ENGAÑOS //BAKUSHIMA//(FINALIZADA)

capítulo III

Había pasado ya una semana desde la llegada de kirishima, la cual provocó que deku se pusiera celoso, y tratara de despreciar al pelirrojo, pero no contaba con que bakugou lo defendería, así que tuvo que pedirle perdón además de que estaba bajo una amenaza de bakugou.

El pelirrojo se encontraba en la sala de grabación de la empresa para el nuevo comercia que promocionaba una nueva marca de artículos de joyería para hombre;cadenas y relojes de lujo bañados entre diamante,oro o plata.

Traspaso la tarde completa, la cual no era muy tranquila, pues desde todo ese día había estado de lugar en lugar se sentía tan cansado, que moriría ahí mismo, y eso no parecía ser todo si no que el cielo se había comenzado a llenar de aquellas nubes grises que indicaban una fuerte lluvia.

Al caer aproximadamente las 6:00 pm la lluvia comenzó con una leve chispas, pero se fue intensificando cada minuto que pasaba asta el punto de caer granizo,esto no era muy bueno que dijeran como es que si se encontraban en pleno verano, tiempo en donde tienes que estar muriendo de calor había comenzado la grandes lluvias, podría ser por que pronto se acercaba el otoño pero aun así, los cambios de clima nunca le habían caído bien al pelirrojo, pues le provocaba enfermedades.

Tuvo que esperar hasta que el chófer llegará por el, esperando en la entrada donde el granizo de había comenzado a caer por todo su cuerpo si no hubiera sido por que llevaba una chamarra con la que cubría su cabeza este ya estaría todo mojado, y este pesaría un gran resfriado.

Ya después de unos largos minutos apareció el chofer,parando enfrente para que ingresara, entro lo más rápido posible que no se había percatado que ahí mismo se encontraba el cenizo, saludo amablemente para después dar la vuelta hacia la ventana tratando de evitar a toda costa que estos chocarán miradas.

-kirishima- pronunció el cenizo, con un voz demasiado tranquila, lo cual sorprendió rápidamente al pelirrojo, volteando inconcientemete hacia bakugou-te miras demasiado mojado, colócate este saco para que no te resfries-dijo mientras se quitaba un gran saco, que a lo lejos se notaba que valía un ojo de la cara, pues era de un color negro oscuro, el color más negro que haya visto en su vida a demás de que tenía un bordado en la esquina del saco de un dorado divino

-bakugou...pero tu no te vas a enfermar si te lo quitas-pregunto con una leve cantidad de nervios.

-aqui solo importa que tu no te enfermes-término de quitarse el saco por completo para colocarlo en la espalda de kirishima, asiendo que el pelirrojo se comenzará a sonrojar de un leve carmín rosado, siendo descubierto por el cenizo quien de igual manera se comenzó a sonrojar-no te hagas ilusiones, es por que eres el modelo principal de la empresa y seria una lastima que te enfermaras.

Esas últimas palabras decilusionaron a kirishima, quien solo se cubrió por completo tapándose con el saco el rostro para encubrir su verguenza- si lo-lo entiendo-dijo en voz baja para voltear de nuevamente a la ventana.

Aquel saco emprendía un olor tan peculiar a un rico perfumen, comenzó a olerlo determinadamente tratando que el cenizo no se percatara, ese delicioso olor aún seguía ahi, el cenizo no había cambiado aquel perfume después de todo.

La fragancia de un olor fuerte que se podía penetrar en cualquier lugar pero al mismo momento era un olor delicado a avainillado, la primera vez que esa fragancia había aparecido en su vida, le recordó al cenizo y no dudo en regalarle ese perfume y aunque no era de una marca muy reconocida ni lujosa como las que solía usar el rubio, le había encantado desde entonces comenzó a utilizar ese perfume.

Miles de sentimientos y recuerdos le eran presente en esa fragancia.

Con cada recuerdo que se mostraba en la mente de kirishima sus mejillas se tornaban cada vez más de un color rojizo;el olor que desprendía de la almohada cuando acababan de juntar sus cuerpos, junto con el sudor que desprendían por las largas horas que disfrutaban del sexo, y el recordar los dolores que le provocaba el cenizo por las largas y duras embestidas que le daba, sin olvidar como en su entrepierna escurría cierto líquido. Y lo mejor de todo era que el perfume del rubio se pegaba al olor de su piel, eso era lo que más le encantaba,el tener ese olor ten agradable.

Su rostro no pudo más hasta llegó a crear un competencia con su cabello rojizo.

-kirishima!!!-grito el rubio asustado al notar el gran cambio de tonalidad de la piel de kirishima, llevando su mano asta la frente de este, quien solo lo miraba a los ojos- no puede ser kirishima te esta dando calentura.

Kirishima estaba más que avergonzado, sentía que hervía y todo por aquella "calentura" del momento.

-no te preocupes kiri, no tardamos en llegar a casa, cuando lleguemos le hablaré a un médico para que te cheque- pronunciaba el cenizo que se encontraba asustado por la salud de kirishima....

//IMPORTANTE //

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Por cierto hoy también se actualizan las otras dos historias.