Al otro lado

-4-

¡¿Otra vez?!
¡¿Por qué?!
¡¿Por qué sigue pasando esto?!
*
Salí lo más rápido que pude de mi habitación. Apenas pude terminar de leer lo que decía aquella nota en la pantalla apagada del televisor. Lo peor es que no puedo quitarla; la nota apareció del otro lado del reflejo. No quiero pensar más en eso. No quiero imaginar más estas cosas. Es todo mentira. Es un mal sueño. ¡Tiene que serlo!
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Me dirigí inmediatamente a la puerta de entrada. Ni siquiera paré a preguntar quién había tocado el timbre. Por fortuna, se trataba de alguien que conocía muy bien. Alguien por quien ahora tenía sentimientos encontrados. No sabía si abrazarlo por la angustia que me atacaba o golpearlo por el enojo que me invadía. Me nació recibirlo con una mezcla de ambos.
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Mi amigo se mantuvo totalmente quieto, casi paralizado por haberme lanzado sobre él de una forma tan sorpresiva. Seguro estaba tratando de entender por qué lo estaba abrazando con tanta fuerza al mismo tiempo que descargaba mi desesperación sobre su oído izquierdo. Nos mantuvimos así durante unos instantes hasta que él decidió apartarme un poco. Intentó tranquilizarme a medida que le contaba cada una de las cosas que habían sucedido. Después de todo, fue él quien me habló sobre ese espantoso juego.
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Afortunadamente, según me contó, estoy a tiempo de remediar las cosas. Esta "entidad", por llamarlo de alguna forma, parece manifestarse cada vez que entro en contacto con alguna superficie que refleje mi apariencia. Lo único que debo hacer es esperar su próximo mensaje y hacer lo que me acababa de explicar. Con algo de suerte, esto sería lo último extraño que ocurriría. No puedo creer que este atravesando por algo así. Parece algo salido de alguna película de cosas paranormales. Pero es real. Demasiado real.
*
Sin embargo, de todo lo que me explicó, solo una cosa quedó resonando una y otra vez dentro de mi cabeza. Algo que esperaba no fuera a cumplirse.
"Es muy probable que esto termine, pero quizás no de forma pacífica".
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