Un Amor Lésbico Complicado

Capitulo 5.

Suena Carta al pasado de Brock Ansiolítico, una de las canciones que más me hacían reflexionar, así que me bajé del columpio, me senté sobre la valla del parque y deje que mis pensamientos fluyeran, solo así me quitaría un peso de ensima, pero algo me interrumpe, era un ruido, tal ves de un accidente de coche, o algo que habría caído de alguno de los balcones de las casas más cercanas, me volteo aver que era, pero no lo logro ver nada, me preocupaba ese ruido, así que decidí regresar a casa, la noche comenzaba a ponerse tensa, pero mediante el regreso se escuchaban ruidos más cerca mio, entonces aceleré el paso, hasta que veo a lo lejos una sombra venia en mi dirección. Cambié de calle para evitar cualquier problema pero esta ves, la sombra estaba dirigiéndose hacia mi, detrás mía, así que corrí, me metía por callejones, no paraba de perseguirme, ¿que quiere de mi? ¿Quién era? ¿Porque me perseguía? Las preguntas no paraban de sonar en mi cabeza, así que corría con más velocidad, con más miedo, hasta que encontré un callejón sin salida, no sabía donde me encontraba, pero solo quería estar a salvo de esa persona que no por desgracia, me dejaría ir sin más, me escondí tras una pared y logré distraerla, suspiré de desesperación, no sabía que hacer y que iba a ocurrir pero garantizaba que nada bueno, me tomé un respiro pero creo que eso fué lo que hizo que me buscara con más ansias, estaba acorralada, no podía salir de allí y no había nadie cerca o alguna puerta o vecino que pudiera ayudarme.
En un abrir y cerrar de ojos, ese extraño estaba frente a mí, me había encontrado, y ya, no tenía salida, estaba perdida. Tenía un pasamontañas puesto en la cabeza tapándose el rostro, no lograba ver con claridad de quién se trataba. Intenté huir, pero me tenía acorralada en el callejón que encontré, entre 3 altas paredes y él extraño bloqueando mi salida. Se acercaba lentamente hacia mi, algo quería pero no me dejaría, quería salir, quería chillar pero nadie me hubiera escuchado, pero cuando quize reaccionar estaba a varios pasos de mi, no tenía escapatoria, dejé que me dijera que quería, pero solo se paró en seco y me observó durante un rato, hasta que se destapó el rostro y pude ver de quien se trataba. Había cambiado por completo, su rostro era pálido, sus ojos estaban hinchados, sus mofletes estaban rozados más de lo que solían ser, sus ojos no tenían el mismo color que antes, y parecía querer transmitirme algo sin ser utilizadas las palabras, se trataba de Alexandra, no sabía y sabré nunca que era lo que quería de mi, pero nada bueno después de recibir la carta de advertencia. Siguió plasmada delante de mi, y decidí reaccionar, sentí con toda mi vida que lo que hice no tenía perdón, pero el miedo se apoderaba de mí. Corría tras lo echo, corría sin parar de llorar, no podía creer que la había golpeado de esa forma, no me atrevía a darme la vuelta, pero sabía que estaba tirada en el suelo por mi culpa, la quería pero necesitaba salir de ese sitio, porque sino sería yo la siguiente víctima. Después de ese día, no volví a saber nada más de ella...