GOMORRA: "Castigo y Lujuria"

Capítulo 1: Bienvenida a los corderos

NOTA DE LA AUTORA: ¡¡Buenas de nuevo!!!! lo prometido es deuda y después de haber finalizado el fic de "Sodoma", aquí os traigo su continuación, "Gomorra", dando uso al juego de palabras de estas dos ciudades antiguas donde el placer y el vicio campaban a sus anchas.

Tras un final inesperado y pre-apocaliptico, tenemos una nueva historia más actual, donde los mismos personajes volverán a interactuar entre sí aunque de modo diferente en un nuevo escenario. ¿Conseguirán salvarse del apocalipsis o la historia de Sodoma se hará realidad finalmente? tendréis que descubrirlo.

AVISO: Como de costumbre, lenguaje malsonante, mpreg, salen algunos personajes inventados por mí, mucho lemon explícito, etc....

*Para entender mejor esta historia deberíais haberos leido la primera parte porque todo va conectado a ella, aunque también puedes leerte esta y luego enlazarla con la anterior ya que las temáticas son totalmente diferentes, es igual el orden aunque os aconsejo mejor la primera opción.

"Gomorra: Castigo y Lujuria"

1-Bienvenida a los corderos

**Tensa**

Un nuevo bache del autobús en el que voy sentado me hace removerme en el asiento maldiciendo mientras subo el volumen de mi teléfono para que la música se oiga con mucha más intensidad en mis cascos. Miro de reojo el paisaje verde del bosque en el que nos hemos adentrado hace unos kilómetros y suspiro alzando la mirada cuando llegamos a un edificio de muros de piedra con apariencia de castillo antiguo en lo alto de una colina rocosa. El aspecto tétrico y viejo que tiene no me motiva en absoluto, espero que por dentro sea un palacio moderno porque si no pienso quejarme nada más entrar.

Cuando todos los estudiantes nuevos que venimos bajamos del autobús, siento un estremecimiento mezclado con una sensación de abatimiento que me deprime. No puedo creer que vaya a hacer la preparatoria en otro maldito internado y mucho menos regentado por mi "señor" padre. Si no soportaba ya a mi madre, ahora aguantar a otro viejo no entra en mis preferencias. Pienso conseguir que me echen como sea, o al menos que me teman como hacían en mi antiguo centro. Da igual que internado sea, son la misma mierda. Una cárcel para niños.

- "Por favor, todos los nuevos estudiantes reúnanse en el salón principal ahora mismo"- maldigo entre dientes al oír la megafonía mientras me echo la mochila a la espalda intentando no perder el equilibrio porque es más grande que yo y eso hace reír a los demás.

- ¿Qué? ¿queréis que os raje de arriba abajo mientras dormís??- los dos que se estaban burlando palidecen al oírme y yo meneo la cabeza gruñendo. Siempre lo mismo, todos me creen débil al ser tan bajito y escuálido, pero tengo los cojones bien puestos.

En el pasillo que cruzamos veo como hay varios estudiantes mirándonos desde las escaleras, todos con sus uniformes de pantalón y chaqueta gris con un chaleco color amarillo pálido y corbata azul. Dios...que ropa tan deprimente...no pienso ponerme eso ni de coña....

-Vamos muchachos, entrad que no mordemos...aún...- abro los ojos al escuchar una sonora carcajada de un enorme hombre de cabello largo negro, bigotón con unas patillas largas y unos ojos rojos intensos que hielan la sangre a cualquiera. Va trajeado de marrón oscuro luciendo varias cadenas y anillos de oro que me llaman poderosamente la atención. Uau...podría sacar mucho dinero si los vendiera...al menos para largarme lejos de aquí...

-Sé que muchos os estaréis preguntando porqué estáis aquí- arqueo una ceja cuando dice eso mientras se pasea por la estancia mirándonos. –Yo os lo diré. Estáis aquí, porque vuestras familias ya no saben qué hacer con vosotros y porque necesitáis que alguien os meta un palo en el culo para poneros bien rectos- todos los nuevos jadean al escucharle y yo me quedo atónito por lo directo y bruto que ha sido. ¿En serio??