— ¿Qué haces?
Alzó la vista del trozo de pergamino donde estaba garabateando para dirigir la mirada a Sasuke, quien venía de afuera y lo había encontrado concentrado plasmando pensamientos sobre papel.
—Le escribo una carta a Kakashi-sensei. —le contestó, mostrando su característica sonrisa. —Le prometí que escribiría seguido y ya hace casi un mes que me fui.
—Espero que no estés pensando en contarle todo lo que ha ocurrido a Kakashi. —le dijo con un filo de advertencia en su voz.
— ¡No! —se apresuró a responder. —No pienso darle material para que después pase recordándomelo cada maldito segundo.
El Uchiha curvó los labios en una sonrisa burlona y se acercó a paso lento al rubio mientras este doblaba la carta para guardarla. El Uzumaki se puso de pie y le extendió el papel, a lo que el pelinegro asintió en respuesta, comprendiendo la petición de enviársela al Sexto Hokage con su halcón.
— ¿Estás listo?
En lugar de contestar, el alfa tomó su mochila ya preparada y la guardó en un pergamino de almacenamiento, en lugar de llevarla sobre su espalda como había hecho al inicio.
Salieron juntos de la cabaña.
Ahora que un par de días habían pasado desde el celo de Sasuke y que ambos hubieran recuperado energías, tomaron la determinación de abandonar la pequeña choza que habían ocupado para reanudar el viaje que el Uchiha había emprendido hace más de dos años.
Esta vez, en lugar de irse solo, iba con Naruto junto a él.
Esta vez irían juntos, como compañeros.
Esta vez marcarían un nuevo inicio para ambos, dejando los errores del pasado atrás y caminando hacia un nuevo y más brillante futuro juntos.
---
Viajar con Naruto definitivamente fue toda una experiencia.
El rubio siempre había sido una persona hiperactiva, que podía distraerse con cualquier cosa. Aunque ya hubieran pasado varios años de haber dejado atrás su infancia y que el trauma, la guerra y todas sus experiencias los hubieran moldeado en las personas que se habían convertido ahora, había cosas que no cambiaban.
Como el hecho de que Naruto jamás cerraba la boca.
Comenzó hablando sobre las cosas que veían y lo que iban encontrando, y luego hablaba de extrañar Ichiraku, y luego sobre las aventuras en sus viajes con Jiraiya, y luego sobre cualquier cosa que se le viniera a la mente.
Pero Sasuke lo dejó parlotear todo lo que quisiera. Naruto se veía feliz y le sonreía radiantemente cada vez que sus ojos se posaban en él. A veces presentía que lo miraba como si fuera un espejismo y fuera a desaparecer en cualquier momento, y su corazón punzaba culpable por ser el principal responsable de su sufrimiento por tanto tiempo.
El alfa actuaba como si todos esos años de miseria y sufrimiento jamás hubieran pasado. Como si solo hubiera salido de Konoha de vacaciones por un par de semanas en lugar de años.
Era como ser niños de nuevo, cuando eran jóvenes, inexpertos y recién enlazados. Puede que en aquel entonces hubiera sido un accidente, pero el vínculo que compartían como compañeros era cualquier cosa menos eso. Era real, fuerte y le llenaba el alma de calidez.
No tuvieron tiempo de llegar a comprender bien del todo su unión cuando eran genin. Apenas unos meses después Orochimaru había aparecido y había envenenado su enlace. Antes de eso habían estado acostumbrándose a su nueva realidad como compañeros de vida. Su dinámica no había cambiado mucho, seguían siendo novios como lo habían sido oficialmente desde que se graduaron de la Academia. No hicieron nada más allá de tomarse de la mano o pasarse un brazo por los hombros.

YOU ARE READING
Vínculo
FanfictionNaruto y Sasuke sabían que estaban destinados a ser compañeros desde niños y, cuando tuvieron su primer celo, no pudieron controlar sus instintos y terminaron enlazándose, teniendo ambos apenas 12 años. Cuando Sasuke se marchó de la aldea con la int...