Tommy Shelby × Lectora
Advertencia: maldición, Tommy mandón, básicamente Tommy enloqueciendo, yo siempre lo ame con toda mi alma.
Tumblr: thepeakyfckingblinders
Palabras: 3074
El aire gélido de Birmingham golpeó tu piel sensible sin piedad tan pronto como tus zapatos rojos cruzaron la puerta del Garrison, solo para hundirse vergonzosamente en en el tierra fangosa grisácea en la que todo Small Heath parecía estar cubierto.
Tus dedos se sentían como apéndices rígidos sobre tus brazos ya cansados, mientras hacías todo lo posible para envolverte alrededor de los bordes de tu abrigo, en un esfuerzo desesperado por mantener ese tejido caliente en tus clavículas que quedaron expuestas por el vestido de lanas que usabas. No importa cuantas ropas pesadas decidiste ponerte, ese frío implacable logró hacerte sentirte constantemente sin fuerza, debilitándote hasta la médula; siempre había sido así, ya que no eras más que una muchacha obligada a pasar uno cada dos meses encerrada en su dormitorio, afligida por una fiebre increíblemente alta y en ocasiones hasta bronquitis.
La verdad era que tu cuerpo nunca se había acostumbrado al clima húmedo de Inglaterra, sin embargo, aunque tu mala salud anteriormente te había puesto en peligro, por tu bien, gracias a los enormes avances logrados por la medicina en los últimos quince años, ahora era fácil luchar contra el frío implacable de esos inviernos interminables. Además, desde los primeros días de tu asistencia, tu armario se había renovado perpetuamente con piezas de alta calidad perfectamente en sintonía con el cambio climático, ya que tu prometido te había estado cubriendo literalmente con pieles y edredones de todo tipo, preocupado de como te ibas a encontrar eventualmente por haber agarrado otra fiebre fuerte, cuyas consecuencias mortales ya había experimentado en su propia piel. Y sin ninguna razón del mundo, no se habría arriesgado a perderte a ti también.
Entonces, como todo el mundo podría haber predicho fácilmente, Thomas estaba plenamente prestando atención a tu bienestar: los especialistas más famosos de dentro y fuera del Reino Unido habían venido directamente a su casa de campo; si algo se puede dar por sentado es que tus medicamentos siempre estarán colocados en tu mesilla de noche, junto con un vaso de agua fresca, todos los días y todas las noches; y, contra viento y marea, te acompañaba en tus visitas de rutina al hospital, incluso cuando eso significaba dejar sus asuntos sin previo aviso.
No hace falta decir que eras perfectamente capaz de hacer esas cosas por tu cuenta, excepto por tener una multitud de médicos en tu sala de estar, y as intentado de persuadirlo de que no había tanta necesidad de estar tan preocupado todo el tiempo; aun así; era Tommy Shelby, simplemente no podías evitarlo.
La preocupación por la vida de sus queridos no dejaba de robarle el sueño, incluso esas noches en las que no había rastro de peligros inminentes en el horizonte, seguía escoriando las entrañas de sus seso drenados, hasta el punto de que, más de una vez, habías tenido que dormir sola en su inmensa cama tamaño king o tenías que alcanzarlo en su estudio, acurrucado en uno de sus incómodos sillones, lista para apaciguar sus miedos lo mejor que pudieras. En resumen, por mucho que necesitara que se relajara, aún podías comprender su comportamiento protector, contra el cual, de hecho, nadie podía hacer mucho; así que al menos trataste de no darle más razones para que se preocupara, prestaste atención a todas esas pequeñas cosas que podías resolver sin que Tommy lo supiera. Tomabas regularmente tus pastillas de hierro, por ejemplo.
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One-Shots Of Peaky Blinder
Fanfiction𝐁𝐲 𝐨𝐫𝐝𝐞𝐫 𝐨𝐟 𝐭𝐡𝐞 𝐩𝐞𝐚𝐤𝐲 𝐛𝐥𝐢𝐧𝐝𝐞𝐫𝐬 Este es un pequeño espacio para aquellos fanáticos de los peaky blinderes, así que si os apatece entrar a leer historias sobre ellos adelante, sois bienvenidos. Todas las historias que están aq...