↳ ❲ LATE NIGHT WORK ❳ ⁰²

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Capítulo 02.

Contiene faltas ortográficas.

LATE NIGHT WORK.





Estiras tus brazos y dejas salir un suspiro cansado. La pila de documentos parecía no bajar y eso te frustraba. Volteas a ver por el enorme ventanal, admirando la ciudad de noche, las luces de los demás edificios se veían lindas, los autos pequeños, personas caminando a pesar de la hora, algún que otro claxon y demás sonidos provenientes de la ciudad te daban al menos poca tranquilidad.

Podrías estar en cualquier de esos bares charlando con Jen y los demás pero, no. Estabas con trabajo extra de imprevisto después de la gran junta de esa tarde pensaste que te daría el día libre.

Escuchas el tono especial del teléfono cuando tu jefe te llamaba. Al parecer solamente quedaban ustedes dos, puesto que Jen hacía rato atrás te estaba esperando para irse juntas pero le dijiste que no podías.

"¿Sí, Nanami-san?" Tomas el teléfono poniéndolo en tu oreja y sujetándolo con el hombro mientras arreglabas tu falda.

"Venga a mi oficina." Dice seco y cuelga. Por más formal que Nanami sonase, existía esa parte de él que te hacía sentir la piel erizada y debido a eso, no podías olvidar a ti misma leyendo el libro Cincuenta sombras de Grey en tu adolescencia, pero jamás podría pasarte a ti. Sería una falta de respeto pensar de esa manera a tu jefe.

Tomas voluntad para levantarte de la silla, y ya que la puerta estaba al lado tuyo, tomas tiempo para arreglar tu falda, recobrar la postura firme y abrochar uno de los tres botones que tenías antes descuidados. Tocas la puerta y sin esperar a que te dijera 'pase', la abres y te adentras puesto que estaba esperándote en cualquier momento.

El recorrido de la puerta hasta el escritorio de vidrio no te tomaba mucho ya que era distancia corta, pero en ese momento sentiste que estabas caminando por horas y que el camino se hacía más largo.

"Gracias por ayudarme con la junta de hoy." Dice en cuanto llegas y te paras frente a él, quien estaba leyendo algo en su celular, lo bloquea y por primera vez en quién sabe qué tanto tiempo, te mira a los ojos. Tragas saliva nerviosa.

Te llevas una mano a la cabeza, sobándola y tus mejillas se ruborizan. "Es mi trabajo, Nanami-san." Sonríes débil.

"¿Cómo va con los documentos?"

Su cabello rubio estaba bien peinado aún, su traje color gris realzaba sus facciones, la corbata de color rojo vino hacia contraste con la camisola blanca que estaba debajo del chaleco gris desabotonado. Sus labios tenían un brillo al parecer de su propia saliva, sus ojos mostraban cansancio conforme pestañeaba.

"¿(T/N)?" Demonios, te atrapó mirándolo. Tu nombre sonaba muy bien saliendo de sus labios. Estás a punto de hablar, pero interrumpe. "Tráelos para acá, trabajaré con usted." Se levanta y abotona su chaleco. Su estatura era impresionante y quedas anonadada una vez más por su físico. Notas que va al extremo de la oficina y saca de un gran closet, una silla desplegable y la lleva hasta enseguida de su escritorio.

Piensas rápido y vas por los documentos de tu escritorio, vuelves para ponerlos en el suyo.

"Tome asiento, por favor." Hace una seña con la mano para que te sentaras en la silla despegable, ahora quedabas a su lado. Comienza a separar la cantidad de trabajo, dándote a ti el más poco. "¿Comenzamos?" No dices nada al respecto y asientes.

𝐋𝐄𝐀𝐕𝐄 𝐓𝐇𝐄 𝐃𝐎𝐎𝐑 𝐎𝐏𝐄𝐍 k. nanamiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora