CAPITULO 11

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Alex.

En el momento que entramos no me dijo nada solo se acostó en la cama que bueno que acordó que tenía que sacarse los tacones, hago lo mismo me saco las zapatillas y me acuesto a su lado no lo puedo resistir y la abrazo es lo único que necesito para quitarme el sentimiento de humillación que tengo por lo ocurrido de esta noche, con mi cabeza apoyada en la almohada oliendo el olor de su cabello a menta me quede dormido.

Agatha.

Sentir su brazos cuando se acostó me dejo sin aliento fingir que me quedaba dormida era para saber qué hacía, pero la verdad me sentí feliz por estar así como las muchas veces que dormimos juntos ante de hacer el amor, en su brazos logre conciliar el sueño me desperté con la molestia intensa luz del sol que se filtraba por las cortinas de las ventanas, aún estoy en los brazos de Alex por su respiración que no es nada lenta y la conozco cuando despierta sé que ha estado despierto y viéndome

-porque me observas mientras dormía?

-no quería despertarte solo eso

No respondo solo me acomodo más cerca de él y entrelazo mis dedos con los de Alex al principio se tensa por lo que hice pero segundos después se acomoda más hacia a mí, no sé realmente que me esta pasa será que muy en el fondo de mi corazón a un lo amo en cuanto siento esas palabras que no son pronunciadas ni por mi mente y ni mis labios me siento confundida, mi corazón lo ama pero mi mente dice otra cosa hace que recuerde ese día el que jure que me vengaría “¿podre vengarme de Alex?” me pregunto al formularla aquella pregunta mi corazón me responde algo muy distinto “disfruta este día” realmente estoy perdida, nos levantamos como al medio día tuvo que ir a comprar alimento ya que en el hotel no daban desayuno, almuerzo, cena solo es para dormir y algo de ropa solo espero que no sea un machista mientras que lo espero me doy una ducha lo único que espero de este hotel que las toallas estén limpias me refiero lavadas, tuve como una hora en toallas esperando al lindo para que llegara en cuanto entro al cuarto comencé una pelea con el

-¿!porque mierda llegas tarde!?

-porque no me ubico bien en esta ciudad hace rato que no vengo y otra cosa no solo tenía que conseguir ropa sino que también alimentos si no lo ¡recuerdas!

-sí, Sorry es que estar una hora en toalla me desespero

-pero te vez bien deberías de quedarte así ¡no lo crees!

Me dice el desgraciado mirándome desde los pies hasta mi cara me da una sonrisa traviesa le quito la bolsa donde tiene la ropa y me voy al cuarto de baño a cambiarme digo ponerme algo nuevo y cómodo, hasta compro zapatillas que bueno no creo que hubiera aguantado más con los tacones, después de todo no es un machista me trajo una linda polera morada menos mal que no fue rosa con un shock corto como el que tengo, me veo bien ya arreglada salgo del cuarto de baño para ver a un Alex perfecto vestido y por su cabello mojado recién bañado, me sonríe al ver que lo estoy viendo

-quieres desayunar?

-si tengo hambre ¡gracias!

-de nada!

Me dice ante de sacar las compras de la bolsa que son unas cajas de leche de chocolate, queques, pan con jamón y unos paquetes de papa fritas no es un desayuno sano, pero me gusta tome unos de los vasos plástico que también compro abrí la caja y me serví leche de chocolate tan rica estaba que me tome todo la caja y eso que era de un litro, con dos queque y un pan de jamón al terminar de desayunar Alex me dice

-sí que tenías ¡hambre!

-sí, bueno anoche no comí nada

-lo siento que te haya ¡secuestrado!

El amor puede ser mas fuerte que la dulce venganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora