SIEMPRE HAY QUE VOLVER A DESPERTAR [Final de temporada]

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"Vamos Izuku"

Eran las palabras de un hombre castaño y de ojos verde oscuro.

El niño se encontraba realmente feliz; el dia de hoy, su figura paterna lo había decidido llevar a divertirse hasta que pareciera que iba a reventar.

Izuku: Ya voy.

El niño reía mientras trataba de igualar la velocidad del adulto, lo cual, obviamente era imposible.

Ghost: Vamos, alcánzame.

Ambos estaban compitiendo para ver quien llegaba primero a aquel quiosco que se encontraba en la playa que decidieron visitar.

Cuando finalmente llegaron, el adulto comenzó a burlarse de Izuku por haber perdido, mientras por su parte, el niño solo hacia un puchero. Ghost tomó a Izuku por la cintura y aplicando algo de fuerza, lo subió a sus hombros.

La vista era maravillosa; era la primera vez que el niño veia el gran e inmenso oceano. No pudo evitar sentir un calor extremadamente agradable recorrer su pecho.

El niño observaba maravillado todo, como si se tratara de un perrito que da el primer paseo de su vida.

Izuku: Gracias Ghost.

Fue lo que el niño expresó, para que luego, el castaño le contestara.

Ghost: No me lo agradezcas todavia. Aún hay muchas cosas que vamos a hacer.

Al niño se le iluminaron los ojos, mientras respondia "Si", seguido de una sonrisa de oreja a oreja.









































Izuku: ¿Está a tus espectativas?

Fue lo que preguntó el chico de cabello largo a su amigo rubio.

Steve: Supuse que estaría horrible teniendo en cuenta que es tu comida favorita, pero no está nada mal.

Ambos rieron un poco por la broma del rubio, mientras este le daba otro bocado al tan famoso "katsudon".

Izuku: ¿Feliz de haber salido se esa isla?

Steve: No te haces una idea de cuanto.

Ambos siguieron conversando mientras tomaban unas cervezas, pues debido a la apariencia de Izuku, no se lograba percibir que era menor de edad.

Izuku: ¿Como van las cosas con Malina?

Steve: Van bien. En especial por que hay alguien que pronto te dirá tio.

El chico se sorprendió mucho por lo dicho, aunque estaba increiblemente feliz.

Izuku: Desgraciado hijo de perra. Me alegro mucho.

El muchacho apenas podia contener su sonrisa de felicidad, pues sus mejores amigos iban a tener un bebé.

Izuku: Oye, esto hay que celebrarlo.

Steve: No creo que sea una buena idea. Malina de hecho me prohibió que te lo dijera, ella queria que fuera sorpresa, asi que, cuando se entere te aseguro que me va a matar.

Izuku: Vamos. Solo algo pequeño.

Steve: Eso dijiste cuando salimos de la isla y a la mañana siguiente no podia recordar ni como me llamaba.

Izuku: Bien. Entonces, elige tu lo que quieres hacer.

Steve: Hecho.

El rubio se levanto de la mesa, dejando solo los billetes para pagar la comida.

EN EL CAMPO DE BATALLA  (BNH)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora