Capitulo Diez

101 5 1
                                    

¡Mis amores!

Se que el capitulo anterior no estuvo muy largo, pero tuve algunas fallas técnica y el capítulo se elimino completo, así que tuve que volverlo hacer. Espero que les haya gustado y que les guste este. Será mas bien como un extra del anterior con el capítulo diez. Solo lo publique para que no volverá a pasar. ¡Los amo! Ya vamos por los 600.

--------------------------------------------

Cuando estoy por llegar a mi habitación siento como algo coge de mi brazo fuertemente. Me doy vuelta para ver quien es. Sebastián. Siento como me apego a el, cierro lo ojos y escucho que abre la puerta de mi habitación. Entramos y me estampa contra la pared con fuerza.

Gruño por el impacto. Abro los ojos, me encuentro con el horrible y descuidado rostro del idiota de mi hermano.

-Me estas lastimando, idiota.- Le digo haciendo una mueca de dolor para que se de cuenta que realmente me hace daño.

-Necesito que me ayudes.- Me dice en tono molesto y amenazador.

-No pienso ayudarte, estupido. No es la manera de tratar a tu hermana.- Le espetó en el rostro. - Sueltame, que no se te olvide que mamá esta abajo y perfectamente me puedo oír si llego a gritar. Así que ahora, suéltame que me lastimas.

-¿Crees que no me doy cuenta, niña?- Me responde soltando algunas gotas de saliva en mi rostro. Mi única reacción ante ello es cerrar los ojos y echar la cabeza de lado. Me toma ferozmente de la barbilla, con su enorme mano. Obligándome a mirarlo fijamente. -Lo tengo fríamente todo calculado.- Me guiña una ojo. -Mama. Ocupada. Jardín. Con hermanas, así que.- Desvía por un momento la mirada de mis ojos, hacia la entrada de mi habitación. -¿Me ayudaras o no, querida hermanita?- Devuelve su fija mirada a mi.

-Eres un estupido genio.- Sonrío retándolo. -Esta bien.- Coloco mi mano sobre su su pecho tratando de empujarlo fuera de mi. -Pero eso si, me debes muchos favores. Mama puede enterarse. Principalmente por el grande permiso que me otorgaste.- Le devuelvo el mismo guiño. -Es bueno aprovecharse de ti, cuando estas ebrio.

Me toma por la cintura, me carga hasta mi cama y me suelta violentamente en ella. Trato de recuperarme de la caída cuando siento sus piernas alrededor de mi cintura.

Abro bien los ojos y me percato que esta encima de mi a hurtillas. Coloco mis dos manos en cada uno de sus hombro y vuelvo a tratar de empujarlo. Es demasiado fuerte, así que no tuve absolutamente nada de éxito. Toma fuertemente con sus manos, mis brazos y los presiona sobre su pecho. Teniéndome indefensa bajo el.

-Eres igual que a tu estupido padre.- Me dice entre dientes.

Empiezo a parpadear seguido, tratando de controlar las lagrimas. Su comentario se paso de la linea. Se percata de ello y sonríe.

-Ahora iras conmigo quieras o no.- Me plata un sincero beso en mi frente. Me suelta los brazos y se aleja de mi, saliendo de mi habitación.

-Idiota.- Digo en susurro una vez que se aleja.

***********

Termino de vestirme. Me coloco una blusa blanca un poco suelta que muestra ligeramente mi vientre. Con unos pantalones negros pegados a mis largas piernas. Unos pequeños tacones rojos y un gran sombrero negro con unas gafas para el sol, de color café.

Vibra mi movil. Lo tomo de mi mesita de noche.

Un mensaje de Abby.

Abby: Hey Sofia, estoy aquí ya en la cita con Jasper. ¿Quien crees que esta aquí?

Torno los ojos. Odio que ande con rodeos.

Sofia: ¿Quién? Ah, otra cosa. Se supone que debes estar ligando con Jasper, no poniéndole más atención a tu celular.

Secretos Oscuros. (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora