- ¿Qué haces acá Niño rico?- preguntó al ver a Eros uniéndose a mi lado y mirar al mismo árbol que yo.
- La canción que estabas tarareando, ¿cual es? - pregunta ignorando por completo mi pregunta.
- Remember When de Wallows - digo con orgullo y una media sonrisa se forma en mi rostro.
- No la conozco - se encogió de hombros restándole importancia y dirigiendo su vista a otro punto.
- ¿QUÉ MIERDA DICES?- le grite sorprendida y con enojo.
- Te lo juro - dice mirándome y yo me indigno.
- En verdad te odio - le hago una mueca de disgusto quitando mi mirada de el.
- Te vas a terminar enamorando de mi Polly Pocket - exclamo con orgullo.
- Nunca me enamoraría de una persona que no escucha Wallows- digo con voz seria.
- Uy, pues lo siento - dice cruzándose de brazos.
- ¿Qué tipo de música escuchas? talvez tengas una oportunidad conmigo.
- ¿Prometes no reírte? - pregunta y yo asiento - One Direction es de mis favoritas.
Una enorme carcajada sale de mis pulmones y empiezo a retorcerme de la risa.
AYUDA ME HAGO PIPI.
-¿Cuántos años tienes, ocho?- preguntó irónicamente llena de sarcasmo y aun riendo.
- Prometiste no reírte - tenía una expresión de seriedad en su rostro y supe que habla en serio.
- Eres realmente raro, pero admito que fui a uno de sus conciertos cuando era una niña - lo miro y el ríe.
- Tengo todos sus discos y póster - me presumió con orgullo y a la ves entre risas
- Eres raro -
-¿Lo siento? - me miro con una expresión de disgusto y confusión.
- No, fue un cumplido - suspiro y me limito a reír de lado.
- Tuz cumplidos son los raros - suspiro de mal gusto.
- ¿Canción favorita de One Direction? - digo en un intento de aliviar la tensión que se formó en el ambiente.
- Best Song Ever - dice con un brinco de emoción como si fuera un niño pequeño.
- Eres patético - digo meneando mi cabeza para los lados.
Por unos segundos hubo silencio hasta que empecé a escuchar una tonada de una canción. Gire mi cabeza hacia donde provenía la música y vi a Eros con su celular en la mano y la canción que antes me menciono se escuchaba de el.
- ¿No extrañas tener 8 años? - me preguntó con entusiasmo y yo lo miré seria - No es un pecado bailar canciones de One Direction- volvió a decir.
- No pienso hacerlo, así que ni lo intentes - sacudí mi cabeza y volví a dirigir mi vista a otro lado.
Unas manos me jalaron de la cintura haciendo que mi torso se despegue del balcón. Eros me veía con su típica sonrisa y yo negué con la cabeza.
MOMENTO PARA PONER LA CANCION DE ARRIBA (ADELANTENLE AL MINUTO 2:33)
- No lo volveré hacer - dije mientras intentaba soltarme de su agarre.
- Solo esta canción y ya - me hizo un puchero que yo encontré patético y rodé los ojos.
Odio a este chico y todo el poder que tiene sobre mi.
ESTÁS LEYENDO
Cigarrillos de lluvia
Ficção AdolescenteQuien diría que fumar un cigarrillo bajo la lluvia iniciaría una aventura y una historia inolvidable. . Charlotte Beckett se niega a volver abrir las puertas de su corazón pero Eros Lavrov luchará para hacerla cambiar de opinión, Para ella, el sol...