¿Jugamos?

Capitulo 3

Dicen que: "La gente te ama por ser bonito. Cuando alguien más bonito llega, te quitará tú lugar".

Pero yo siempre decía: "Nunca te cambian por algo mejor. Siempre te cambian por algo más fácil.

­— ¿Hasta cuándo vas a seguir aguantando, Jess?

—Valery, entiéndeme. Lo amo.

—Valentine, dile algo antes de que le pegue una cachetada que dice: "Amiga, date cuenta". Por qué en serio, ya me estoy estresando.

—Repite conmigo: "No es amor. Es dependencia emocional"

—Si es amor, no es dependencia emocional.

—No jodas, Jess.

—Valery, no podemos hacer nada más que dejar que tome sus propias conclusiones.

—Es que... Tú más que nadie sabes, Valentine. Ella está cegada.

—Él es el amor de mi vida. Él puede cambiar. Les juro que sí, solo tengan paciencia.

—La perdimos. —Dice Valen.

—A ver, Jess. ¿Ese "amor" te da buena estabilidad emocional? ¿Te da comida? ¿Te da casa? ¿Carro? —Le dije.

—Pues... —Respondió Jess.

— ¡No! Ese amor no te nada, cariño. El dinero, dinero. Y para conseguirlo, tienes que soltar las malas energías. —Exclamó San Valentine.

— ¡It's okay! Sí es dependencia emocional como ustedes dicen. Pero me es difícil soltarlo.

—Cariño... La vida es demasiado corta como para estar loca por alguien que no está loco por ti

­—Lo sé, Valery, pero él va a cambiar. Me juro que si lo hará esta vez.

—Y volvemos a lo mismo.

—Llevas varios meses diciendo lo mismo, Jess. Ya es momento de que te des cuenta que ahí no es.

— ¿Darme cuenta de qué?

— ¡De que el amor te puede matar!

—El amor no te mata, Valery. El amor es hermoso, maravilloso.

—Tiene el poder de destruirte cuando y cuantas veces quiera.

—Debo irme, chicas. Tengo cosas pendientes que hacer.

—Valery... No te enojes. Compréndeme

—No estoy enojada. Quiero lo mejor para ti y Valentine.

A veces es mejor esperar a que se dé cuenta por sí misma.

Jess y Valentine son mis mejores amigas. O eso creo. Antes creí que tenía muchas amigas, amigos, pero bueno. Si mis amigos fueran billetes, estaría rodeada de billetes falsos.

Iba camino a mi apartamento, tenía que organizar varias cosas, ya que, aunque llevo varios meses desde que me independice, aun no termine de desempacar varias cajas, ya que, no son cosas importantes.

He olvidado hacer el procedimiento para que le pongan una orden de alejamiento a Andrés, quiero tener paz y seguridad.

—Debí hacer caso cuando me dijeron que no me cruzara en su camino. Maldito bastardo.

Después de varias horas de arreglar todo, me dispuse a revisar mi celular. Me habían escrito 2 números desconocidos por la red social de WhatsApp.

Había un chat con más de 10 mensajes y otro con 3 mensajes. Como cualquier ser humano curioso, abrí el de más de 10 mensajes.