Una pequeña esperanse (2 parte)

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Carlota: Y, ¿Cómo a ido el proceso de investigación?
Carmen: No hemos avanzado nada, me dijeron que ya era muy difícil que pudieran localizarla ya que habían pasado días, que esto se hace desde el primer día.
Carlota: Achis, ¿Tu no fuiste el primer día?
Carmen: Si, pero no procedieron porque el policía que tenía que ayudarnos metió preso a mi esposo.
Carlota: Esto no se quedará así, mañana saldremos  a primera hora hacer que esos malditos muevan el culo y busquen a Paola. A si que duermete ya, ya que mañana será un día pesado.

Se fueron a dormir a sus respectivos cuartos, Carmen esa noche se sintio un poco más tranquila y tenía una pequeña esperanza de que todo estaría bien.
A la mañana siguiente Carlota y Carmen salieron a las 7 de la mañana para ir nuevamente al ministerio a pedir ayuda. Sebastián se quedó en la casa porque quería que se hiciera más tarde para ir a casa de sus amigas y expareja de Paola para preguntar nuevamente de ella.

Señorita Claudia: Buenos días, ¿En qué les puedo ayudar? - pregunto con una sonrisa en el rostro.
Carlota: ¡Hola, buenos días hermosa! Mira lo que pasa es que ya hace unos días mi sobrina desapareció, y me urge que ustedes activen una búsqueda y la alerta amber.
Señorita Claudia: Ja' señora, aquí yo hago mi parte y usted hace la suya, le comento que si a usted le importará encontrar a su sobrina habría venido desde el primer día, no días después.
Carlota con una sonrisa contesto- Mi hermana vino desde el primer día y ustedes no procedieron, y no hay día que ella no deje de venir para que habrán una maldita investigación y ahora vengo yo.
Señorita Claudia: ahorita no puedo hacer nada por usted ya que no han llegado los encargados para hacer este tipo de investigaciones.
Carlota: No se preocupe, aquí esperaremos hasta que lleguen - con una sonrisa retadora contesto.

Se sentaron ambas para esperar a que llegaran los policías o los agentes. Iban llegando varias personas, pero Claudia nunca les llamó para que comentaran su caso.
Carlota entró en desesperación y se levantó y fue hacia el mostrador.

Carlota: Disculpe, ¿Ninguno de ellos puede ayudarnos?
Señorita Claudia: No lo creo, ellos tienen cosas muy importantes que hacer.
A Carlota eso hizo que la sangre le hirviera.
Carlota: ¿Qué  quiere decir? ¡Qué una chica desaparecida no es importante, es eso?! ¡Digame! - golpeo el mostrador.
Señorita Claudia: Señora, le pido que se tranquili...
Carlota: ¿Cómo quiere que me tranquilice? Lleva ya casi una semana fuera de casa.
Señorita Claudia: ¡Yo no tengo la culpa de que su sobrina sea una loca! Ya le dije a su hermana, que probablemente esta con su novio, y si no es así ya en estos momentos esta muerta o fuera del país.
Carlota: ¡Como es te ocurre decir eso maldita estupida! Tu eres una pinche recepcionista, no eres policía, así que no puedes determinar quien era ella, es más aún asi fueras policía, debes de tener respeto, y cerrar tu pinche osico y hacer tu trabajo pendeja.
Señorita Claudia: en ningún momento yo la ofendí.
Carlota: ofendeme, para que veas como te va, sabes que, ya estuve 5 horas esperando a que me dejaras hablar con alguien, y como no me dejas, compermiso, yo voy a pasar, vamos Carmen.
Señorita Claudia: No me haga llamar a seguridad.
Se regresó Carlota y en susurrando le dijo.
Carlota: Y a mi no me hagas hacer que te corran y aparte partirte tu madre, compermiso señorita.

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