- ¡Mitchell, llegaron tus padres! - escuche a mi amiga Lilian gritarme, viendo que mis padres habían llegado junto con sus perros Perdita y Pongo. Rápidamente camine hasta ellos, jalando a Carlos de la mano sin darle oportunidad para que se huyera.
- Hola mamá y papá, les quiero presentar a una persona muy importante, mi novio - puse a Carlos enfrente mío, con mis manos en sus hombros como señal de apoyo - Él es Carlos DeVil, del que ya les había hablado y comentado que no es nada parecido a su mamá - Hola chicos, también me da mucho verlos - también salude a los perros, que movían la cola y daban brincos muy cortos por su avanzada edad.
- Ho-hola señores Radcliffe, un gusto en conocerlos - saludo Carlos muy tímido, sintiendo como daba un par de pasos hacia atrás, tal vez por miedo de que reacción puedan tener mis padres.
- Un gusto Carlos - le respondió el saludo mi mamá, siendo lo mas amable y dulce, al menos lo intentaba. Pero mi papá no, él seguía ahí parado sin decir nada y con una cara que daba miedo. La situación era parecida con Perdita y Pongo, Perdita actuaba tímida pero Pongo parecía que en cualquier momento mordería a Carlos.
- ¿Te gustan los perros? - fue lo que pregunto mi papá, no entendiendo a que su pregunta.
- ¡Me encantan los perros!, de hecho tengo uno, ¡ven Chico! - el perro llego corriendo al escuchar la voz de Carlos, brincando para que lo cargara - Me lo regalo el príncipe Benjamín, ¿no es lindo?
- Que lindo perro, no tiene raza pero eso no le quita lo hermoso que es - mi madre se acerco para acariciarlo, mi padre también pero todavía serio y sin mucha confianza - Se ven lindos juntos, se nota que te quiere mucho.
- Obvio que lo quiero mamá, por algo es mi novio -
- No hablaba de ti hijo, me refería a Chico - ok, eso fue vergonzoso y humillante - Pero ustedes dos también se ven lindos, deberías llevarlo un día a la casa para comer.
- Recuerda que los perros son familia, no cosas para hacer abrigos de piel - ay papá, no puedes guardar tus comentarios. Comienzo a creer que en todos lados hay un Paken, siempre alguien con sus comentarios tontos.
- ¡Roger!, guarda tus comentarios por favor - le regaño mi mamá, viéndolo con una de sus miradas que hacia que hiciéramos todo lo que quiera.
- No soy como mi madre, entiendo que ella les hizo cosas horribles, pero le aseguro que yo nunca le haría daño a ningún animal - dijo Carlos muy seguro de sus palabras, algo que me sorprendió incluso a mi.
- Entendemos que tú no tienes la culpa de nada de eso, mi hijo te quiere y estoy de acuerdo en su elección. Eres un chico bueno y noble, se te nota en tu mirada - mi madre le dio la ¿bendición?, no se como llamarlo, pero me pone feliz que le haya dicho eso.
- Muchas gracias mamá de Mitch -
- Esta bien, debo aceptar que también estoy contento por que seas novio de mi hijo - wow, mi papá acaba de decir eso - Solo espero que no hagas sufrir a mi hijo. También lo siento por mi comportamiento, pero creía que serias igual de ella.
- Haré todo de mi parte para no hacerlo sufrir - Carlos ya sonreía como siempre, diría que incluso mas feliz que cuando lo conocí.
- Bueno, vayan a divertirse con sus amigos, nosotros iremos con algunos amigos - mi madre se despidió de mi y luego de mi novio. Ella no fue la única, Perdita y Pongo también se despedían.
<< ¿Crees que sea un buen chico? >> le pregunto Pongo a Perdita, que por obvias razones solamente Perdita podía escucharlo, al igual que Chico.
<< Les aseguro que es buen chico, me alimenta diario y me acaricia la barriga >> les dijo Chico, que todavía seguía en los brazos de su dueño.
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Amor De Dálmatas (Carlos DeVil x Male Reader)
FanfictionUn chico que fue criado para amar a los perros y otro que fue criado para odiar a los perros. Dos chicos tan diferentes, que por cosas del destino y un príncipe, se conocerán y surgirá una extraña sensación entre los dos chicos. Carlos De Vil hijo d...