La chica de mis sueños

Capitulo VI

-hijo te veo animado hoy- dice mama que me trae el desayuno a la cama

-me siento mucho mejor mama-

-que alivio escuchar eso hijo- dice dándome un beso en la mejilla, yo sonrió

-termina tu desayuno y alístate, hoy tienes cita con la psicóloga- dice marchándose de la habitación

-ya no es necesario- grito mientras ella se aleja, pero dudo que me haya escuchado.

Luego del desayuno voy a la ducha, sorprendido veo que las heridas en mis pies han sanado totalmente, y seguramente también el brazo, ella era la causante de todo esto no entiendo como lo hacia, pero siento un gran alivio por haberme librado de esa pesadilla. Quien pensaría que el tonto de tod podría ayudarme y sin embargo me dio la solución a esto.

-¿hijo que haces?- dice mama sorprendida

-alistarme mama, ¿no fue eso lo que me pediste?-

-seguramente te lastimaste las heridas-

-ya sanaron mama- digo mostrandole los pies

-que extraño, ayer se veían muy mal- dice confusa

-pues ya ves, las medicinas son efectivas-

-en mis tiempos las cosas eran distintas- dice sonriendo, -apresúrate la psicóloga ya esta aquí-

Salgo de la habitación y veo a la psicóloga sentada frente al escritorio del estudio de papa.

-hola Mario- dice con una sonrisa agradable

-hola- respondo

-toma asiento- dice señalando la silla frente a ella

-vera doctora, creo que estas terapias ya no serán necesarias- digo intentando hacer esto lo mas breve posible

-¿que dices?-

-lo que escucho-

-¿seguro de lo que dices Mario?- pregunta observándome de una forma extraña

-seguro- respondo

-¿encontraste la forma de controlar tus sueños?-

-si, así es-

-cuéntame, ¿Cómo lo hiciste?-

-me convencí que solo son eso, sueños-

-¿Qué sucedió con ella?-

-habla de ella, como alguien real- digo extrañado

-fue real para ti, o no?-

-¿y porque dice que lo fue?-

-eh, pues me dices que ya lo tienes controlado, supongo que te convenciste que ella no es real-

-así es, no es real, no existe-

-¿aparece aun en tus sueños?-

-encontré la manera de sacarla de ellos-

-¿que hiciste Mario?- dice y noto un tono extraño en sus palabras

-la asesine-

-¿pero que dices?, no se puede asesinar a alguien que no existe-

-pues ya ve, yo si pude hacerlo-

-humm Mario pequeño, creo que esto te ha afectado mucho-

-¿que intenta decir?-

-esto ha afectado tu mente, empiezo a creer que todo lo has creado tu, debes decirme la verdad yo solo quiero ayudarte-

-como puede ayudarme, ¿si no confía en mi?-