4. Su Primera Mordida

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Una semana había pasado y Yugyeom no había podido escaparse a parte de que seguía pensando seriamente en lo que había sucedido la noche donde le mostraron la cruel tortura al hombre traidor. 

Aun en su cabeza se escuchaban los gritos del chico al ser electrocutado, no quería que eso le sucediera. 

¿A donde vas?— su madre lo miro cuando este iba saliendo, le había llegado un mensaje de BamBam diciéndole que Mark estaba insoportable por lo que supo que ya no podía esconderse. 

Iré con Jungkook— formo una sonrisa al mentir— ¿Puedo?— hizo su voz un poco más aguda sabiendo que a su mamá le gustaba que este fuera lindo. 

Claro que puedes— sonrió su mamá— pero no llegues tan tarde— y con eso se despidió de su hijo. 

Por otro lado Mark se encontraba preocupado, hace una semana que no sabe nada del hechicero y aunque BamBam le dijo que este estaba bien aun seguía con la latente duda de porque no había ido. BamBam y Yugyeom habían creado una especie de lenguaje para hablar a larga distancia sin que nadie sospechara a pesar de todo pocosa veces utilizaban eso ya que aún existía que alguien notará el comportamiento extraño. Y ahora Mark estaba demasiado preocupado pensando en cómo aprender el lenguaje a larga distancia que en sus tareas de vampiro.

Ser un vampiro no es fácil, todos piensan que son criaturas que solo saben beber sangre y asesinar a sus enemigos, pero de hecho eso había cambiado. Seguían bebiendo sangre porque de eso se alimentaban, no podía dejar de comer solo para verse como alguien bueno. 

Los vampiros habían creado tres reglas para poder sobrevivir, siendo la primera la más estricta y la que nadie rompía. 

Nada de la familia Kim. Solo que aquí la regla estaba fundamentada y es que no querían una guerra con estos. Estaba prohibida esa familia de hechiceros, y todo porque esta había comenzado el odio hacia  los vampiros.

Están prohibidos los hombres lobos, ya saben, siempre tuvieron esa rivalidad que hasta la fecha sigue, pero cada vez era más común dejar el rencor y se comenzaban a ver amistades entre licántropos y vampiros.

También tenían una regla para comer, pero esa era de menos importancia, solo debían tener cuidado con la presa que elegían y dependiendo el caso deberían matarla.

Mark se encontraba mirando la pared donde tenían escrito el pergamino con las reglas, era un poco ortodoxo este metodo, pero era el mejor. Sus ojos se perdieron en cuanto leyó Kim, no podía dejar de pensar en que esa familia era tan cruel sin embargo la imagen de Yugyeom aparecía y lo hacía pensar de manera distinta. 

Vas a gastar el pergamino— escucho la voz de Jinyoung por lo que volteo sintiendo un escalofrio, no se esperaba que este fuera a salir de la nada— pensando en Yugyeom— se burlo y Mark soltó un suspiro.

Yo no entiendo nada— Mark al fin soltó— toda nuestra existencia de siglos nos enseñaron que la familia Kim era horrorosa—

Y lo es— Jinyoung miro a Mark sabiendo por donde estaba yendo su conversación— pero Yugyeom es distinto a toda su familia... Es demasiado estúpido como para saber que el poder corrompe a cualquiera, solo ve lo bueno en las cosas— sonrió, hace tiempo que no veía que Mark se sentía tan confundido por alguien. Pero lo entendía, al principió también sospechaba de que Yugyeom fuera alguien que solo estaba actuando, pero ya había confirmado que eso no podía ser posible y todo porque vio la verdad. 

Después de eso caminaron en silencio, debían tener cuidado de que alguien los descubriera hablando bien de algún Kim, aunque en realidad no sabían que clase de castigo podrían ponerles después de todo, nadie nunca había roto esa regla ya que todos los vampiros odiaban por igual a la familia Kim. 

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