Acostumbrado

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El sol impactó en sus ojos especialmente fuerte aquella mañana, al momento en que sus cortinas automáticas se abrieron y dejaron entrar la brillante luz natural del día.
Minghao solía pensar que el sol era el mismo en todos lados, pero podía jurar que en Seoul, los rayos solares pegaban con más fuerza que en cualquier otro sitio.

Pateó sus sábanas, tomó su ropa formal, sus relojes, y caminó directamente hacia el baño. Aquella mañana no tenía tiempo que perder, por lo que su manager y sus empleados tendrían que soportarlo de mal humor.
Como ya era habitual durante los eventos, a decir verdad.

Su manager Yoo, una mujer joven y de estatura baja, preparaba el bolso mientras Minghao salía del baño.

- Salimos en cinco Yoo, la mochila ya debería estar lista -El joven chino acomodaba su traje frente al gran espejo la su sala, la cual era iluminada gracias a los enormes ventanales que reemplazaban dos de sus paredes, una de las ventajas de vivir en el último piso.

- Ya tenemos la muda de ropa para la noche, también los celulares y un auto nos espera abajo -Minghao no respondió, ya era una rutina para él, especialmente en los eventos importantes como estos.

- Los últimos dos cuadros del mes pasado ya están vendidos, el de enero va a ser subastado esta noche -Yoo tomó las llaves del edificio, y abrió la puerta principal para Minghao, quien ya se encontraba listo para salir.

- ¿Como me veo?.

- Impecable -Dijo su manager a la vez que ambos salían del edificio, sin querer perder ni un segundo más de su costoso tiempo.

No estaban llegando tarde, pero el trafico en las calles era terrible, y aún así Minghao supo aprovecharlo al máximo mientras retocaba su maquillaje y repasaba su agenda para esa semana.
Estaba ajustado, pero si movía un par de horarios, tendría tiempo de pintar un cuadro más.
De esa forma trabajaba él, siendo además de un artista, una celebridad; y aunque la palabra suene vulgar, también un producto.

- Ahora mismo son las 08:26 AM, hacen 16° grados en la ciudad, con sensación térmica de 17°, se pronostica lluvia para esta noche...

- Odio la lluvia... -El clima húmedo ponía de mal humor al artista.

- De todos modos tenemos que ir al evento de la noche, ya se lo prometimos a Vogue, no podemos cancelar -Los de arriba siempre eran quienes tomaban las decisiones , era algo que le molestaba un poco, pero al fin y al cabo no podía quejarse ya que vivía gracias al dinero que su cara generaba en las portadas, ya se había acostumbrado- ¿Señor Xu? -Minghao prestó atención a su manager, ya que se había mantenido con la mirada en la ventana desde hacía rato- ¿Todo bien?.

- Solo me preparo -Yoo lo respetó.

Un par de minutos después llegaron al sitio del evento, un gran edificio moderno que no debía haberse construido hace más de un año, con hermosos ventanales como paredes y una escandalosa alfombra roja, por la cual todos los invitados importantes debían caminar y posar para las cámaras.

¿Era tedioso? Claro que si, pero Minghao ya estaba acostumbrado, era lo que tenía trabajar de eso hace años.

Si había algo que le gustaba de los eventos, era el momento de mostrarse ante las cámaras, vistiendo las ropas más finas y preciosas que se podían conseguir, desde trajes a medida con colores opacos hasta trajes sueltos y ligeros en tonos pastel.
Y esa era otra de las razones por las que se había vuelto tan famoso.

Sus fotos bajo la premisa "El pintor más guapo de Corea" corrían de un lado a otro por la televisión, por Twitter, por YouTube, no sólo su arte era hermoso, él también lo era, y Minghao estaba al tanto de eso.

Motivation - JunhaoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora