REGINA +18 (en edición)

Capitulo 14.

Regina.

Roma, Italia.

Entre abro un poco mis ojos, la luz del sol entra por la inmensa ventana. Me siento en la cama a revisar si tengo mensajes, me quede dormida trabajando hasta tarde en mi laptop. 

Estoy cansada.

Han pasado tres semanas desde que llegue a esta ciudad, me ha costado un poco acoplarme, pero con el tiempo lo haré. La casa de Pierre es muy cómoda y el servicio es excepcional, me han tratado como una reina desde que llegue. 

Los primeros días me sentía extrañada al estar en un nuevo hogar, lo sé soy muy difícil a adaptarme a nuevas situaciones, pero desde que pequeña he sido así.

En la segunda semana me sentía un poco más amena, Pierre hablo con sus contactos de la policía para que me vigilen discretamente por toda la ciudad, además ya insertaron en mí el chip de rastreo que Pierre me había dicho en Nueva York. Al principio no me gustaba la idea, pero el solo hecho de que Alessandro me secuestrara me hacía cambiar de opinión. 

-Tranquila, no dejaré que te pase nada - las palabras de Pierre vienen a mi mente. 

Desde que llegué me enfoqué en empezar a trabajar para distraer mi mente, se suponía que apenas llegara Alessandro y yo trabajaríamos de la mano juntos, pero no ha sido así.

No he vuelto a ver a Alessandro desde lo que pasó en el aeropuerto, aún recuerdo su cara cuando inventé que Pierre era mi novio, pude ver algo de tristeza en su mirada pero al mismo tiempo una expresión de desprecio hacia mí.

 La verdad no sé que se creía porque él me hablaba como si fuera su novia, cosa que no es así.  

La puerta de la habitación se abre  - Chula el desayuno. - comenta Alexa, es una de las empleadas de la casa. - Vamos que el que madruga Dios lo ayuda. - dice con una sonrisa.

Desde que la conocí ella siempre ha sido una persona muy alegre.

- Gracias. - le dedico una sonrisa de media boca.

- No le digas chula, respétala que es nuestra jefa. - comenta Jazmín molesta. - No puedo creer lo zalamera que eres.

- ¿Celosa?- dice Alexa molestando a Jazmín y esta le tuerce los ojos.

- Basta, chicas. - intervengo tratando de poner la paz, pero ellas siguen discutiendo.

- Eres una arrastrada. - la insulta Jazmín.

- Y tú eres una envidiosa. - dice Alexa. - Aprende a compartir a tu jefa.

- Consíguete la tuya. 

- No es necesario,  con la tuya basta y sobra.

Jazmín aprieta sus manos a los lados y trata de irle encima.

- Suficiente las dos. - espeto seriamente. 

Cuando llegué a esta casa Alexa siempre me ha dado un buen trato, tanto que ha puesto celosa a Jazmín porque dice que ya no la escucho y que tengo empleada favorita. Sin embargo sus peleas me dan risa y me distraen un poco.

Ellas dos me dan un poco de drama para reírme mientras vivo mi miserable vida aquí.

No es que sea mal agradecida o algo así, porque en la casa de Pierre me han dado toda la atención requerida y él ha sido muy atento, pero salir a las calles con el miedo a ser raptada y vivir con la incertidumbre de que en cualquier momento te puedan matar, no eso no es vida.

Las chicas salen de la habitación y me dirijo al baño a tomar una ducha.

Hoy ir a ver el terreno donde se construirá el hotel e iré con Pierre, ya que Alessandro no se ha reportado, observo mi deplorable reflejo en el espejo y doy pena ajena.