Cuidado con lo que deseas || Hero Fiennes Tiffin

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-Voy a saludarlo -dijo ella sonriendo tímida.

Caminó hasta la sala y Titan se giró al escucharla, a lo que Harry se aprovechó y se hecho sobre de ella.

-¡Oye! Eso es trampa -dijo Titan. Seguía casi igual a como lo recordaba.

-Mamá, dile que yo no hago trampa -dijo el pequeño abrazando sus piernas.

-Mi hijo no hace trampa, Titan -dijo ella pronunciando aquellas palabras por primera vez, asombrándose a sí misma. "Mi hijo", más aún cuando sintió cómo si se quitase un peso de encima, le había sentado bien decirlo, ahora se sentía más libre.

-¡Papiiiiiii! -grito Harry corriendo hacia su padre, al ver que "El tío Titan" lo perseguía.

-Heeeey ¿qué pasa, campeón? -dijo Hero cargando al pequeño entre sus brazos.

-El tío Titan -dijo abrazándolo efusivamente.

-Ya veras, Titan -gritó Hero y Titan rió. _______ contempló esa imagen mientras entraba a la cocina, Hero cargando a su hijo y él abrazándolo.

-Mami -dijo el pequeño cambiándose de brazos. _______ sonrió con ternura-. No quiero quedarme con el tío Titan -Hero rió y _______ lo abrazó.

-Será solo mañana, además estarás con Laila -.

-Pero... sólo si me deja de decir tramposo -.

-Le dire que no te diga así jamas -.

-Te quiero mami -el pequeño la abrazó. _______ sintió alegría y emoción al escuchar esas palabras del pequeño.

-Yo los amo -dijo Hero haciendo un abrazo familiar. Para _______ no había persona más feliz que ella.

-Yo también los amo -dijo _______ y Hero beso sus labios.

-Puag! Yo me voy -dijo el pequeño Harry bajando de los brazos, ambos rieron.

-Te amo -dijo Hero, y la estrechó entre sus brazos.

Era sábado, y nada más levantarse y ponerse su mejor ropa –aunque a _______ parecía que todo le quedaba mal ya que empezaba a verse demasiado llenita–, Hero la había hecho salir de la casa y montarse en el auto, que tras un largo trayecto, al bajarse no pudo ver dónde estaba, porque él le había insistido en que se pusiese la cinta para ocultar sus bellos ojos.

Después de un largo camino en el que la hierba acariciaba los pies de ella, él la detuvo y tirando de su cinta, la dejó caer mostrándole la casa de madera en mitad de un bello campo, con una chimenea la cual echaba humo.

-¿Y esto? -preguntó incrédula.

-Es tuyo -.

-¿De verdad? -.

-Desde hoy es completa y únicamente tuya -.

-No sé qué decir -dijo mientras caminaba tras él, aproximándose a la casa.

Al llegar a esta, subieron las escaleras de madera que al tocarlas chirriaban, hasta llegar al porche de la casa. Hero sacó unas llaves y las metió con demasiada lentitud para el gusto de _______, pero al abrir, fue consciente de que valió la pena la espera.