GYEYANGSAN

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Tres meses atrás...

Faltaban horas para su boda con el jefe He Sung. Él y su tía Wen se han encargado de los preparativos para la celebración. Los mejores platillos y vinos serán servidos, todo ha sido decorado con muchas flores los invitados son todos miembros de la milicia y autoridades de Incheon. Todos aquellos a los que He Sung quiere impresionar con una magnífica boda.

Yunho se arreglaba frente al espejo de su habitación, trataba de ocultar con maquillaje el golpe en su mejilla, el que le había dado Sung cuando le encontró volviendo a su lado. Ya solo era una marca morada ya que la inflamación había desaparecido. Su reflejo le repetía algo que sabía perfectamente, que era un pobre miserable. Aun así, sonrió amargamente colocándose el traje ceremonial para casarse ¿Acaso tenía otra opción? Claro que no. ¿A dónde podía ir? ¿A dónde escapar sin desatar la ira de He Sung sobre sus padres? ¿Lo odiaba? Tal vez no, pero ahora simplemente había dejado de sentir odio, amor, tristeza, alegría... muerto en vida.

El omega se encamino al salón más grande la propiedad de He Sung donde se realizaría la boda, cada paso se sentía más pesado que el anterior, pensando por última vez en Mingi, en el alfa que era su pareja destinada, su alma gemela, quien le había dejado solo. Había sentido un gran amor por él, pero ahora se había acabado y de que le servía sentirlo cuando solo le causaba dolor. Así lo decidió, esa sería la última vez que pensaría en aquel hombre, luego lo olvidaría para siempre.

"¿Estás listo Yunho?" pregunto Wen al encontrarlo a la entrada del salón.

"Sí, señora" respondió.

"Trata de no avergonzar a mi sobrino" respondió con ironía, realmente no odiaba al menor, su desprecio era solamente el reflejo de toda la situación con He Sung, su amor era prohibido. Amar al hijo de su hermano no estaba permitido ante la sociedad, y verlo ser feliz con alguien más le causaba un inmenso dolor. Pero esto era lo que Sung quería y ella no tenia como oponerse.

Los Señores Jeong habían sufrido tanto por la muerte de Minji y ahora por el sacrificio de Yunho. Estaban allí, pero ni siquiera habían podido hablar con él. Sung no lo habia permitido y el omega debía caminar al altar sin ser acompañado por ninguno de ellos. He Sung lo esperaba junto al Coronel Chau quien realizaría la ceremonia. Yunho camino por el pasillo sosteniendo un ramo de jazmines, ni siquiera le agradaba el olor de aquellas flores, pero como en otras cosas el no tenía opinión alguna. 

El Jefe He estaba orgulloso de finalmente obtener lo que deseaba. No podía esperar a marcar esta noche a Yunho, morder su cuello mientras lo hacía suyo. La ceremonia empezó y frente a todos quedaron unidos oficialmente. Yunho Sung lo besó impetuosamente, pero Yunho apenas correspondió.

Finalmente, sus padres pudieron acercarse, su madre lo abrazó a modo de consuelo y su padre no podía ni verlo a los ojos, no había podido hacer nada por su hijo. También sus amigos Hongjoong y Yeosang estaban allí, el jefe He había permitido al omega invitarlos. Ellos le abrazaron dándole consuelo, tratando de darle fuerzas, le notaron un poco cansado y pálido, pero Yunho les dijo que había estado un poco enfermo tal vez resfriado, que no era nada, y que no se preocuparan por él.

"Te invitare a mi boda en cuanto vuelva Seonghwa" anunció Hongjoong sonriéndole.

"Espero poder ir, se que serás muy feliz. ¿Y tú Yeosang con Jongho?"

"Pues, no sé si nos casaremos, aunque prácticamente ya lo estamos" dijo sonrojándose y volviéndose para mostrarle la marca en su cuello del lazo entre Jongho y él. Yunho le sonrió y le felicito "Eres muy afortunado y también Jongho, serán una gran pareja, me alegro por ti".

"¡Yunho gracias! No olvides que puedes contar conmigo y seguro con Jongho en lo que necesites".

"Gracias, estaré bien, no te preocupes" a pesar de todo lo que estaba viviendo el omega parecía estar tranquilo, pero Yeosang pudo ver su tristeza.

EL DRAGÓN DEL MAR-Adaptación [Yungi, Jongsang y Seongjoong] 《ATEEZ》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora