Silver Milenium

391 51 18
                                    

Seiya pov's

No habíamos tardado mucho en llegar al apartamento, pero las tres teníamos cosas en las que pensar así que cada una se fue a su habitación y poco después de tumbarme sobre la cama a pensar, me quedé dormida. Como ya era habitual para mí soñé con mi Bombón —estaba segura de que había soñado con ella, aunque había algo en el borde de mi conciencia que no lograba entender—, un sueño dulce y tranquilo que no recordaba por completo. Quizás por qué no lo recordaba por completo, sentía que se me estaba olvidando algo, pero por mucho que lo intenté no logré recordarlo y cuando vi la hora suspiré.

—Es hora...

Me levanté y me revisé en el espejo como acto reflejo antes de vestirme. Ni siquiera pensé en cambiar a mi aspecto masculino, no era necesario ya qué solo estaríamos en la calle un rato, y hasta ahora nadie nos había reconocido cuando estábamos como chicas, además en la luna... no habría ese problema.

Caminé hacía la sala del apartamento, para encontrarme con que Taiki y Yaten estaban completamente vestidas también y parecían casi ansiosas por distintos motivos. Yaten llevaba un vestido, tipo jersey, y botas altas a juego, parecido a mi propia ropa, lo que me hizo reírme ligeramente. Mientras que Taiki, llevaba pantalones ajustados y una sobria camisa entallada, típico de ella.

—¿Nos vamos? —pregunté con curiosidad, mientras robaba unas patatas de la bolsa que había sobre la mesa—. Falta media hora, pero tendremos que caminar hasta allí.

—Sí —Solo Yaten respondió y yo la busqué con la mirada, pero solo hizo gesto que significaba que Taiki llevaba así de pensativa por un rato.

Dado que Taiki había sido la primera en dirigirse a la puerta, supuse que estaba de acuerdo y tras una ligera sonrisa a Yaten, ambas la seguimos. Caminé justo en medio de mis hermanas, las tres estábamos en total silencio y para mi sorpresa llegamos con casi quince minutos de antelación, pero tanto Luna como Artemis, ya se encontraban allí, aunque parecieron sorprendidos de vernos.

—Activen sus henshin —Luna caminó tranquilamente mientras hablaba para colocarse entre Healer y yo, juntando nuestras manos.

Artemis, se puso entre Healer y Maker, y nosotras completamos el círculo, uniendo mi mano libre con la de Maker.

—Ahora concéntrense en su energía interior, pero también en la de la persona que tiene junto a ustedes —Artemis tenía los ojos cerrados mientras hablaba, así que tras ver como mis hermanas lo imitaban también lo hice—. Busquen unir su poder al de las demás. Entrelácenlo como uno solo.

De pronto, comencé a sentir como el aura de poder de Luna me rodeaba, y me sorprendí. Su aura de poder se parecía a la de mi Bombón, aunque no era igual, pero la echaba tanto de menos que removió algo dentro de mí. Desgraciadamente no pude pararme a analizarlo, pues de pronto sentí la energía de mis hermanas y la de Artemis, era una sensación extraña.

Por unos segundos sentí como si mi propio cuerpo se volviera mucho más ligero, y luego volvió a ser igual que siempre, así que abrí los ojos y jadeé completamente sorprendida.

—¿Dónde estamos? —pregunté con sorpresa asimilando todo el paisaje a mi alrededor.

—Silver Milenium —la voz de Luna contenía tanta emoción que pude sentirla en mi propia piel—. Vamos, el palacio está más adelante.

Caminamos en silencio, pero después de aproximadamente diez minutos caminando me quedé congelada.

—¿Seiya? —Taiki y Yaten entraron en mi ángulo de visión al mismo tiempo, se veían preocupadas por mi repentina parada, pero no era capaz de pronunciar palabra.

Amor CósmicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora