Parte 5

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Kageyama salió de la oficina hacia la mansión, una vez leído el maldito estudio ese ya sabría cómo manejarse con Shoyo.

Había sentido dolor en su vínculo y no sabía por qué, eso lo tenía desconcertado. 

Podrían conversar una vez que salieran de la casa de su suegra, pero eso nunca pasó.

Cuando llegó a su domicilio Tsukishima lo estaba esperando, siendo su jefe de laboratorio y amigo se saludaron con un apretón de brazos.


-¿Cómo va todo? ¿Qué tal sigue Yamaguchi con el embarazo?-preguntó Tobio.

-Estamos excelente, la verdad ya estoy ansioso de que nazca el bebé y se termine el tema de las malditas hormonas y los antojos raros, el miércoles salí por helado de melón a las dos de la madrugada y se lo comió con queso parmesano mientras lloraba mirando una película de dibujitos- respondió Kei entre risas- nunca podré pagarte lo que hiciste por nosotros. Salvar a Tadashi de esos traficantes fue lo más grande que hiciste por mí, siendo un beta fértil era muy cotizado en el mercado negro, que lograras recuperarlo cuando lo secuestraron y nos permitieras formar una familia cambió mi vida para siempre, mientras viva vas a tener mi lealtad.

Tobio estaba emocionado, apadrinar a ese niño que pronto llegaría al mundo lo hacía feliz, era un sueño el ser padre algún día y desde su adolescencia supo que eso no ocurriría jamás. Su padre le dejó muy claro que era un alfa distinto, que no podría jamás embarazar a una o un omega ordinarios y mucho menos a una beta u otra alfa, por eso la noticia de Hinata le cayó como una bomba y prefirió dejarlo solo antes de hacer una locura en un ataque de ira. No soportaba que Shoyo lo engañara, pero tampoco quería golpearlo.


-Te traje esto, es mejor que lo veas solo, me retiro.-Kei estrechó la mano de su amigo y se retiró.

Kageyama tomó el sobre mientras se dirigía a su estudio, saludó a Suga y se encerró, con una actitud entre triste y soberbia.

Ya sabía con lo que se encontraría, pero igual quería leer el contenido del informe, abrió el sobre, lo leyó y cayó al suelo de rodillas derrotado, empezó a llorar y gritar como un loco.

Al sentir como caían cosas y se rompían vidrios Suga se acercó rápido, tuvo que usar su llave maestra para abrir la puerta y calmar a su jefe y amigo, lo abrazó mientras este lloraba como un niño.

Le preguntó que ocurría y entra lágrimas Tobio respondió,

- ¡Lo perdí! ¡Lo perdí todo! Después de esto jamás volverá, lo perdí para siempre....

- ya, ya, que ha pasado

-Lee.....

-Paciente: Kageyama Shoyo, 22 años de edad, sexo: Masculino,

-segundo género: Omega, Rango: sss

-Embrión de 12 +/- 1 semana

- Informe de prueba de ADN para conocimiento propio

-Caso 1/00 para el sujeto XXXXX

-¿Esta tabla inentendible también? .- preguntó Suga

- No, lo importante es lo de abajo.

Suga continuó leyendo:

-Índice de paternidad combinado: 1, 636,656,                     Probabilidad de paternidad 99, 9999%

-"El presunto padre no es excluido como el padre biológico del embrión estudiado. Basándose en los resultados de los análisis obtenidos de los loci de ADN listados, la probabilidad de paternidad es de 99, 9999%. Esta probabilidad de paternidad fue calculada en un individuo al azar de la población general, no analizado y no relacionado (asume una probabilidad previa igual a 0,5)."


-Sugawara quedó estático, un omega rango sss, purísimo, único en su clase, no se habían visto en siglos.....

-Entiendes....era mío, ¡era mío por Dios santo!.- su lobo aullaba de dolor y él se desgarraba la garganta mientras seguía llorando.

Lo había perdido todo.

Bailando con fantasmasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora