enamorado de mi amiga

Mandadero

Después de esperar a que el felino volviera durante la noche, la joven no pego el ojo en ningún momento.

Sus pensamientos estaban revueltos.

¡Tenia dos opciones! ... Tal vez más.

Ya no tres, después de todo, ya sabía que Adrien y Chat noir eran la misma persona.

Osea que le gusta a Adrien y a Chat noir.

Al menos él se le declaró a ella y no fue al revés, si no, no hubiera sobrevivido después de decir sus sentimientos, se hubiera muerto sin tener un hámster juntos.

-¿Le gustara la carta?

Tikki se removió en la almohada de la azabache, desde que se acostó para "dormir" La azabache se hacia esa pregunta.

-Mañana lo sabrás si la gatubela vuelve con un sobre. -gruño la kwami.

¡Pero no podía esperar hasta la noche!

Ahora que lo pensaba detenidamente y sin ser taaan complicada... ¿Por qué no mandó su respuesta por mensaje? Bueno en parte usaba al super héroe como mandadero para reírse de él.

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En la habitación de Adrien.

El rubio estaba brincando por toda su habitación bajo la mirada de su kwami come queso.

No cabía de tanta felicidad.

Era inevitable que no diera un grito al ver la respuesta de su querida.

Leyó y releyo la carta, hasta se pellizco para ver si no estaba soñando.

¡Todo fue real! ¡No era un sueño!

-Ah como jodes teñido. Al fin y al cabo tu ya sabias sobre los sentimientos de la niña bonita.

Adrien se cruzó de brazos con el ceño fruncido.

Ya ni festejar algo que ya sabias se puede.

-Ahora como la voy a ver a la cara, osea ya somos novios pero... Aaaaah todavía no proceso la información.

Gritó mientras daba vueltas nervioso.

Ya se había imaginado la respuesta pero nunca taaaan así como lo dijo su NOVIA.

Ya se vió paseándose con Marinette de la mano.
frente a Luka.

Tal vez le quitó su oportunidad de declaración en un momento, pero la recuperó y ahora tiene una novia bien chula.

-Ya me imagino la jeta de Luka cara de Momo café.

-Couffaine- corrigió el kwami para después comerse un pedazo de queso.

-Dijo que se apellidaba café, te quito queso su me corriges.

-Por eso digo que se apellida café.
Le importaba más el queso que andar corrigiendo a gente pende... A Adrien.

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La bella y pacífica noche calló.

-¡Ya llegué chiquitita! -Gritó el héroe felino, ignorando esta vez al vecino que otra vez le estaba aventando la madre- Marinette.

La azabache salió al balcón con los ojos más o menos abiertos.

Tenía tanto sueño y la culpa era del individuo frente a ella que no le había dejado mimir agustín.

Se rascó la mejilla y luego bostezó.