Capítulo 7: "Perdones y descargas"

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Maratón 1/3

-Buen día, Laura. -dijo la rubia bajando por las escaleras- ¿Cómo has dormido?

-Hola Rydel. -Sonreí- Muy bien, ¿y tú?

-Igual. -acomodó su cabello detrás de su oreja y correspondió a la sonrisa- ¿Te quedas a desayunar, o ya te irás?

-No me iré aún, tengo que preguntarle a Stormie que debo que hacer hoy. Si no es molestia, me quedo. Pero permíteme hacer el desayuno.

-Está bien, Lau. Si insistes.

Sonrió y yo me retiré hacia la cocina. Abrí la puerta y allí seguía el rubio, sentado en el taburete. ¿Arrepentido? No lo sé, pero así se veía.

-¿Sigues aquí? -pregunté sin mirarlo-

-Claro, y seguiré aquí hasta que aceptes escuchar mis disculpas.

-¿Sabes Ross? Ya está, no hay nada que aclarar. Que perdonar si, claro. Pero te perdono, no hay nada más que hablar.

-Nerd. -dijo con el tono insistente-

-¿Qué? -le pregunté ya harta de él y girando mis ojos-

-Se que no me perdonas enserio.

-Claro que lo hago, te perdono Ross. ¡YA! ¿Que más quieres? Puedo cántartelo si deseas, pero déjame trabajar.

-Eres dura. -bufó- ¿Sabes? Intento ser cortés contigo, pero lo único que haces es rechazar mis disculpas. ¡Ya no te entiendo!

-Claro. Intentas ser cortés conmigo ahora. Luego de que el error ya fue cometido. Luego de que llevas un año de tu vida molestándome. Diciéndome cosas horribles. ¿Crees que podría tomarme de buen modo tus disculpas? -Dije casi gritando- Si yo te disculpo, ¿cambiarán las cosas? Claro que no. Por más de que yo intente llevarme bien contigo, es inútil. Seguirás llamándome ''nerd'' ''tonta'' ''estúpida'' ''irritante'' o todas esas cosas que siempre me dices, y que el resto también. ¿Crees que es bonita mi vida? -Ross estaba callado, no formulaba ni una palabra. Sólo me observaba.- Respóndeme. ¿Crees que es bonita mi vida? -repetí la pregunta, él no respondió.- ¿Ahora te callas? Está bien. Te responderé yo misma. -dije poniendo énfasis en yo- NO. Mi vida no es bonita, para nada. ¿Crees algo bonito que mi madre esté enferma, y que yo tenga que salir a trabajar para poder pagarle sus medicamentos y sus tratamientos para tener a mi mamá conmigo más tiempo? ¿Crees algo bonito que todo el mundo te insulte todo el tiempo? ¿Crees algo bonito que nadie te quiera? ¿Sentirte ignorada todo el tiempo? ¿Que solo sepan decir cosas horribles sobre ti solo porque amas estudiar? -Largué algunas lágrimas- ¿Sabes cuantas amigas tengo, Ross? DOS. Y una de ellas es Rydel. ¿Sabes cómo se siente pasar por todo lo que yo paso? No. Claro que no lo sabes. Tú tienes la vida que todo el mundo sueña, a ti todos te quieren. No te falta nada. No tienes que trabajar. Aquí todo lo hago yo, exacto. Tú piensas que porque tienes todo lo que quieres y eres feliz, el resto también lo es. Y por eso crees que nadie tiene sentimientos como tú. ¿Sabes qué? estoy cansada. Cansada de que todo el mundo piense que soy feliz sólo porque siempre sonrío. Estoy harta de todos, estoy harta de ti. -Rompí en llanto-

-La-Laura. Yo... -tartamudeó nervioso. Pero yo lo interrumpí-

-Vete por favor, déjame hacer el desayuno y no me molestes por una vez en tu vida.

-No Laura, espera, déjame... -lo interrumpí-

-Vete, te estoy pidiendo por favor.

-Está bien. Sólo... que... Lo siento. -dijo mirándome, antes de salir de la cocina.-

Yo sólo asentí, y limpié mis lágrimas. No quería que alguien más entrara y me viera así.

Necesitaba decirle todas esas cosas. Necesitaba descargarme.

Ya no soportaba ser la estúpida de siempre.

Solo quería que entienda por una vez en su vida que no todos somos felices.

Y creo que por primera vez, entendió.

[...]

-Narra Ross-

Subí las escaleras y me dirigí hacia ¬mi habitación.

Sentía algo que nunca en mi vida había sentido antes.

¿Qué era aquello que me ocurría?

¿Me estaba volviendo loco?

No. Claro que no.

Lo que sentía era dolor, y lo sabía muy bien.

¿Saben por qué, verdad?

Claro. Todos lo sabemos. Me sentía mal por Laura.

Realmente no se desde cuándo, ni por qué.

A mí jamás me importa el resto, para nada. Y sé que suena feo. Pero es la estúpida realidad. Siempre pienso en mí, es como si yo estuviera solo en el mundo. Y no pienso cambiar eso, no quiero sufrir por los demás. Pero debo admitir que esta vez fue distinto, sentí dolor al ver llorar a Laura. Me quebré al oír sus palabras. Siento que ella no merece vivir la vida que lleva.

Se la ve tan indefensa.

Soy un idiota, nunca antes había hecho llorar a una chica. Y tampoco me gusta hacerlo.

Sé que me veo como un estúpido que sólo piensa en alcohol, fiestas y chicas. Pero es normal. Soy un adolescente, no soy raro por eso.

Definitivamente algo no está normal en mí, sueno raro diciendo estas cosas. Quién me conoce diría que estoy enloqueciendo. Pero sólo hay algo que es verdad, Laura me hacía sentir diferente. Y todavía... No sabía el por qué.

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¡holaaaa! Creo que esperaban mucho otro capítulo, ¿no?
Bueno, acá está la parte 1 de la maratón.
En un rato o quizá mañana subiré las otras dos partes.
Perdón, es un poco corto:( pero sepan disculparme please, estoy armando mi otro fic y el one Shot y no puedo con todo.
Igualmente espero que les guste, prometo hacer más largas las otras partes!

[Si quieren lean el One Shot Raura publicado «Olvidándote»]

Disfruten el cap!

Los quiero.

¿que es aquello llamado amor?; raura |pausada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora