Secretos Oscuros. (PAUSADA)

Capitulo Siete

¡Hey Chicos!
He editado el capítulo anterior (Capítulo Seis), por si no lo han leído. O por si no se han dado cuenta ;)
¡Los amo! ¡Ya son 250 Lectores!
Gracias, muchísimas gracias, los adoro!!

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Escucho abrir una puerta. Creo que es la misma habitación en la que estoy.

Me siento cansada. Trato de abrir los ojos pero no puedo.

Creo escuchar un pitido constantemente. Como si estuviera en un hospital. ¿Lo estoy? ¿Es un sueño? ¿Por qué no puedo abrir los ojos?

Siento como si alguien se sentara en un sofá muy cerca de mi. Suelta un fuerte suspiro. Al parecer es un Hombre.

Por los pasos y el suspiro que soltó, lo sospecho.

Se abre la misma puerta de hace unos segundo y ahora escucho unos pasos, pero ahora son... me parece que tacones.

- Buenos Días O Tardes. - Dice la voz femenina.

- Tardes. - Le responde la masculina. - ¿Cómo se encuentra?

Espera... Yo conozco esa voz. No recuerdo quien es.

Escucho los tacones caminar hacia mi. Me toca el brazo.

¡Auch!
Duele.

No logro mover el brazo.

¡Mi cuerpo no responde!

- En cualquier momento despertara. ¿Es familiar? Por que si no lo es, no debe estar aquí. - Dice la voz femenina, muy autoritaria pero con una voz dulce.

- Soy... - Tarda un momento en responder. -Su novio.

- Hmmm... Esta bien. - Le responde algo dudosa... creo que es la ¿enfermera?

- Su madre ha ido a casa, le prometí cuidarla hasta que regresara.

- Bien. Solo estoy revisando si esta estable, por que ya debió haber despertado.

Escucho que pulsa algunos botones.

- Me retiro. Cuídela y cualquier cosa, solo hágamelo saber. Estoy aquí afuera.

Escucho como sus pasos se alejan a un ritmo despacio pero no demasiado. Un ritmo... tranquilo.

Trato de abrir los ojos. Esta vez mi cuerpo si responde. Aun que lentamente los abro.

Observo a todos lados. Estoy en una sala de un hospital. ¿Que mierda me paso?

-Al fin despiertas.- Tenía que suponérmelo. Es el... Estupido.

-¿Que haces aquí? Claro, Si se pudiera saber. - Le respondo algo molesta.

-Ayer te desmayaste. Si no hubiera sido por mi, te hubieras, golpeado muy fuerte en la cabeza. Así que te debo la vida, niña tonta.

- Absolutamente nadie pidió tu ayuda. Así que, muchísimas gracias por cuidarme. Una vez más, lárgate.- Alzo la voz enojada.

- No, hasta que te levantes y sepas como caminar.
Es lo único que me faltaba, cuidar a una niña boba, como tu.- Me contesta casi del mismo modo en que lo hice yo.

-Muy bien. - Le contesto retándolo.

- Así que... no molestes. - Dice, en tono molesto.

Me doy cuenta y esta levantando enfrente de mi, con una mirada enfadada y molesta. Si no estuviera por sentarse de nuevo, no me hubiera dado cuenta.

Me siento en la camilla en la que estaba acostada.

Toco mi cabello. Está hecho un desastre.
Lo tomo con ambas manos y me hago una coleta con la liga que tengo en la muñeca de mi brazo.

Observo la maquina en la que esta midiendo los latidos de mi corazón.

Está normal, supongo...

Me destapo con una mano mi cuerpo, completamente de la sabana en que la cubre.

-¿A donde piensas ir?- Deja a un lado el libro que esta leyendo, para observarme.

-Parece que tienes amnesia. ¿Que? ¿No recuerdas? - le digo casi, ladrando. -Acabas de mencionar hace menos de cinco minutos que te iras cuando sepa como caminar. ¿Sabes que? Ya se como hacerlo. Solo que al parecer se te olvida todo. Tendré que mostrarte que se perfectamente como hacerlo. Idiota.

- No se te ocurra hacer ninguna tontería. Me advierte con un tono muy amenazador pero, muy sexy y provocador para desafiar. Totalmente. Me mira fijamente, como si estuviera esperando algo.

Muevo mis pies de un lado al otro, para comprobar que responden. Al confirmarlo, saco una pierna primero de la cama. Dejándola colgando de ella.
Levanto la vista para verle la cara. Tiene cara de... ¿Enojado? ¿Sorprendido? ¿Molesto?

Es demasiado confuso este hombre.

Saco la otra pierna sin bajar la mirada.
Estoy a un movimiento de quedar en pie y caminar un poco. Solo para que el niño se largue...

Acaso... ¿Quiero que lo haga?

Con pensarlo, suelto un pequeño brinco y quedo de pie justo frente de el.

- Ja, Hacke Mate [Si esta mal escrito me dicen, en los comentarios] Gane, ahora lárgate, que puedo perfectamente yo sola.

De repente me siento muy débil y solo se que caigo. Tengo los ojos cerrados.

¿Me estrelle contra el suelo? No siento nada de dolor.

Siento y escucho una respiración frente a mi.
Frente a mi cara.

Abro los ojos suavemente.

Lo tengo a el.
O mas bien el me tiene a mi en sus brazos.

Con una mano toma parte de mi mejilla izquierda y de mi cuello. Obligandome un poco acercarme a sus labios.

Bajo la mirada a ellos.
Son tan provocativos. Tan ardientes.

Levanto la mirada hacia sus ojos nuevamente. Me observa fijamente con una mirada llena de amor y deseo.

De repente solo siento unos labios fríos sobre los míos que intentan entrar en los míos perfectamente.

¿Que esta sucediendo?

Sabes que... Me vale mierda. No habrá nunca una segunda oportunidad, como estas.

Le permito entrar en mi boca. Correspondo el beso con una danza sin fin con nuestras lenguas. Su respiración se esta agitando y yo simplemente olvide como hacerlo.

-Nomas no se vayan a tragantar.- Escucho una voz femenina proveniente de la entrada en esta misma habitación.