Bebés.

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Los pensamientos de Ladybug son con curva «bu». Y los de Chat Noir con curva y en negrita «bu».

—¡¿CÓMO PUEDES DECIR ESO!?

Tras vencer a una villana, en el camino de regreso a la Torre Eiffel, Ladybug se encontró con tres bebés. Quería cuidarlos, hasta que su madre venga por ellos, y Chat habló, entonces, empezó el problema.

10 minutos antes...

Después de que la pareja de héroes terminaran de vencer a una akumatizada, se encontraban de regreso a la famosa torre Eiffel. Su Lady le adelantaba un poco, por no decir mucho, por lo cual, estaba mucho más adelante que él.

De repente, se fijó que su bichito se quedó parada, y volteo a un costado, en donde se ubicaban unos arbustos. El gatuno alcanzo a la moteada y cuando vio lo que la ojiazul veía, solo se quedó pasmado.

—¿Esos son... bebés? —preguntó el gatuno.

Ladybug lo miró fulminante.

—¿Eres ciego o qué? 

Chat se estaba dando cuenta que últimamente la moteada siempre andaba a la ofensiva.

«Quizá esta en esos días...»

—¡YA SÉ! 

—¿Qué sabes? —preguntó aún pensativo el gatuno.

—¡Vamos a adoptarlos! 

Chat se quedó callado.

—¿Ya?

—Ehmmm, mi lady, son bebés. No puedes adoptarlos sólo porque quieres, hay todo un papeleo ahí, aparte, ellos implican más responsabilidad que un animal.

—¿Los estás comparando con animales? —dijo molesta.— Los vamos a adoptar y punto. 

—Pero, pero, per-

—¿PERO QUÉ?

No era que Chat no quería cuidar a esos pequeños bebés, su sueño era tener hijos con su bichito, en futuro muy lejano claro. Pero, ¿Cómo es que cuidarían a esos bebés? Él iba a la escuela, y su agenda como modelo ocupaba mucho de su tiempo en su día a día. ¿Cuándo llegaría la mamá? ¿ Y si no llega? ¿Se quedarían con esos bebés? ¿Cómo se supone que cuidaría a esos niños?

—Nos los quedaremos y punto —terminó de aclarar la ojiazul.

—Nos encontraremos en la noche, ¿va? —dijo la heroína. El gatuno aún seguía pensando que era mala idea que unos adolescentes cuiden de unos bebés, pero por darle el gusto a la moteada lo haría.

—Esta bien, bichito.

...

El punto de encuentro fue en la torre Eiffel, Ladybug llegó con la bebé y Chat con el bebé, según el ojo de Marinette les pone unos 8 u 9 meses. La azabache decidió ponerle Emma, igual que como añoró desde niña ponerle a su hija así cuando tuviera una. Por el otro lado, Chat no sabía que nombre ponerle al bebé, pensó uno que otro nombre, pero ninguno que le convenciera. Al final, no se decidió por ninguno y decidió que su compañera lo escoja. La azabache decidió ponerle Adrien. 

—¿Bugaboo cómo le ponemos al niño?

—Te dije que tu le pusieras el nombre. —demandó enojada.

—S-sí, Ladybug, pero no me convenció mucho, mejor escógelo tú —sugirió el rubio, la moteada lo pensó una y otra vez, a la mirada expectante de su compañero. Él gatuno vio como de un momento a otro su lady empezó a sonreír de una manera un poco exagerada.

Lᥲdყᥒoιr || 𝙊𝙣𝙚 𝙎𝙝𝙤𝙩𝙨.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora