Capítulo 4 - No-Muerto Bicéfalo

8 0 0
                                    

La vista de aquel extraño no-muerto era bastante peculiar; ya era de por sí muy bizarro que los muertos puedan caminar y quejarse, pero este cadáver era por mucho lo más bizarro con lo que "eso" había encontrado hasta este punto. Para empezar, tenía dos cabezas en lugar de una, empuñaba un extraño bastón hecho de huesos, y por sobre todo tenía esta extraña ''cualidad'' para atraer a otros no-muertos cerca con su canto, por no olvidar también que una de sus bocas estaba constantemente exhalando esta misteriosa niebla... Estaba claro que este no-muerto era diferente de los demás ¿Acaso también poseía inteligencia? "Eso" creyó que no era algo descabellado, muy posiblemente este esqueleto bicéfalo tendría consciencia de si mismo... Pero pronto "Eso" dejó de pensar en esas preguntas, olvidándose de las ellas tan pronto como llegaban a su mente...

''Eso'' dejó de preocuparse por cualquier cosa y empezó a dejarse arrullar por aquella suave melodía que se seguía sonando sin interrumpirse un solo segundo.

Dicho canto era realmente encantador, y para ''eso'' era la primera cosa que escuchaba, al menos la que no eran gruñidos guturales o el golpeteo de los huesos al moverse. Así que ''eso'' simplemente se dejó cautivar, mientras avanzaba lentamente hacia el montículo de huesos sobre el cuál se encontraba el no-muerto bicéfalo. 

A medida que se acercaba más, más se veía envuelto en tan maravilloso canto... Hasta que algo lo sacó del ''trance'' en el que se encontraba. ''Eso'' notó como uno de los esqueletos más cercanos a la pila de huesos tembló por unos instantes antes de desvanecerse y que cada uno de sus huesos cayeran al piso, pasando a ser unos cuantos huesos más en el montón; aquí ''eso'' se dio cuenta qué era lo que estaba ocurriendo. Todo esto era una trampa... Aquel melodioso canto era realmente una especie de cebo que tenía el objetivo de atraer a los no-muertos a este lugar.

Solo después de darse cuenta de aquella trampa fue que ''eso'' se percató que aquel agradable sonido lo hacía sentir disperso, como si su mente perdiese fuerza y se debilitara constantemente. Y no queriendo terminar como aquel esqueleto, ''eso'' movió sus manos casi al instante, alcanzando los cráneos de dos no-muertos frente a él; al tomar ambos cráneos, las cuencas oculares y manos de ''eso'' brillaron con una luz verde seguida por dos espantosos gritos que inundaron aquel lugar.

Habiendo asimilado a los cadáveres, ''eso'' nuevamente ganó lucidez, la suficiente como para no sentirse hechizado por aquel canto que resonaba en el lugar; pero sospechando que si permanecía allí, iba a volver a caer en ese estado hipnótico, decidió salir de allí en ese preciso momento sin preocuparse por mirar atrás.

 Aún así... Instantes después ocurrió algo que hizo que ''eso'' volviera la mirada, ''eso'' escuchó algo, un grito ensordecedor que hizo eco en toda la caverna. ¿Qué lo ocasionó? esta duda apareció inmediatamente en la mente de ''eso'' y la respuesta fue casi inmediata.

Al mirar hacia atrás ''Eso'' se encontró con que absolutamente todos los esqueletos reunidos alrededor de la gran pila de huesos estaban ''mirándolo'' fijamente, todos, eso incluía también al extraño esqueleto bicéfalo en la cima de la pila de huesos, pero este no solo estaba mirándolo con sus dos cráneos, si no que también lo señalaba con una de sus huesudas manos. ''Eso'' se dio cuenta que el esqueleto bicéfalo era el que había soltado aquel grito... Pero no se detuvo aquí, tan pronto como sus ''miradas'' se encontraron, las cuencas del no-muerto bicéfalo brillaron al tiempo que emitió otro atronador grito, que esta vez sonaba como un agudo y desagradable chirrido, y como si se tratase de un grito de guerra, todos los esqueletos de ese lugar empezaron a moverse rápidamente hacia ''eso'' claramente sin intenciones amigables.

''Eso'' inmediatamente se dio a la fuga, huyendo lo más rápido que se permitían sus piernas esqueléticas; afortunadamente los no-muertos no eran tan rápidos como para atraparlo, pero esto no era suficiente para perderlos de vista, sin embargo tendría que tener cuidado de los esqueletos que aparecían frente a él en medio de la densa niebla...

----

Después de un tiempo huyendo, y casi ser atrapado un par de veces, ''eso'' por fin pudo perder de vista a la furiosa horda de no-muertos. Actualmente se encontraba sentado, descansando en en interior de un túnel por el cuál no pasaban demasiados esqueletos. ''Eso'' no estaba sentado porque necesitara recuperar el aliento, su cuerpo de no-muerto lo libraba del cansancio y agotamiento físico, ''eso'' estaba sentado más por una sensación de presión y cansancio mental por la situación que acababa de vivir.

Ya más en calma, ''eso'' intentó analizar lo que había pasado. Tenía varias preguntas... ¿Por qué los esqueletos decidieron atacarlo? Esto era posiblemente por ''orden'' del esqueleto con dos cráneos, ¿Por qué el no-muerto bicéfalo gritó? Y ¿Por qué los otros lo escucharon?

Haciendo memoria un poco, ''eso'' organizó mejor sus ideas. En cuanto a por qué el bicéfalo había gritado, esta era, con seguridad, la manera de emitir su orden al aquella horda de cadáveres. ¿Por qué los otros lo escucharon? Esto era algo raro, teniendo en cuenta que los gritos emitidos por los no-muertos que ''eso'' asimilaba eran ignorados o no eran escuchados, pero esto quizá tenía que ver con aquel extraño canto emitido por uno de los cráneos del no-muerto bicéfalo, después de todo la ''voz'' de aquel esqueleto tenía una bizarra e hipnotizante cualidad de hacerte sentir adormilado, por eso los no-muertos comunes eran atraídos hasta ese lugar... Así que muy posiblemente ese esqueleto tenía la capacidad de ejercer un cierto ''control mental'' por medio de su canto... O gritos, en este caso. Con esto "eso" había dado con la solución a dos incógnitas... ¿Pero qué hay del por qué el esqueleto bicéfalo dio la orden a los esqueletos para que lo atacaran?

Por mucho que lo pensara "eso" no podía dar con la respuesta a esta pregunta... Así que decidió no pensar más sobre eso mientras le daba un vistazo a su brazo izquierdo, que estaba incompleto, debido a que durante su huida, casi fue atrapado en un par de ocasiones, y en una de esas le" arrancaron" la mano entera y uno de los huesos del antebrazo, mientras que el otro terminó partido por la mitad. "Eso" no sentía que la pérdida de uno de sus brazos fuera muy relevante; después de todo como no-muerto, no sentía nada de dolor físico, aún así "eso" no estaba demasiado feliz sobre la idea de haber perdido una mano, precisamente por el hecho de que era un cadáver, y posiblemente la probabilidad de sanar sería un cero absoluto...




Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 24, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Magus: The Awakening of the Undead LordDonde viven las historias. Descúbrelo ahora