Capitulo Ocho

100 4 3
                                    

Yo retrocedo completamente hacia atrás de el. Pierdo un poco el equilibrio. Alcanzó a detenerme de la cama y me siento en ella.

Volteo hacia la entrada y es Abby con... Gabriel a un lado.

- No... no... es lo que tu... tu... crees.- Le digo tartamudeando.

- No hay problema alguno. Solo pasábamos a ver como estabas. Pero si hubiéramos sabido que estas muuuuy ocupada...- Dirige la mirada hacia el idiota que me acaba de besar. - No estaríamos aquí, arruinando su momento de pasión.

-Ja ja ja. Que graciosa.- Le redondo sarcásticamente.

-Yo siempre.- Me responde finalizando con un guiño.

Volteo hacia el.
Me estoy percatando que ni siquiera se su nombre. Debo preguntárselo.

Pfff... Mejor que el lo haga.

Claro, si es que le llega a interesar.

Soy demasiada orgullosa como para hacerlo yo.

Aun que de verdad me importe saberlo. No, no.
Nada de tonterías, Sofia.

Levanto la mirada, algo tímida hacia el.

El simplemente me devuelve la mirada demasiada llena de victoria y orgullo.

Que tonta. De seguro solo esta jugando conmigo.

Cambio totalmente mi mirada. Ahora lo veo molesta.

Me percato que Gabriel y Abby están platicando muy entretenidos dentro de la habitación. Así que aprovecho para hablarle al idiota.

-¿Que es lo que estas haciendo? Acaso... ¿Estas jugando conmigo, retrasado?- Le pregunto sin despegar los ojos de los suyos.

-Tu no quisiste darme tu nombre. Así que tuve que investigarlo, trayéndote al hospital.- Me observa en forma de que... Ohh si nena soy bien sexy. -Después, de enterarme, que te llamas Sofia. Por cierto bonito nombre, como para una niñita que lo posee. Quería conocerte un poco más. Ya que fue una estupida, manera de saber tu nombre. Pensé que volviendo a comenzar todo de nuevo, seria una buena manera para comenzar.- Suelta un suspiro de agotamiento. -Tu me estabas retando para que me largara. Supe perfectamente que no ibas a poder sostenerte tu sola en pie. Pero eres mas terca que nadie.

-¿Saber de mi?- Me detengo a pensarlo un segundo. - No seas, tonto. "Forma de comenzar de nuevo"- Digo y al mismo tiempo muevo los dedos, colocando comillas en mis palabras. -Por favor.- Finalizó sarcásticamente en mis palabras y cruzándome de brazos.

- Mira Sofia, conmigo no te funciona en absoluto ese tonito.- Me toma con fuerza de un brazo.

-Me estas lastimando.- Respondo entre dientes con un susurro que se perfectamente que es audible para el.

Volteo hacia atrás. Supervisando que ni Abby como Gabriel, no se hayan percatado.

Al devolver la mirada hacia el. Me suelta el brazo con un poco de brusquedad.

Suelto un suspiro y me relajo. Seguimos sin despegar la mirada mutuamente.

-Sofia, veo que ya terminaron de ligar. Eso me alegra. Ya que así puedo platicar contigo. Ah, claro Jose también.- Me dice Abby, mientras que se acerca a mi junto con José.

Se acerca José hacia mi. Sonríe al hacerlo.

No es por nada pero, tiene una muy bonita sonrisa.

El machote idiota se sienta en el mismo sofá que estaba. Toma nuevamente su libro, suelta un gran suspiro antes de comenzar a leer.

Gabriel pasa un brazo por mi cuello y me acerca hacia el para darme un abrazo.

-¿Cómo te encuentras, bonita?- Me pregunta Gabriel en mi oído casi como un susurro.

-Aquí en un hospital. Que por cierto jugando Ajedrez.- Respondo sarcásticamente.

-Tu y tus sarcasmos. Yo muy bien, gracias por preguntar.

Le planto un pequeño beso en su mejilla antes de soltarnos.

-¿Y yo que?- Pregunta Abby

Se acerca y me abraza cariñosamente.

-Hay química aquí.- Me susurra al oído.

Nos separamos, la veo directamente a los ojos y suelto una pequeña frisa.

Giro la cabeza y la mirada hacia el... desconocido.

Esta muy entretenido en su lectura.

•••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••

Estuve como dos horas platicando con Gabriel y Abby.

El tema de conversación fue sobre la escuela, sobre la chica de Gabriel y sobre el chico con el que Abby estuvo besándose.

Prefirió no dar muchos detalles, hasta que estuviéramos a solas ella y yo.

Durante la platica le desconocido salió de la habitación. Supuestamente iría a la cafetería a desayunar algo.

En este momento me encuentro sola en la habitación. Ya que hace treinta minutos se pasaron a retirar Abby y Gabriel.

Decido tomar una pequeña siesta.

•••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••

- Sofia.- Siento como mueven mi lado de un lado y al otro. -Sofia, despierta.

Abro los ojos suavemente.

Lo tengo frente a mi. Es irresistiblemente muy atractivo.

-Te han dado, ya de alta. Podrás irte a casa.- Termina de decir.

-¿Ahora?- Le pregunto con cara confusa.

-Si, ahora.

-Estoy en desventaja.- Le aseguro.

Me mira con cara de confusión.

-¿A que te refieres?- Me pregunta con un tono muy varonil.

-Tu nombre.- Lo señalo ligeramente con mi dedo índice -No lo se.- Respondo un poco mas amable que las veces anteriores.

-Mi nombre es...- Se detiene por un momento.

Es demasiado lento. Con un tono de suspenso que no es nada agradable.

---------------------------------------------------------------------------------------

YA SOMOS 350 LECTORES, PUEDE SER QUE SEAN POCOS. PERO PARA MI ES UN GRAN AVANCE Y ESTOY FELIZ CUANDO AVANZA UNO.

LOS QUIERO MUCHÍSIMO. Y YA SABEN, COMENTEN SU OPINIÓN, SI LES GUSTARÍA QUE CONTINUARÁ LA HISTORIA, ETC...

GRACIAS, MUCHÍSIMAS GRACIAS. LOS AMO MIS LECTORES FAVORITOS.

Secretos Oscuros. (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora