Serás Mío •Au Jikookmin• Terminada

•Capítulo 23•

Las prendas de ropa habían  desaparecido y los besos no dejaban de ser presentes, la calentura invadían sus cuerpos y solo querían llegar más alla que besos y caricias, pero querían que esto sea todo con calma y especial.

Jungkook era él que estaba arriba de su chico mientras lo besaba y lamía algunas partes de su cuello haciendo una que otra marca, y cada vez que lo hacía podía escuchar los leves gemidos y la respiración agitada del peligris.

—Bebé... —Lo mira y Jimin sonríe para luego besarlo en sus labios—

—No te preocupes ¿Si?

Jungkook asintió con una sonrisa abrazandolo por su cintura acercándolo más a él haciendo que sus miembros tuvieran más contacto, cosa que Jimin también sonríe a tal acto rodeando su cuello con ambos brazos, el castaño lo suelta de su cintura para luego pasar su mano por su esta y luego bajar por su glúteo y pierna, en el que solo roza unos centímetros la entrada de Jimin, que apenas lo hace se escucha la respiración pesada de su chico, vuelve su mano a su glúteo para luego apretarlo mientras que besaba sus labios y Jimin soltaba otro gemido, escucharlo no lo ayudaba a controlarse y pasa solo dos dedos por la entrada de su chico superficialmente.

—Jung...Kook... —Gemia apenas que pasaba sus dedos que producían una corriente eléctrica por su espalda, así que levanta más sus piernas y las enreda en su cintura haciendo que se gire y quedar él arriba ésta vez—

—Mi bebé es rudo... Eso me gusta —Sonríe y se inclina para alcanzarlo y besarlo acariciándo su espalda suave y perfecta—

Jimin comenzó a mover sus caderas con suavidad haciendo que el miembro duro del castaño rozará con su entrada, ambos estaban perdiendo el control y el peligris estaba desesperado, quería tener dentro suyo a Jungkook ahora.

—A-amor... —Dijo sintiendo de nuevo los dedos de Jungkook en su entrada haciendo que eleve un poco sus caderas por el contacto—

El castaño solo sonríe y coloca sus dedos en la boca de su chico en el que éste los lamió de una forma tan excitante que hizo que Jungkook no tuviera control de sí mismo y cuando ya estaban bastante mojados con su saliva los saca con cuidado para ir a su entrada e introducir el primero con lentitud, escuchó un gemido de dolor de parte del contrario que hizo que estuviera en alerta, introduce el segundo dedo con cuidado y comenzó a moverlos de arriba a abajo penetrándolo con sus dedos lentamente mientras escuchaba los gemidos leves de Jimin que se notaba que trataba de ser silencioso y apenas que lo vio, notó que tenía sus ojos brillosos.

—Bebé estás...

—Tu sigue... Te necesito —Menciona con su respiración agitada y siente cómo sacaba sus dedos ya que estaba bastante dilatado—

Jungkook levanta un poco las caderas de Jimin, para luego tomar su miembro ya bastante duro con su mano libre y comienza a jugar con él por un momento, luego introduce solo la punta de éste en la entrada del peligris, cosa que toma de nuevo de su cintura para bajarlo de apoco y que su miembro entrará por completo con la mayor lentitud y cuidado.

—D-dios... —Se queja abrazando al castaño mientras cerraba sus ojos con fuerzas, su cuerpo entero se había tensado por el dolor y de la nada siente como una lágrima corría por su mejilla, Jungkook limpio aquella lágrima con delicadeza y no lo pensó dos veces para besarlo en sus labios para luego besar cada una de sus mejillas con un beso suave y tierno, más caricias en ésta que hacía que Jimin se sintiera más calmado y seguro, una sonrisa se plantó en su rostro más sus ojos cerrados apenas siente el contacto perfecto de parte de Jungkook, disfrutando del momento—

—¿Estás bien?

Jimin asintió después de unos segundos, necesitaba tiempo para acostumbrarse y hasta su respiración se había entrecortado por el dolor que había producido, un dolor que de apoco fue desapareciendo ya que sus caricias fueron las que lo desconcentraba de aquello.