REGINA +18 (en edición)

Capitulo 8.

Camille.

03 de febrero del 2019.

Me adelanto detrás de Regina que se va y Mariah viene detrás mío preguntando.

- Hey, ¿Tú también te vas y me dejas con preguntas? -comenta Mariah furiosa.

- No solo es que... es mejor que hablemos en casa. -respondo.

Mariah me sigue y juntas abordamos la otra camioneta negra que espera por nosotras para llevarnos a la mansión de Regina. En el camino pienso en cómo contar mi parte de la historia, no quiero que Mariah piense que soy una mala persona por ayudar a alguien o mucho menos. 

La camioneta se desvió de la autopista y tomamos una ruta por la montaña llena de árboles e inmensas mansiones, es un lugar hermoso. Mariah está durmiendo y aprovecho para llamar a mis dos hijos, saco de mi bolso el móvil y marcó a mi hijo mayor Alex.

El teléfono marca y al tercer pitido contesta...

-Mamá saluda emocionado mi hijo.

-Cariño, ¿Cómo están Christian y tu? -pregunto- ¿Tu hermano está ahí contigo?

-Estamos bien mami, el se fue a dormir ya. -responde mi hijo. -¿Cuando vuelves?

-Dale un beso de mi parte, regreso en dos días cariño.

-Mami te extrañamos ven ya, papá vino a visitarnos con la tía comenta mi hijo. La tía no nos agrada, ella es mala.

Siento como la sangre caliente sube a mi cabeza, no quiero a esos dos cerca de mis hijos.

-Tranquilo cariño, mamá lo resolverá. ¿Ok?

-Esta bien ma. -responde mi hijo bostezando.

-Ya ve a dormir que mañana has de tener clase, te adoro hijo.

-Bye mami, te amo un montón. dice mi hijo cerrando la llamada.

Siento rabia, mi hermana ya me quitó a mi marido y ahora quiere ganarse el cariño de mis hijos a la fuerza y eso es algo que no se lo voy a permitir, no solo porque me quitó a mi esposo si no porque mis hijos no se sienten cómodos con ella, busco en mi agendas de contactos de mi teléfono y el encuentro el numero de Juan  Lazcano, el jefe de seguridad de mi casa. 

Le dejaré un mensaje de texto.

Buenas noches señor Lazcano, habla la señora Camille. 

Me tomé el atrevimiento de escribirle a estas altas horas de la noche para que por favor duplique la seguridad de mi casa y le quede prohibida la entrada al señor Arturo Vanderbilt y a su actual pareja, podrán volver cuando esté de regreso en Nueva York, de lo contrario no.

Minutos más tarde de dejar ese mensaje llegamos a la gran mansión donde nos quedaremos los próximos días, una enorme puerta de rejas negras nos recibe y nos abre las puertas dejando a la vista la hermosa villa color blanco con grandes ventanales y una amplia entrada con un inmenso jardín. 

Mariah ya despertó y el chofer nos abre la puerta para que entremos a la casa. Entramos a la casa y mi amiga me tomó del brazo y subimos las escaleras rápido, entramos a la primera habitación donde yace una enorme cama doble color negro, con grandes ventanas alrededor que muestra la vista a la piscina de la casa y tiene un walk in closet casi del tamaño de la habitación. En la pared de enfrente hay una pequeña chimenea en cristal y encima una enorme pantalla plana, la habitación es bastante moderna.

Regina si que sabe de gustos caros.

- Ahora si quiero que me cuentes todo con lujos de detalles. -comenta mi amiga Mariah.