Two Souls|| Draco Malfoy(+18)

XII

Lo siento

Draco cogió las cosas en silencio, me quede en la puerta vigilando. Tenia que irme de aquí pero no sabia como hacerlo ¿Cómo se lo explico a Draco? ¿Cómo le digo que mis pesadillas han vuelto?

- Vamos -me acaricio el brazo- no te preocupes saldremos de esta.

- Mientras no me des otro golpe en la cabeza para desmayarme.

- ¿Enserio? ¿Ahora sacas eso?

- Ya hablaremos de todo.

- No se si prefiero que me atrapen.

- Cállate y vamos, ya no hay nadie.

Agarre a Draco de la solapa de la camiseta y lo saque de ahí, seguramente la gente vería estúpido que dos magos se escapen sin usar magia, pero lo que no sabe la mayoría es que la magia deja rastro y así es mas fácil de rastrearnos.

Draco miraba por todas partes, le hubiera venido bien tener tres cabezas como el perro de Hogwarts y hablando sobre ello extrañaba a ese maldito perro, extrañaba Hogwarts y mi vida allí.

- _________ te necesito centrada.

- Perdón, divago últimamente mucho en mis recuerdos.

- Tendrás tiempo para eso cuando estemos a salvo.

- Espera -susurre agarrándole.

Unos bichos bastantes raros pasaron de largo ¿Qué coño era eso? Eran mas grande que un humano, tenían cuernos en la cabeza y pequeños bigotes, no sabría como decirlo parecía una mezcla de bastantes animales.

- Ya te explicare.

- No se en que coño estas metido Malfoy, pero necesito saberlo todo.

- Te lo prometo.

Estuvimos como tres horas distrayendo a los bichos con muestras falsas de nuestro olor, hasta que Draco vio conveniente que ya podíamos ir a ponernos a salvo.

Me llevo hasta una pequeña cabaña abandona en un campo ¿Cómo este hombre conocía tan bien la ciudad muggle? ¿Desde cuando? El odiaba todo este mundo, odiaba a los muggles, a los sangre sucia y a todo el mundo que se le ponía por medio.

- ¿Estas bien?

- No -lo mire- siento que me he perdido tanto, ya ni siquiera se quien eres -suspire- has cambiado tanto, no eres aquel chico idiota que intentaba copiar a su padre.

- __________...

- ¿Qué es lo que te paso? ¿Por qué estas huyendo? ¿Qué es lo que buscan?

- Tuve que arreglar todo el estropicio que mi padre creo, no sabes lo que es que todos te miren sabiendo que eres un traidor -resoplo- que estuviste en el lado equivocado de la batalla, estuve escuchando tantos insultos a mi espalda que me tuve que obligar a ser fuerte necesitaba hacerlo.

- Draco...

- No hay día que me arrepienta de haberte hecho borrar la memoria, pero no quería que pasaras por todo eso -me miro- siempre te has merecido a alguien muchísimo mejor que yo, a alguien de verdad -movía sus dedos nervioso- Siento tanto que Scorpius tenga que vivir de esta manera, que su madre cada día vaya olvidando quien es hasta que llegue su momento -mordió sus labios- no sabes lo que es verla apagarse de esa manera, no de la manera que crees nosotros nunca nos amamos pero ella estuvo apoyándome en todo momento -agarre sus manos y le sonreí- Scorpius tiene un poder increíble, no se la razón de ello pero desde que nació supe que era especial aprendía mas rápido que los demás niños, se aburría en las clases y siempre corregía a sus profesores, su magia era demasiado grande para el hasta el punto de hacerlo enfermar -me miro- lo necesitan para revivirlo, para que su alma se complete en el cuerpo de mi hijo y no puedo permitir eso, no puedo dejar que lo traigan de vuelta y mucho menos que lo hagan con mi hijo, no puedo perderlo.

- No pasara -sonreí- no dejare que eso pase.

- Lo se -sonrió- siempre lo he sabido.

- Draco ese chico es tremendamente fuerte estará haciéndolo bien.

Draco acaricio mis mejillas y me beso, lo había extrañado y sabia que el también lo había hecho. Me lo demostraba en el beso y la forma de acariciarme intentado recordarlo todo, todos los momentos que habíamos pasado juntos.

Me subí encima de el acariciándole el cuello, el paso la mano por mi camiseta acariciándome la espalda. Mi cuerpo ardía cada vez que tocaba cualquier parte, todo mi ser era suyo.

Le quite la camiseta por la cabeza y la tire por cualquier sitio de la habitación. Lo escuche reír entre mi pecho, le hacia gracia verme de esta manera.

- Idiota.

Chille cuando me movio y me apoyo en el suelo poniendo el encima, beso mi cuello hasta llegar a mi pecho y bajar, ni siquiera estaba rozando mi piel y ya tenia los vellos de punta.

- Este idiota te encanta -me quito la camiseta- puede ponerte a mil sin ni siquiera tocar tu piel -paso su dedo desde mis pechos hasta mi ombligo deslizándolo- tu cuerpo siempre ha sido mío, completamente mío.

Estiro su cuello hasta tocar unos de mis pechos y lo lamio, mientras con la otra mano bajaba mis pantalones. No pude evitar los gemidos que salían de mi boca, todo mi cuerpo actuaba como si estuviera separado de mi, como si el lo manejara completamente.

- Hueles igual.

- No digas tontería -gemí.

- Lo digo de verdad -me acaricio por encima de mis bragas- hueles como siempre.

- Dra-draco...

Sonrió y beso mi barriga hasta bajar mis bragas por completo, subió de nuevo a mi y me miro.

- No tengo tiempo ni ganas para hacerlo lento -me miro- te necesito ya.

Me beso mientras me penetraba, había extrañado esta sensación, estar completamente juntos, sin nadie mas a nuestro alrededor.

Se movía de manera brusca y rápida mientras me miraba a los ojos, no los apartaba ni un segundo.

- Mírame.

Obedecí y lo miré en todo momento, no quería perderme ni un movimiento de su cara, no quería volver a perderlo nunca mas.

- Te amo Draco.

- Yo también te amo __________.

Me beso moviéndose mas rápido, estaba acercándose a su clímax podía notarlo por como tensaba sus brazos y se entrecortaba su respiración.

- Córrete conmigo -susurro en mi oído.

Como mi cuerpo estaba controlado por el, hizo exactamente lo que me pidió. Los dos llegamos al clímax juntos.

- Ha sido mejor de lo que pensaba -me beso la frente- demasiado rápido para mi gusto.

- La próxima vez podremos demorarnos mas.

- Si, la próxima vez.

Me abrazo mientras se quedaba dormido. Me sentía culpable por lo que iba a hacer, pero no podía dejar que cogieran a Scorpius tenia que arreglarlo yo misma, me preferían a mi antes que a Scorpius.

Me aparté de sus brazos y me vestí, Draco hizo un movimiento, pero volvió a dormir.

- Pronto volveré.

Besé su frente y salí de ahí, necesitaba acabar con esto lo antes posible.