto es invasión a mi privacidad. —lo perseguí en circulos, mientras el travieso se reía.
Hasta que se detuvo a leer.
— Yuta... —suspiro antes de acercarme con lentitud.
Otra vez silencio. Una extraña acción de su parte me hizo verlo como si fuera un lunático, se estaba riendo.
— ¿Pero qué...? —me pregunté a mi misma.
Esta bipolaridad me está asustando.
— No es por tener rencores contra ella, pero me parece muy bajo rogar por el contacto ajeno. —me devuelve mi teléfono y aún algo desconcertada lo recibo.
— ¿Estas bien? —pregunto.
— Mejor que nunca. ¿Vamos a comer-
La pregunta queda al aire cuando escuchamos el timbre sonar, Johnny.
— Lo siento, acordé cenar con Suh esta noche. ¿Quieres unirte? —propuse.
— Ah, no... diviértanse, voy a hablarle a Jaemin. —sonrió, aunque forzadamente.
No indague, pensé que a lo mejor necesitaba un tiempo a solas.
Salí de mi casa con un sabor amargo en la boca.
Remordimiento.
———☆———
sweetieshotaro–
ESTÁS LEYENDO
𝐎𝐍𝐄 𝐓𝐈𝐌𝐄 | 𝐍𝐀𝐊𝐀𝐌𝐎𝐓𝐎 𝐘𝐔𝐓𝐀
Teen FictionAños eran suficientes para quererse, una vez era suficiente para amarse. Entonces...¿Porqué se besaron? Solo tenían ganas de hacerlo. • Historia ficticia. • Mini-historia. • Historia hetero. • Prohibida la copia y/o adaptación de esta historia. • Li...