EXTRA 2

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*El hospital*

-Tranquila, no es para tanto -dijo él mientras ella ponía todo su esfuerzo en concentrarse en pujar.

-¿Qué no es para tanto? -le gritó a pleno pulmón-. Si estuvieras aquí no dirías lo mismo -dijo, apretando su mano.

-Ya queda poco, empuja una vez más -dijo el doctor sujetando la pequeña cabecita del pequeño-. Ya está, felicidades es un niño precioso -agregó a los minutos.

-¿Ves? -dijo con sonriendo-. No es para tanto, has sobrevivido -dijo acariciando la mejilla de ella hasta que una de las enfermeras le entregó a su pequeño, esta vez _______ no dijo nada y se quedó en silencio observando a los dos hombres de la casa, solo de ella, solo para ella.




*Comida familiar ≈ 2031 *

Todos estaban concentrados en lo suyo y _______ se reía al ver a Hero con el gorro de chef, dejando asomar esos hermosos mechones de cabello café.

-Me convertiré en chef -.

-Si lo que cocinas son hamburguesas, te apoyo, si no... ni lo pienses -dijo riendo la joven.

-Vendería igual -dijo él alzando el cuello.

-¿Ah, si? ¿Y cómo estás tan seguro? -dijo ella desafiándolo.

-Si me miran tan deseosos como tú y me aman igual, comerán aunque luego sepan que van a vomitar -.

Ella se quedó callada y él tiro de su cintura para besarla.

-Me encanta que sepas que te amo -.

-Si no ¿Por qué después de tanto tiempo estarías aún conmigo? -.

-Es verdad... aunque podría tener un amante -.

-No serías capaz -dijo él entrecerrando los ojos.

-Mmm... pues no... lástima que como tú dices, si te ame -.

-Eres mala -.

-Soy una niña -.

-Mi niña -dijo y esta vez ella le besó, y sin previo aviso sintió esas punzadas en el vientre y dejó caer su peso sobre el.

-Hero... -gimió como pudo.

-¿Qué? ¿Qué pasa? -dijo sujetándola, todos los familiares se giraron hacia ella.

-Me... me... ¡¡me duele!! -grito sin pensárselo Hero nervioso la cargo y camino hacia su auto.

-¡Oh Dios, es peor de lo que recordaba! -.

-Venga amor, aguanta, tu puedes -dijo ya en el auto y sujetando su mano, poniendo en marcha el auto.

-Tengo miedo -dijo apretando sus pies contra el suelo del auto con descontrol.

-No va pasarte nada -.

-No es eso, Hero -dijo reclinando su cabeza hacia atrás cerrando los ojos con fuerza.

-¿Entonces?

-Me da miedo pensar en el sueño... me da miedo que pase lo que vivimos allí, de momento nada de eso ha sido igual... pero ahora, la comida... -.

-Tranquila no permitiré que pase -dijo acariciándola con la mano y en cuanto giró, se encontraban en un enorme caos vial que le dejaba bastante lejos del hospital al que deberían llegar.

Él miró nervioso a su mujer y le acarició la mano de nuevo, pero esta vez ella notó que algo iba mal, ella notó como él no estaba nada tranquilo y al bajar la mirada se vio rodeada de coches por todos lados en medio de un puente con dos únicas salidas.

-Dios mío ¿que vamos a hacer? -.

-Tranquila iremos a pie -.

-Hero... - dijo deteniéndole.- sabes que no llegaremos -.

-No pienso quedarme aquí y ver como te sientes mal delante mío, sería masoquismo, eres mi mujer y te prometí en un sueño que tendrías todo lo que quieras... y lo voy a cumplir -dijo y se soltó de su agarre, salió del auto y se puso al lado de ella cuando fue a abrir la puerta, se dio cuenta de que no podía.- _______, no es hora de jugar, quita el seguro -.

-Busca un doctor, Hero -dijo ella casi llorando.

-Pero tú no quie... -ella le interrumpió y agarró su mano por la ventanilla bajaba.

-Yo quiero que nuestros hijos nazcan vivos y si el médico no viene aquí se que no estarán con vida cuando lleguemos al hospital caminando... -.

Hero lo pensó y la miró. La lluvia empezó a empaparlo y su mente pareció refrescarse, entonces no lo dudo ni dos segundos más y salió corriendo parándose en cada auto.

Al final la joven, como en su sueño, tuvo a sus niños en aquel coche perdiendo todas sus fuerzas para traer al mundo a sus pequeños gemelos...

Cuidado con lo que deseas || Hero Fiennes TiffinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora